1.3. La escultura de Julio González

Dafne. Imagen de Joanbanjo en Wikimedia Commons bajo licencia cc

Julio González era natural de Barcelona, en donde se formará y aprenderá de la tradición de su familia que se dedicaba a la forja. En ese ambiente no es de extrañar que el joven comience su andadura en la artesanía del hierro que por entonces era demandada desde la estética del Modernismo. Hacia finales de los años veinte y principio de los treinta trabajará con Picasso para ayudarlo en las esculturas en hierro que está realizando durante esos años. Este contacto significará que la técnica y el estilo de González sufran un vuelco en contacto con las Vanguardias. Descubrirá entonces viabilidad del ensamblaje de diferentes secciones, cuya superposición termina dotando a la escultura de coherencia. Además, contempla el hueco como posibilidad para determinar el diseño, así como la posibilidad de contemplar la figura desde múltiples puntos de vista. En definitiva, Julio González se introduce en el Cubismo desde el lenguaje escultórico, para aproximarse a unas formas casi abstractas, que construirá a base de hierro soldado, generando un nuevo concepto del espacio más abierto.
¿Qué te parece esta obra de inspiración mitológica de Julio González? El tema representado es bastante recurrente en la historia del arte, es Dafne, seguro que se te viene a la memoria el grupo escultórico de Bernini. ¿Recuerdas las calidades tan asombrosas que alcanza el mármol en este conjunto? Pues esta misma diferenciación de texturas ocurre en esta pieza también, sólo tienes que observar su parte inferior robusta frente a la superior de brotes esbeltos. Es como si se tratara de un esbozo en el espacio.