1.2. La vuelta al Renacimiento y a los esquemas clásicos

Como hemos dicho, los cambios sociales, políticos y religiosos habían traído una nueva sensibilidad, que se expresará con lo que nosotros damos en llamar neoclasicismo. Sin duda, los «excesos barrocos»—y ese ápice al que nos referimos como rococó—contribuyeron al nacimiento de una no tan nueva sensibilidad estética, porque se trataba, en definitiva, de volver la vista atrás, como en el Renacimiento, a la Antigüedad Clásica para encontrar el modelo de arte racional de acuerdo con los presupuestos ilustrados. Sin duda, los descubrimientos arqueológicos (Herculano, Pompeya) contribuyeron al giro neoclásico. Por eso, también se puede entender este estilo como un volver al Renacimieno para, desde él, alcanzar las ideas claras y distintas de la Antigüedad. Un arte, en definitiva, que se quiere apolíneo y rechazará todo exceso. Quizás podamos hablar, si se me permite, de un arte zombi, porque en más de un sentido está muerto: se trata de imitar y en muchas ocasiones parece faltar todo calor de la vida, la confusión y la sobreabundancia de sentimientos. Sabemos ya que la Ilustración vio dos cumbres—la Antigüedad y el Renacimiento—: lo que quedaba entre ellas era, sencillamente, lo que estaba «en medio», es decir, la Edad Media, identificada con la oscuridad, la falta de mesura y el exceso. El barroco fue puesto en esa misma línea y representaba, además, el arte del detestable absolutismo.

Calle de Pompeya

Calle de Pompeya
Imagen de Paul Vlaar  en Wikipedia. Licencia CC

Por eso no es de extrañar que la arquitectura y la escultura (en menor medida la pintura) buscarán retornar a los esquemas clásicos. Como la Grecia clásica había establecido la polis y como la Roma republicana instauró al ciudadano, ahora el arte quiere ser fuente de moralidad y ciudadanía. Fue el «arte verdadero», porque estaba al servicio de la república. Por lo tanto, este arte tiene conscientemente bastante de propaganda y pedagogía. De hecho, en el XVIII aparecen numerosas academias de bellas artes con la finalidad de formar a los artistas y desdibujar el aliento individual (como sabemos, contra las academias se acabarán rebelando los grandes artistas). Danton dijo de Robespierre que le gustaba tanto la guillotina porque no consentía ver ninguna cabeza sobre la suya; pues bien, las academias jugaron un papel parecido: nivelar y estandarizar los gustos y las ejecuciones. Y el canon propuesto era el de la Antigüedad griega y romana .

Importante

  • Los cambios sociales, políticos y religiosos habían traído una nueva sensibilidad.
  • Se trataba, en definitiva, de volver la vista atrás, como en el Renacimiento, a la Antigüedad Clásica.
  • Se quiere un arte apolíneo y se rechaza todo el exceso. 
  •  La arquitectura y la escultura (en menor medida la pintura) buscarán retornar a los esquemas clásicos.
  • Aparecen numerosas academias de bellas artes que intentaran estandarizar los gustos.

Comprueba lo aprendido

Di si las siguientes afirmaciones son verdaderas (V) o falsas (F).

Pregunta 1

Los excesos barrocos son influyentes en la aparición del neoclasicismo. 

Pregunta 2

Se quieres un arte apolíneo. 

Pregunta 3

La arquitectura y la escultura (en menor medida la pintura) buscarán retornar a los esquemas clásicos.