1. Guerra y Revolución en España

Escudo España Carlos III y Carlos IV Carlos IV en su juventud
Escudo de Carlos IV. Archivo de Wikimedia Commons bajo licencia Cerative Commons Carlos IV en su juventud por Mengs. Archivo de Wikimedia Commons bajo licencia C. Commons.

Desde al ascenso al trono de Carlos IV en 1788 hasta la proclamación de la primera constitución en 1812 vamos a vivir un proceso complicado y, por qué no decirlo, sangriento.
Como veías en Historia del Mundo Contemporáneo, en 1789 se inicia la Revolución Francesa, una revolución fundamental para entender la historia contemporánea ya que su influencia se extendió, tarde o temprano, por casi toda Europa.
Ya has visto en la unidad anterior que las ideas de la ilustración que surgen en Francia no acaban de penetrar de forma clara en nuestro país ya que la situación económica, política, social y cultural de España estaba a años luz de nuestro país vecino.
Pero claro, como decimos aquí, Francia es nuestro país vecino, compartimos las únicas fronteras por tierra, al margen de Portugal, con lo que estaba claro que las ideas revolucionarias, tarde o temprano terminarían por cruzar los Pirineos (siempre ha ocurrido así).
Dice un viejo refrán que “cuando las barbas de tu vecino veas cortar, pon las tuyas a remojar”. Eso fue justamente lo que hizo Carlos IV, poner sus barbas a remojar: ante las noticias que le están llegando desde Francia (promulgación de la constitución, creación de la asamblea constituyente, proclamación de la República y desaparición de la monarquía, fin de los derechos señoriales…) Carlos IV decide poner toda la carne en el asador para evitar que las ideas revolucionarias saltasen los Pirineos y llegasen a España. Para ello destituye a los ministros de corte ilustrado, paraliza las reformas más o menos liberales que inició su padre Carlos III y declaró la guerra a la Francia revolucionaria. El resultado fue una estrepitosa derrota que dejó maltrecha la imagen del Rey. A partir de ese momento la historia de España será, como ya hemos comentado, una sucesión de conflictos, cambios y vaivenes que no pararán prácticamente hasta 1939.

Lo que vamos a ver en este primer apartado hace referencia a los acontecimientos que se producen a principios del siglo XIX:

  • La llegada de Godoy y sus intentos de reforma con la oposición de casi todo el mundo.
  • La aparición de Napoleón con la ocupación de España por su ejército y la subida al trono español de su hermano.
  • La reacción instantánea de la sociedad española que incia una guerra de independencia.
  • La aparición en último momento de la burguesía que se hace fuerte en Cáidz y logra la aprobación de una Constitución que, casualmente, recoge una parte importante de los aspectos que la revolución francesa defendía.

Fíjate que curioso, después de más de 20 años de luchas, guerras y muertes, resulta que los que triunfan son los que en un primer momento fueron denostados. No me digas que no es curiosa la historia.

Pues esto no es nada, sigue avanzando y te sorprenderás aun más... (no pestañees porque si lo haces, te perderás algo...)