3.1. Tejidos en la raíz

Ya sabes que la raíz es el órgano que fija la planta al sustrato y que absorbe el agua y las sales minerales indispensables para la nutrición de la planta. ¿Qué tejidos crees que debe tener la raíz para cumplir su función? Imagínate que partimos de una raíz con todo el espacio ocupado por tejido "de relleno", ¿qué tejidos específicos incorporarías y qué funciones tendría cada uno?
Piensa la respuesta y después comprueba la validez de tu modelo utilizando la animación que se da en la respuesta de esta actividad. Desplazando el dial azul podrás ir incorporando diferentes elementos a la vez que una justificación de la necesidad de los mismos.
Parénquima
El parénquima es el tejido vegetal más abundante. Forma el relleno del cuerpo de una planta y por ello realiza muchas funciones (fotosíntesis, almacenamiento, secreción, etc.). Existen varios tipos específicos según su función:
- Clorofílico. Se localiza en las hojas y tallo de la planta por debajo de la epidermis.
- Reserva. Almacena sustancias de reserva (almidón, aceites, agua, sales, etc.).
- Glandular. Segrega sustancias.
Tejido de revestimiento
Son tejidos protectores. Distinguimos dos tipos según se localicen en el exterior o interior.
- Epidermis. Recubre la superficie de la raíz, tallo y hojas (constituye la “piel” de la planta). Es un tejido formado por una sola capa de células aplanadas. En la raíz las células epidérmicas pueden presentar prolongaciones hacia el exterior en forma de pelos con objeto de aumentar su superficie de absorción (pelos absorbentes o radicales).
- Endodermis. Se localiza en el interior de la raíz, separando corteza de médula y dejando los vasos conductores en su interior. Su función es seleccionar y filtrar las sustancias que llegan a los vasos conductores (evitando el transporte de sustancias tóxicas o no deseadas que han sido absorbidas por la raíz).