2. La responsabilidad del personal técnico deportivo en la trasmisión de valores éticos en el deporte y en evitar los contravalores

El técnico deportivo es el referente adulto que tiene la responsabilidad de promover el desarrollo de valores con sus deportistas a través de la actividad física y el deporte.

Cuando asumimos el rol de liderar una actividad deportiva en la que participan una serie de personas (especialmente si son niños y jóvenes), seamos conscientes o no, estamos transmitiendo una serie de valores éticos. Por ejemplo, prestamos una atención especial al resultado conseguido o por el contrario se valora el proceso de aprendizaje; se promueven actitudes no sexistas o sexistas; se promueve el respeto y fair play o se premia el éxito deportivo a toda costa (Durán, 2006).

Por lo tanto, cuando no prestamos atención al desarrollo de valores durante la intervención deportiva, también los estamos desarrollando, aunque de una forma azarosa; puesto que, por ejemplo, si no intervenimos cuando un deportista le hace una falta a otro, en lugar de promover el respeto a las normas de convivencia y al juego limpio, la inacción lleva implícito apoyar el contravalor del engaño.

Los técnicos deportivos tienen que ser conscientes que para educar en valores a través de la actividad física y el deporte, tan importante es la forma de hablar que utilizamos cuando nos dirigimos a un grupo de deportistas (información sobre cómo resolver un conflicto, intervenir ante una falta de respeto, etc.), como la propia forma de actuar y de ser que tengamos cuando estamos interviniendo (el entrenador tiene que ser ejemplo de respeto en cuanto al uso del vocabulario, vestimenta, puntualidad, etc.).

Desde el programa de responsabilidad personal y social, se identifican una serie de cualidades o aspectos que debe cultivar un monitor deportivo o profesor (Escartí et al., 2005):

  • Disfrutar de la compañía de los niños y niñas o jóvenes (encontrarse a gusto).
  • Cultivar los valores personales y hacer debates con el grupo.
  • Ser pacientes y preocuparse por el grupo. Tener autocontrol.
  • Mantener las promesas y cumplirlas, para garantizar la credibilidad.
  • Comunicarse de manera eficaz: escucha activa, promover debate y diálogo, sentirse a gusto con el silencio, no esperar respuestas inmediatas, poner atención en el lenguaje corporal y utilizar un lenguaje sencillo y adecuado.
Trasmisión de valores éticos en el deporte

Trasmisión de valores éticos en el deporte.
Imagen cedida por el autor