3.1. De 1850 a 1975
El resultado fue:
1. El crecimiento fue mayor en las grandes ciudades y las medias
2. La urbanización afectó sobre todo a la mitad norte peninsular, especialmente a los grandes ejes urbanos de crecimiento:
a. Cantábrico (País Vasco-Santander-Asturias)
b. Catalán (Barcelona y su periferia y los enclaves turísticos)
c. Área Metropolitana de Madrid.
d. Eje levantino (Valencia-Alicante-Murcia y zonas turísticas)
e. Ejes de conexión:
- Valle del Ebro
- Burgos
- Valladolid
f. Baleares
3. El interior rural y Andalucía entraron en una situación regresiva, aunque esta última verá como a comienzo de los 70 se comienza a plantear una revitalización en la zona del bajo Guadalquivir (polos de desarrollo) y en algunas zonas del este (turismo y comienzos de una agricultura especializada (invernaderos).

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Imagen 13. Tabla de datos de elaboración propia |
Analiza detenidamente esta tabla. Se trata de conocer el tamaño de los municipios en los que vivían los españoles y como ha ido cambiando.
Los pequeños municipios los consideramos rurales.
Observa que:
- En 1920, el 61% de los españoles vívían en localidades de menos de 10.000 habitantes, y el 12% en las que tenían más de 100.000.
- En 1870, en los municipios de menos de 10.000 habitantes residía el 34% de la población española, y en los de más de 100.000 el 37%.
- Entre 1920 y 1970, los municipios de menos de 10.000 habitates perdieron importancia, pasando del 61 % al 34% (perdieron un 27%), y que los de mayor tamaño ganaron importancia en un 25%.
- Los municipios intermedios tuvieron una tibia subida de un 2%,
De esta forma, podemos concluir que el reparto de ls población según el tamaño del municipio de residencia nos habla de un movimiento desde los pequeños municipios rurales a los de mayores dimensiones, que son los que concentraban la industria y los nuevos servicios.

En esta fase se observan dos períodos claramente diferenciados:
- De 1850 a 1930: el crecimiento industrial y urbano fueron lentos, con interrupciones y estuvieron muy focalizados en unas pocas ciudades. El resultado fue la división de España en dos ámbitos: | ||
1. Unas zonas dinámicas: litorales (en el cantábrico, desde Asturias al País Vasco, con su centro en Bilbao; en el mediterráneo desde Barcelona y su hinterland hasta la región valenciana, con su centro en Barcelona) en el cuadrante NE, con su conexión por el valle del Ebro, donde Zaragoza comienza a desarrollarse. Madrid continúa su crecimiento en medio de unas castillas declinantes. 2. Otras zonas regresivas en el interior, con una agricultura subdesarrollada, ajena a las innovaciones, donde sólo se fraguan flujos administrativos provinciales y comarcales. |

- De 1960 a 1975 es la fase de industrialización y de urbanización definitiva. Dejadas atrás la Guerra y la Posguerra (1936-56), España inició una aceleradísima industrialización, que fue acompañado de la urbanización definitiva. Varios factores influyeron en las características de nuestro sistema urbano: |
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1. El rapidísimo e intenso proceso de industrialización se realizó concentrando las nuevas actividades industriales en un reducido grupo de ciudades, que recibieron la población del éxodo rural. 2. La dictadura franquista mantuvo una política centralista: se reforzó el papel central de Madrid, tanto de sus funciones políticas y administrativas como de las económicas, para hacer frente a las tendencias nacionalistas vasca y catalana, haciendo de Madrid la primera concentración industrial y empresarial de España, dando lugar a un rápido crecimiento de su espacio urbano, adsorbiendo las poblaciones y municipios de su hinterland. 3. El turismo (desde 1960, España es una gran potencia turística) será otro de los grandes motores de la urbanización, especialmente en el litoral mediterráneo y las islas. 4. Al final de la etapa, el crecimiento de las ciudades industriales había sido tan importante y la concentración de las actividades económicas en ellas tan fuerte, que aparecieron los primeros problemas de congestión, que orientaron a la iniciativa privada a salir de las congestionadas ciudades hacia localizaciones industriales en sus alrededores, en lugares bien comunicados y próximos a los mercados, donde el suelo fuese barato y hubiese mano de obra disponible y no problemática. 5. Para evitar la fuerte concentración del desarrollo económico en muy pocos lugares y la existencia de amplias zonas muy deprimidas, se fomentó la creación de Polos de Desarrollo, que eran zonas de localización industrial promovidas por el Estado con incentivos fiscales, suelo barato, buenos sistemas de comunicaciones, infraestructuras, etc. Se crearon en: |
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a/ Las periferias del triángulo NE industrializado, en las zonas de contacto de los principales ejes:
- Polo de Zaragoza y Polo de Logroño, en la zona de contacto de País Vasco-Barcelona-Madrid. b/ Las zonas deprimidas emigratorias, buscando una cierta ordenación del territorio industrial y frenar las fuertes tendencias al vaciado de población:
- Polos de La Coruña-Vigo-Villagarcía, en un eje gallego. |
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Los resultados de este primer intento de una tímida reordenación territorial fueron muy desiguales, aunque contribuyeron a la potenciación de las ciudades medias en las que se llevaron a cabo. |