5.4. Turismo y ocio. Principales áreas turísticas en España
Por turismo entendemos todas aquellas actividades que se generan en torno al desplazamiento de población por razón de ocio, esparcimiento, salud, conocimientos culturales y naturales e incluso negocios, siempre y cuándo el desplazamiento sea superior a un día e inferior a un año.
Podemos distinguir diversos tipos de turismo en función de la actividad prioritaria que se realiza: deportivo (senderismo, montañismo, excursionismo, ciclismo, esquí, golf...), cultural, salud (a balnearios, centros de salud y belleza), negocios y congresos, sol y playa, social y descanso, etc. Otros son de más reciente desarrollo, como el turismo rural, que aprovecha la tradicional vivienda rural para fines turísticos, potenciando así el desarrollo endógeno de las áreas rurales, hecho promocionado por la UE. Cada uno de ellos genera una serie de productos turísticos que exigen distintas infraestructuras. Podemos afirmar que la oferta turística española es muy diversificada.
Las comunidades autónomas que mayor afluencia turística tienen son las del área Mediterránea (Cataluña, Valencia, Andalucía y Baleares) con una oferta de casi las tres cuartas partes de las plazas hoteleras españolas. Van seguidas de Canarias, Cornisa Cantábria, Galicia y el interior penínsular, en donde destaca Madrid.
Las localidades con mayor número de viajeros en el mes de mayor afluencia turística, agosto de 1999, según el INE, fueron por este orden: Madrid, Barcelona, Palma de Mallorca, Benidorm (Alicante), Lloret de Mar (Girona), Granada, Sevilla, Torremolinos (Málaga), Salou (Tarragona), San Bartolomé de Tirajana (en la isla de Gran Canaria), Arona (en el sur de la isla de Tenerife), Santiago de Compostela (A Coruña), Valencia, Córdoba y Marbella (Málaga)
Las consecuencias positivas más importantes del turismo se resumen en que dinamiza la actividad económica ya que contribuye a impulsar el comercio y el consumo, a crear empleo, a aumentar las rentas, a nivelar la balanza de pagos y a incentivar la mejora de las infraestructuras necesarias para el turismo, fundamentalmente los transportes y las edificaciones. Todo ello supone una positiva participación del sector turístico en el PIB y en la balanza de pagos, como ya hemos visto. También hace que se mantenga la población y que aumente, en las zonas turísticas. Finalmente, Incentiva la protección y conservación del patrimonio ambiental, muy valorado por los turistas.
La masificación no ayuda a la sostenibilidad de las actividades turísticas que deben ser resultado de la innovación y la organización racional del sector. El sector turístico solo será rentable a largo plazo si se gestiona de forma competitiva con el máximo respeto al medio ambiente, ya que este es un activo de gran importancia en estas actividades.
![]() Demanda turística en España por Comunidades en 2005 |