5. Ética

La Ética se ocupa de la relación existente entre el obrar humano (sus actos) y sus creencias y valores morales. El término Ética proviene del griego ethos, que significa costumbre. Por lo tanto, a partir de nuestra conducta, nos preguntamos acerca  de problemas como la libertad, la conciencia o la responsabilidad del sujeto que realiza una acción (o, simplemente, que la piensa).
 
Pero la Ética, a diferencia de los códigos morales, no nos dice lo que tenemos que hacer.  Es una reflexión sobre lo bueno y lo malo,  sobre el deber y la posibilidad misma de fundamentar las acciones desde un punto de vista moral.
Ejemplo o ejercicio resuelto

 

Platón en Wikimedia Commons,

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Platón, en su República, nos cuenta un mito que puede ilustrar esta cuestión como ejemplo, ya que plantea un dilema ético. Es el mito del anillo de Giges.

Un día, un pastor que vivía en Lidia, al ir a buscar a una de sus ovejas en una profunda grieta, encuentra un anillo de oro. Posteriormente descubre que ese anillo tiene el poder de la invisibilidad (¿te suena?). Giges, que así se llama el protagonista de la historia, acaba siendo el rey del lugar (se casa con la esposa del rey, al que previamente asesina).

Piensa que tú estás en la misma situación de Giges, y que tienes en tu poder el anillo mágico.

El ejemplo anterior nos permite hacernos una pregunta fundamental: ¿existe la Moral?

De ella podríamos derivar otras preguntas como ¿existe lo que llamamos el Bien y el Mal? ¿Y la conciencia? ¿Tienes a veces eso que llaman sentido de culpabilidad? O, al menos, ¿tienes clara la contraposición entre los conceptos "bueno/malo"?

Aquí tenemos una posible interpretación (en REDES):

Pero suponemos que todo el mundo conoce casos que parecen demostrar lo contrario. En el siguiente apartado proponemos un hecho real como ejemplo.

Actividad de Lectura


Son Solo Niños en Flickr,

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En un texto totalmente distinto, el autor argentino Martín Caparrós (Una luna, Anagrama, 2009, páginas 53-54) nos plantea la cuestión de los niños soldados, a través de una entrevista con dos de ellos en Monrovia (capital de Liberia), y nos dice:
"[...] Los ejércitos de los "rebeldes" estaban llenos de chicos -y recuerdo que Kapuscinski me dijo alguna vez que los chicos soldados son los peores, los más violentos, los más desalmados. Los dos usan lo mismo: pantalón corto, chancletas, musculosa, su variedad de músculos. Y me dicen que ahora se aburren, que no saben que hacer, no tienen nada. Antes era mucho mejor, me dice uno: entonces sí que lo pasabamos bien, podíamos agarrar todo lo que queríamos.
- ¿Qué cosas?
- Lo que queríamos, ropa, comida, mujeres, plata, todo lo que uno siempre quiere. Y si alguien no quería, pum, lo matábamos.
[...]
-¿Y cómo te sentías cuando matabas a alguien?
Le pregunto al otro, un chiquitito pura fibra, ojos muy afilados. Se lo pregunto compungido, hablando bajo, con ese tono correcto compasivo de quien entiende que es duro hablarte de ese momento tan difícil pero qué se le va a hacer, no queda más remedio, es por el bien del mundo ya sabés, es bueno que se digan estas cosas.
- Goooood!
Dice el chico soldado, un alarido.
-Good?
-Yeah. Cuando matás a alguien es que el tipo te pudo matar. Entonces vas y lo matás vos, es tan bueno, te sentís genial."
Volvemos pues a la cuestión inicial: la Ética se ocupa de todos estos casos, de intentar aclarar si actuamos moralmente o no, de si es posible finalmente dar respuesta a estas preguntas y otras relacionadas con nuestra conducta, nuestras razones para actuar y nuestros sentimientos al hacerlo.