4. Glúcidos: concepto, clasificación y funciones

Importante
Los glúcidos son biomoléculas formadas por carbono, hidrógeno y oxígeno que presentan al menos un grupo carbonilo (-C=O) y varios hidroxilo (-OH). Dependiendo de la complejidad de estas moléculas, nos encontramos tres tipos: monosacáridos, disacáridos y polisacáridos.
- Los monosacáridos son los glúcidos más sencillos. Son dulces, solubles en agua, cristalinos y de color blanco. forman las estructuras básicas de las que se compondrán los glúcidos más complejos.
- Los disacáridos están formados por la unión de dos monosacáridos, y conservan sus mismas propiedades. Su principal función es energética.
- Los polisacáridos son moléculas muy grandes formadas por un número elevado de monosacáridos. Estos glúcidos no son dulces y algunos, como la celulosa, no son solubles en agua. Algunos tienen función de reserva energética y otros estructural.
Son también conocidos como hidratos de carbono. El nombre de glúcido proviene del griego glycos que significa dulce, aunque como veremos no todos lo son.
Características
- Son moléculas orgánicas formadas por carbono, hidrógeno y oxígeno, que, además, se caracterizan por presentar al menos un grupo carbonilo (-C=O) y varios hidroxilo (-OH).
- Son moléculas muy diversas que se forman de la unión de moléculas más pequeñas (monómeros) llamadas monosacáridos.
- Son las principales moléculas de reserva energética que se localizan en casi todos los seres vivos, aunque esta no es su única función, ya que algunos presentan función estructural.
- Hay tres tipos principales de glúcidos que se clasifican según el número de monómeros que constituyen la molécula: Monosacáridos, Disacáridos, Polisacáridos. A los monosacáridos y disacáridos por su sabor dulce también se les denomina azúcares.