3.2. Todos iguales ante la ley
Para nosotros, el punto de partida de la nueva sociedad fue la redacción en Francia de la Declaración de los Derechos del hombre y del ciudadano en 1789. El 20 de Agosto de 1789, representantes de los ciudadanos (fíjate, ahora hablamos de ciudadanos y no de súbditos: los primeros tienen derechos, los segundos sólo obligaciones) aprobaban el documento. Era el símbolo de los nuevos tiempos.
Quedaba formalmente establecida:
- La libertad y la igualdad de todos los hombres
- El derecho sagrado e inviolable de propiedad,
- La separación de poderes
- La soberanía popular.
Se difundió masivamente y se convirtió en un auténtico catecismo revolucionario. Traducida a varios idiomas llevó el mismo mensaje revolucionario a toda Europa.
Desde luego no resultó fácil, en plena marea revolucionaria, poner de acuerdo a todos los sectores sobre cuáles habrían de ser los derechos que debían aparecer en la Declaración. Ganó una visión muy conservadora de la burguesía con lo que se aseguraron de que sus propiedades y sus derechos quedaran reconocidos.
Importante
No olvides que...
...las revoluciones políticas de finales del s. XVIII fueron revoluciones sociales porque acabaron con una organización social que permanecía inalterable desde la Edad Media.
La Declaración de los Derechos del hombre y del ciudadano en 1789, toma como modelos ideológicos:
- la Declaración de Derechos de La Gloriosa Revolución en Inglaterra,
- las ideas ilustradas,
- las Declaraciones de Derechos de los recién creados Estados Unidos,
Para conocer lo que afirma esta declaración debes hacer clic sobre la imagen:
Elaboración propia
¿Sabes cuál es la importancia de este documento? Ni más ni menos, legalizó el fin de los privilegios de un grupo de personas que se resistieron a perderlos. La Revolución estaba en marcha.