Microscopio: tejidos y
células
Aunque la amalgama de la clásica medicina galénica con sus comentarios árabes aún seguía dominando la práctica médica, las antiguas teorías médicas basadas en los humores ya no podían permanecer en pie ante el progreso de la química y la biología. No obstante, a principios del XIX aún no se había encontrado con qué sustituirla. Consecuencia de ello fue una era de especulaciones arbitrarias y de construcción de sistemas en que charlatanes inspirados como Mesmer, con su magnetismo animal, y anatomistas presuntuosos como Gall, con su "frenología", consiguieron muchos adeptos. Al propio tiempo, la renovación del interés por la anatomía y la fisiología condujo a los mayores progresos obtenidos desde el Renacimiento en la comprensión del organismo, sano o enfermo. Bichat (1771-1802), en su corta vida, volvió a fundar virtualmente la patología, y por medio de un paciente estudio de la estructura de los diferentes órganos llegó a distinguir los tejidos (nervioso, arterial, venoso, muscular, fibroso, glandular y epidérmico) comunes a todos ellos. A este estudio siguieron otros, en los que los nuevos microscopios acromáticos de Amici (1827) permitieron obtener una mayor penetración en la fina estructura de los tejidos que la que había sido posible a los pioneros del siglo XVII, iniciándose la histología.. Se advirtió que los tejidos estaban a su vez compuestos por células: cuadrangulares en el hígado, alargadas en los músculos y enormemente alargadas en los nervios.
Antonio Van
Leeuwenhoek (1632-1723) La teoría celular Como señalaban en 1839 Schleiden (1804-81) y Schwann (1810- 82) todo el cuerpo puede ser considerado como una colonia de células y, lo que es más, todas las células nacen de una sola o, mas exactamente, de dos: el óvulo y el espermatozoide. Además, todos los seres vivos están formados por células. El desarrollo real del organismo a partir del óvulo fertilizado había sido seguido por von Baer (1792-1876) casi al mismo tiempo. La. nueva ciencia de la embriología virtualmente fundó von Baer, también puso de manifiesto las relaciones de parentesco entre diferentes animales, agrupándolos según el phylum correspondiente (así, vertebrados, etc.). La teoría celular convirtió en inteligible el desarrollo del individuo de la misma manera que la de la evolución natural hizo inteligible el desarrollo de las especies; ambas parecían seguir caminos paralelos de la evolución. Cajal y su microscopio. Pulsa aquí para saber más El empleo del microscopio en todos los campos de la biología empezó a revelar complicaciones insospechadas, pero en sus primeros estadios tuvo pocos efectos en la práctica real. Solamente cuando se empezaron a estudiar los animales y plantas más simples – los hongos - y las simplicísimas entidades unicelulares de los protozoos y bacterias pudo llegarse a comprender algo de la vida y de las funciones de las células, y con ello la posibilidad de control de los organismos vivos. |
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