Todo indicaba que nuestro hombre se había suicidado. Los recortes de artículos,
los textos examinados, todo apuntaba a la autoaniquilación. Pero a mí
me preocupaban los
motivos, los que le llevaron a un hombre de 89 años a quitarse la vida,
pudiendo esperar a que el destino hiciera su trabajo. He leído en uno de estos estudios de psicología
que se están poniendo de moda que el suicidio es el acto supremo de
libertad, de heroicidad. La víctima lo sabía. Era un hombre romántico.
Y esta fue la manera de demostrarlo.
En esto, tomé sin saber por qué un libro de la estantería que tantas
veces ordenara la criada Reme. Era un libro azul, con pastas duras de unas de mis
poetisas favoritas, Rosalía de Castro,
En las orillas del Sar, en la edición madrileña realizada en el
Establecimiento Tipográfico de Ricardo Fe, de 1884. Lo abrí por una
página cualquiera. Alguien parecía guiar mis actos. Abrí
el libro, leí el poema en voz alta. Mis sospechas se hicieron ciertas.
"Hora tras hora, día tras día,
Entre el cielo y la tierra que quedan
Eternos vigías,
Como torrente que se despeña
Pasa la vida.
Devolvedle a la flor su perfume
Después de marchita;
De las ondas que besan la playa
Y que una tras otra besándola expiran
Recoged los rumores, las quejas,
Y en planchas de bronce grabad su armonía.
Tiempos que fueron, llantos y risas,
Negros tormentos, dulces mentiras,
¡Ay!, ¿en dónde su rastro dejaron,
En dónde, alma mía?"
Pregunta de Selección Múltiple
Una vez leído el poema, responde a las siguientes preguntas:
1. ¿Cuál es su tema?
La muerte.
Correcto
Incorrecto
El paso del tiempo.
Correcto
Incorrecto
La vejez.
Correcto
Incorrecto
2. ¿Cómo es la rima de los versos?
Asonante.
Correcto
Incorrecto
No tienen rima.
Correcto
Incorrecto
Consonante.
Correcto
Incorrecto
¿Cuáles de estos rasgos son representativos del carácter romántico del poema?
El énfasis expresivo a través de la exclamación e interrogación de los dos últimos versos.
Correcto
Incorrecto
Predilección léxica por palabras como "eternos", "negros", "tormentos", "marchita", para ahondar en los tema romántico.
La libertad guía el pensamiento del poeta romántico. Basta observar la
métrica de sus composiciones, con sus inventos estróficos y sus
composiciones polirrítmicas. Se huye del formalismo poético y se
recurre a conceptos como
la "inspiración" o la espontaneidad como base del proceso creador del
poeta. Lo cual supone ciertos textos poco elaborados y con dudoso
valor artístico.
La exaltación de los sentimientos y la intimidad
encuentra en la lírica romántica su mejor expresión, empleando los
elementos de la naturaleza (el mar, la tormenta...), la descripción de
lugares apartados, cementerios o momentos en torno a la noche para
identificar su estado de ánimo. Y junto a esto, en una frontera difusa,
también adquiere un importante desarrollo la poesía narrativa,
inspirada en temas históricos, legendarios o exóticos.
Ejemplo de este lirismo romántico es José de Espronceda.
Bécquer y Rosalía de Castro suponen una superación y
depuración de la exaltación romántica, por eso se les considera
posrománticos.