3.1. Evolución arquitectura. Los "neos". El eclecticismo

En el siglo XIX la evolución de la arquitectura va de la mano de la utilización de nuevos materiales y nuevas técnicas de construcción. Como hemos comentado en toda esta unidad, el movimiento romántico implica nostalgia y, por lo tanto, una vuelta al pasado.  De esta forma resurgen movimientos antiguos como el gótico, románico y otros estilos de tendencia medieval. Este movimiento fue llamado Historicismo, pues se caracterizaba por el regreso a distintos estilos históricos o de procedencia exótica, algo en que también tiene mucho que ver la tendencia imperialista (apartado 2.4) de los países europeos.

 

El Historicismo nació como oposición al arte oficial de las academias (Neoclacisismo) y bajo la influencia del romanticismo y se mantuvo hasta la llegada del Art Nouveau o modernismo. Los arquitectos comienzan a utilizar el hierro y otros materiales como el cristal, debemos recordar el cambio que supuso la Revolución Industrial (apartado  2.1) y cómo esta influyó en el arte.

 

Surgen los nuevos estilos a los que se le suele añadir el prefijo “neo” pues se trata, como hemos dicho, de una vuelta al pasado. Aparecen el neogótico, neorrománico, o neo mudéjar.

 

Al mismo tiempo que se produce esta recuperación de estilos pasados, se produce una nueva corriente arquitectónica: el eclecticismo. Aquí se mezclan en un mismo edificio diferentes estilos. Se construyen edificios que se deben a los nuevos estilos de vida: estaciones de ferrocarril, puentes, fábricas, bibliotecas, mercados...

 

Algunos edificios de este momento pueden ser el conocido Parlamento de Londres de Charles Barry. Esta construcción es un ejemplo de algunos planteamientos clasicistas: la simetría, la regularidad de la planta, junto con una decoración gótica, que fue realizada por Pugin. Existe una tendencia a la horizontalidad, aunque hay elementos de clara tendencia gótica, como los pináculos, que apuntan a lo vertical.

Parlamento de Londres
 Parlamento de Londres o Palacio de Westminster.
 Foto de Diliff en Wikipedia. Licencia CC BY-SA 2.5

En España podríamos citar la Catedral de la Almudena en Madrid como estilo neogótico.

 

El  Pabellón Real de Brighton, cuyo autor fue J. Nash,  es de estilo neo-indio pues se pueden apreciar las cúpulas bulbosas típicamente orientales y torres circulares.

Existe otra tendencia dentro de los “neo” de raíz española que suele llamarse neoárabe o neomudéjar. Se caracteriza por la utilización del ladrillo y la decoración con cerámica vidriada. Destacan el Teatro Falla en Cádiz o la Plaza de Toros de las Ventas en Madrid.

Pabellón Real de Brighton
 Pabellón Real de Brighton.
Foto de Qmin en Wikipedia. Licencia CC BY-SA 3.0

El eclecticismo es la recuperación de todos los estilos, especialmente los de la Edad Media. Habitualmente mezclan elementos procedentes de culturas y etapas diferentes en un mismo edificio. Comienza sobre  1870 con algunas viviendas burguesas.  Nos llama especialmente la atención la Ópera de París de Charles Garnier. 

Ópera de París
 Ópera de París, Carles Garnier.
Foto de Peter Riveraen Wikipedia. Licencia, CC BY 2.0

Importante

  • En el siglo XIX aparecen nuevos materiales para la utilización en arquitectura. 
  • También aparece una vuelta al pasado y una recreación de estilos anteriores. 
  • El Historicismosupone unregreso a distintos estilos históricos o de procedencia exótica.
  • Destacan el Parlamento de Londres y el Pabellón Real de Brighton.
  • El eclecticismo es la recuperación de todos los estilos en un mismo edificio. Comienza con algunas viviendas burguesas. 
  • Destaca la Ópera de París de Charles Garnier. 

Curiosidad

En el siguiente vídeo puedes dar un repaso por la gran arquitectura del siglo XIX: neo-estilos, eclecticismo, arquitectura de hierro y cristal y exposiciones universales.

Reflexión

¿Qué diferencia existe entre el Historicismo y el Eclecticismo?