1. Introducción

Para llegar aquí has estudiado el efecto fotoeléctrico y has podido comprobar que la luz está compuesta de fotones. En este tema vamos a utilizar de nuevo este carácter corpuscular de la luz y, si entonces te pareció extraño pensar en la luz como un chorro de partículas, espera y verás, quedarás alucinado. Aquí te invitamos a profundizar en esta rama de la física realmente sorprendente.

Te presentamos la física cuántica, que se podría definir como el conjunto de teorías que describen el comportamiento de las partículas muy pequeñas (más o menos del tamaño de los átomos) o si lo prefieres con una palabra más culta "el microcosmos".

Desde luego estas dimensiones de la naturaleza están fuera de nuestra experiencia cotidiana y, por ello, a veces te podrá parecer que hablamos de algo mágico, irreal o simplemente chino mandarín. Para que te hagas una idea, la física cuántica predice cosas como que una partícula puede atravesar una "pared", o estar en dos lugares a la vez. Sin embargo, al igual que ocurre con la Teoría de la Relatividad, la Física Cuántica no tiene nada de magia, está sólidamente fundamentada y sus resultados comprobados experimentalmente y, si no observamos estos fenómenos en nuestra experiencia diaria, es sencillamente porque sólo se hacen patentes en el dominio de las dimensiones muy pequeñas. Así que  no es un problema de que la naturaleza se comporte de forma extraña, sino de que nuestros sentidos no están habituados a "ver" lo que ocurre en esas dimensiones.

Para abrir boca, te propongo que veas un vídeo en el que se simula el extraño comportamiento de un chorro de electrones cuando atraviesan una doble rendija. A lo largo del capítulo iremos justificando ese comportamiento.

Vídeo de Silthion alojado en Youtube