3.1. Sala : escultura barroca en Italia y Francia

Perseo y Andrómeda de Pierre Puget

Imagen en Wikimedia Commons. Dominio público

La escultura barroca va a seguir el camino iniciado por la obra renacentista en cuanto a temática y material utilizado, pero va a variar de forma evidente en el tratamiento estético que se le da a la creación artística, especialmente en el caso italiano, donde la figura de Bernini, como veremos, marca toda una pauta estética, por momentos imposible de seguir.

Ya la escultura renacentista había mostrado una capacidad de cambio asombrosa con respecto al gótico. La vuelta a la estética clásica, les hace recuperar la senda de la armonía y del equilibrio y también les hace recuperar temas que habían sido abandonados, sobre todo la temática mitológica e incluso la retratística.

El barroco va a continuar esta línea. Mantiene temas mitológicos, alternados con otros puramente católicos y otros retratísticos. Mantiene también el material, ya que pocas veces se saldrá de la obra en mármol, pero romperá la línea iniciada por el renacimiento en el tratamiento de las figuras, en la cuestión estética.

Como en la arquitectura, el barroco huye de la calma y del equilibrio. Lo que busca es romper, expresar, gritar, que la naturaleza fluya por cada pieza y que el espectador tenga la sensación de que está delante de algo vivo.

La escultura barroca es un canto a las texturas delicadas y al movimiento, a la naturalidad y, cómo no, al engaño del ojo. Nada nuevo, recuerda a Flaubert cuando dijo “Ama el arte, de todos los engaños, es el que menos miente”

A lo largo de las dos salas que vamos a visitar a continuación, podremos disfrutar de la escultura barroca en dos países diferentes, cada una con su estilo, pero ambas con el denominador común del barroco.

En Italia disfrutaremos del quizá uno de los más geniales escultores de la historia del arte como fue Bernini. En Francia, nos acercaremos a una obra más pausada, más clásica, pero también tremendamente interesante.

Así que ¡entra y a disfrutar de la visita!

ITALIA

La escultura barroca en Italia aparece liderada por un personaje absolutamente genial: Gian Lorenzo Bernini. Su capacidad artística es tremenda, demostró en su faceta como arquitecto. En la escultura, su influencia va a ser todavía mayor, si cabe.

La obra de Bernini es el paradigma de lo barroco: su obra transmite potencia, pasión, sutileza, brillantez… Su genialidad es tal que le permite trasladar al mármol texturas que son más propias de la seda, de una finura y un etéreo que rayan lo imposible. Pero a la vez es capaz de expresar sentimientos de miedo, de fuerza, de éxtasis…

Sus retratos son todo un tratado de cómo sacar partido expresivo a un busto.

Solo un genio como él podía llegas a exprimir tanto las posibilidades de un material tan duro y difícil de moldear como el mármol.

Bernini aprovecha cualquier temática para su arte: mitología, pasajes del Antiguo Testamento, temática cristiana, retratos… Pero siempre hay un denominador común que no es otro que el de la expresividad. Bernini necesita contar cosas de la forma más natural y más expresiva posible.

Y no podemos dejar de hablar de ese concepto tan definitorio para el barroco como es el de la integración de las artes. Bernini integra a la perfección, esculturas que se retuercen, con un marco arquitectónico perfecto y una luminosidad atrayente, generando esas escenas de arte total, como veremos en el diseño que hace de la Capilla Cornaro.

David

Obra: David

Tipo: Escultura

Estilo: Barroco

Localización: Galería Borghese

Autor: Bernini

Fecha: 1624

Reproducción del David en 3 D

Imagen en Wikimedia Commons. Dominio público

Representación del futuro rey David justo antes de lanzar la honda que mató al gigante Goliat.

Ni siquiera tenía 30 años cuando Bernini hace esta interpretación del pasaje del Antiguo Testamento en el que David mata a Goliat. Bernini elige representar el momento más adecuado dentro de los deseos del barroco, el de mayor esfuerzo físico, el que requiere mayor movimiento y mayor expresividad, el momento en que la honda está en su máxima extensión, justo antes de que la piedra vuele hasta la cabeza del gigante. Durante el Renacimiento, Miguel Ángel había elegido el momento de recogimiento antes de la batalla, Donatello el momento posterior a la victoria. Todos momentos tensos, pero de equilibrio. Bernini rompe con esto y decide ser todo lo audaz que puede. El resultado es tremendo, todos los músculos representados del cuerpo de David están en tensión, el giro que hace con el torso es absolutamente magistral, y la expresión facial es perfecta, la tensión se recoge sobre todo en esos labios apretados que sirven de concentración para la victoria. En fin, una obra perfecta.

Apolo y Dafne

Obra: Apolo y Dafne

Tipo: Escultura

Estilo: Barroco

Localización: Galería Borghese

Autor: Bernini

Fecha: 1625

Bernini capta el momento en el que Dafne comienza a convertirse en árbol de laurel justo cuando Apolo la está alcanzando. Esto genera un movimiento helicoidal y unas expresiones tremendamente interesantes.

Apolo y Dafne

Imagen en Wikimedia Commons. Dominio público

Es quizá una de sus obras más conocidas. Bernini, en su deseo por captar momentos tremendamente expresivos y elocuentes, elige el instante en que Apolo logra dar alcance a Dafne, quién ha pedido a los dioses ayuda para escapar de los brazos del enamorado dios, convirtiéndola en árbol de Laurel. Bernini, como decíamos, capta justo el instante en el que Apolo alcanza a Dafne mientras ésta ya se está convirtiendo en Laurel.

La escena genera una composición de un movimiento sublime, a modo de hélice ascendente que llevan al espectador a levantar la mirada casi hasta el cielo. Los rostros de ambos personajes expresan justo la realidad, el horror de Dafne y la sorpresa de Apolo.

El tratamiento del mármol es genial. Los dedos de Dafne se van convirtiendo en hojas de laurel, a la vez que sus piernas se convierten en el tronco. No es difícil imaginarse lo que ocurrirá poco después, cuando la ninfa se haya convertido definitivamente en árbol y Apolo se marche desolado y enamorado.

Es, sencillamente, maravilloso. La capacidad para recrear un momento concreto del mito, tan exigente, tan triste y, cómo no, tan bello.

Éxtasis de Santa Teresa

Obra: Éxtasis de Santa Teresa

Tipo: Escultura

Estilo: Barroco

Localización: Capilla Cornaro, Iglesia de Santa María la Victoria, Roma

Autor: Bernini

El éxtasis de Santa Teresa

Imgen en Wikimedia Commons. Dominio público

El mejor ejemplo de la integración de las artes. Santa Teresa aparece en éxtasis mientras un ángel se preparar para clavarle un dardo de oro en el corazón. Detrás de la escena aparecen unos rayos de sol en bronce dorado que representa a Dios.

Detalle del éxtasis de Santa Teresa

Imgen en Wikimedia Commons. Dominio público

El diseño de la Capilla Cornaro es quizá el ejemplo más impresionante de esa idea de la que hablábamos al principio: la integración de las artes. Bernini reorganiza todo un espacio en la iglesia de Santa María de la Victoria, creando un espacio a modo de escenario en el que no duda en abrir el techo de la iglesia para que la sensación sea aún más teatral.

Dicho escenario enmarca un grupo escultórico que representa el momento en el que Santa Teresa recibe a Dios. Bernini, asumiendo que esa sensación debe ser imposible de narrar a través de la escultura, decide coger como idea lo que la propia santa cuenta en su obra “Vida”, en la que narra cómo un ángel le clava un dardo de oro en el corazón, dardo ardiendo, con el que la santa recibe a la vez un dolor terrible, pero también un amor abrasador.

De ahí que plantee a una Santa apoyada en una nube de mármol, casi desmayada, que se retuerce a la vez de amor y de dolor ante un ángel listo para clavarle de nuevo ese dardo dorado y con punta de fuego. La escena se culmina con unos rayos de sol hechos en bronce que representan a Dios mostrándose a Santa Teresa.

El hecho de abrir un vano en la capilla aumenta la sensación de luminosidad asociada a Dios, gracias a los reflejos del solo sobre los rayos dorados.

 

 

FRANCIA

Al igual que en arquitectura, la escultura francesa va a tener un poso más clásico que la italiana, es decir, sus obras van a ser más calmadas, más armónicas y menos expresivas que las italianas.

En realidad esto no es más que una proyección del gusto de la monarquía francesa por este lujo más clásico y más reposado que hemos visto en los palacios de Versalles o del Louvre.

Frente a una mayoría de temas religiosos en Italia (y ya veremos que en España también), Francia plantea una dualidad que a veces casa: un gusto por los temas mitológicos y por la retratística.

Las dos grandes figuras de la escultura barroca serán François Girardon y Antoine Coysevox, cada uno con unas características particulares, pero ambas con el denominador común de ese clasicismo del que ya hemos hablado.

Apolo servido por ninfas

Obra: Apolo servido por ninfas

Tipo: Escultura

Estilo: barroco

Localización: Palacio de Versalles

Autor: Girardon

Fecha: 1673

Apolo servido por Ninfas

Imagen de Juanluru en Flickr. Licencia CC

Conjunto escultórico que se encuentra en los jardines de Versalles. Aparece Apolo sentado mientras unas ninfas le asean.

Este grupo escultórico es la viva imagen del clasicismo barroco francés. Unas esculturas técnicamente perfectas, pero con poca capacidad expresiva e inspiradas descaradamente en la escultura helenística.

El dios Apolo, que representa al Sol en la mitología clásica, aparece rodeado por cuatro ninfas que le acicalan y asean. Seguro que rápidamente entiendes la simbología del conjunto, sobre todo si recuerdas que Luis XIV era conocido como el Rey Sol. Pues sí, parece ser que es una representación del rey francés.

Busto de Luis XIV

Obra: Busto de Luis XIV

Tipo: Escultura

Estilo: barroco

Localización: Museo de Bellas artes de Dijon

Autor: Coysevox

Fecha: 1686

Magnífico busto del rey sol, en el que se puede observar la capacidad para transmitir la psicología del personaje.

Busto de Luis XIV

Imagen en Wikimedia Commons.

Dominio público

Coysevox es el otro gran escultor del barroco francés. Su obra continúa la línea marcada por Girardon ya que, al fin y al cabo, ése era el gusto de la corte francesa (que era quién encargaba y, por lo tanto, pagaba las obras).

Coysevox mantiene ese gusto por lo clásico, sin grandes movimientos ni expresividades. Prefiere moverse por un camino más clásico, más armónico. Eso lo muestra en sus obras mitológicas, como la Diana Cazadora (que en realidad es un retrato de María Adelaida de Saboya), pero también en retratos tremendamente interesantes como el que vemos aquí de Luis XIV. El rey aparece representado con una potente mirada al frente y la cabeza algo subida, lo que muestra cierta altivez, confianza y seguridad. En realidad, a pesar de ser sólo un busto, Coysevox es capaz de transmitir gran parte de la psicología de un personaje tan característico como fue el Rey Sol.

 

Objetivos

La escultura de Bernini

Desgraciadamente nuestro museo no es tan grande como nos gustaría, así que hemos tenido que centrarnos en solo tres obras. De todos modos, si quieres conocer más esculturas del genio italiano, observa el vídeo que te dejamos a continuación: 


La escultura de Bernini

Vídeo de ARTHISTORIA alojado en YouTube

Las mejores obras de Bernini

Y si quieres disfrutar con unas imágenes realmente espectaculares del Éxtasis de Santa Teresa, observa estos vídeos:

Éxtasis de Santa Teresa

Vídeo de cordobiya 13 alojado en YouTube

Apolo y Dafne

Vídeo de Juan de Mairena alojado en YouTube


Vivo sin vivir en mí

Los versos de Santa Teresa en los que se apoyó Bernini para concebir su obra “El éxtasis de Santa Teresa” en la capilla Cornaro han servido de inspiración para otros artistas. Aquí te dejamos un vídeo con estos versos cantados por Amancio Prada, que capta a la perfección esa necesidad de unir el alma humana con la divinidad


Vivo sin vivir en mi

Vídeo de Antistenes1 alojado en YouTube

Objetivos

Rapto de Proserpina de Francois Girardon

Imagen en Wikimedia Commons. Dominio público

Desde el siglo XVIII, desde los estados se creaban academias de arte que no hacían otra cosa que marcar la pauta sobre cómo había que pintar, esculpir o edificar. Salirse de estas pautas era complicado y peligroso ya que los encargos se gestionaban a través de ellas, así que pocos eran los artistas que osaban permanecer al margen de su área de influencia.

Esta influencia se mantuvo durante siglos, tanto es así que durante la segunda mitad del siglo XIX, los primeros grandes autores que se salen de sus esquemas, los impresionistas, se ven abocados casi a la pobreza ya que no consiguen colocar sus obras.

Pues bien, este invento de las academias surge durante el siglo XVII, primero en Francia y más tarde en Italia. En realidad eran herramientas fantásticas para el poder, ya que nada se salía de lo programado o del “gusto imperante”, pero claro, era nefasto para la creatividad y la originalidad.

Tanto es así que el siglo XVIII y el inicio del XIX se verá muy afectado por este poder académico.

Actividad

  • Uno de los rasgos más característicos de la escultura barroca es el naturalismo.
  • La expresión de los sentimientos se expresa para provocar ese sentimiento en los espectadores. 
  • El movimiento es otro de los aspectos caves.
  • Los materiales y temas no sufren muchos cambios con respecto al Renacimiento.
  • En nuestro país se da una tendencia opuesta

Pregunta Verdadero-Falso

Contesta si las siguientes afirmaciones son verdaderas o falsas:

Pregunta 1

  • El gran escultor barroco italiano será Borromini 

Pregunta 2

  • La escultura barroca vuelve a los esquemas góticos, eliminando los recuerdos de la estética renacentista 

Pregunta 3

  • Independientemente de la temática que use, Bernini se caracterizará por su expresividad

Pregunta 4

  • La escultura francesa sigue las pautas de su arquitectura, es, por lo tanto, más clásica que la italiana

Caso práctico

OBRA COMENTADA: EL RAPTO DE PROSERPINA DE BERNINI