Enfermedades transmitidas por contacto directo |
Existe un pequeño número de patógenos para los que la puerta de entrada es la piel o las membranas mucosas y que para su transmisión dependen del contacto directo.
Este grupo incluye a los agentes causantes de las enfermedades venéreas sífilis y gonorrea. El organismo responsable en cada caso no puede vivir largo rato fuera del hospedador y requiere el contacto directo de las membranas mucosas para su transmisión. El acto sexual es, por lo tanto, uno de los principales medios de propagar estas enfermedades, aunque la sífilis puede adquirirse también antes del nacimiento, y la gonorrea durante el nacimiento, a partir de una madre infectada. En los trópicos existen varias enfermedades causadas por organismos estrechamente relacionados con el agente de la sífilis que normalmente no se transmiten mediante la relación sexual. Todas ellas se inician como infecciones de la piel y requieren el contacto directo para su transmisión. La frambesia o pian es un ejemplo de este grupo. Otras tres enfermedades no venéreas que son transmisibles por contacto directo son el carbunco, la tularemia y la brucelosis. Todas son enfermedades de los animales que pueden ser transmitidas al hombre. La brucelosis, una enfermedad de las cabras, ganado vacuno y porcino, constituye un severo riesgo ocupacional para las personas que manejan animales, incluidos los veterinarios, matarifes y trabajadores relacionados con los productos lácteos. La tularemia, una enfermedad de roedores salvajes, la contraen con frecuencia los cazadores y los carniceros que manejan piezas de caza salvaje.
Ver tabla enfermedades bacterianas transmitidas por contacto directo