La población española: Los movimientos naturales y el crecimiento vegetativo de la población

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La población española: Los movimientos naturales y el crecimiento vegetativo

La evolución de la población depende de dos factores. Por una parte la diferencia entre los que nacen y los que mueren, a la que denominamos crecimiento natural o vegetativo. Por otra la diferencia entre los que entran en un lugar y los que salen, es el llamado movimiento migratorio.

Los nacimientos se miden con la Tasa de natalidad, que pone en relación el número de nacidos con el total de población del país. Para estudiarla existen también otros indicadores como la nupcialidad o porcentaje de matrimonios sobre el total de población, la fertilidad, o número de mujeres en edad de procrear, o el índice sintético de fecundidad, que señala el número de hijos que tienen las mujeres a lo largo de su vida.

Las defunciones se miden con la Tasa de mortalidad, que relaciona a los que fallecen en un año con el total de población que vive en el país. Para completar su estudio hay que tener también en cuenta aspectos como la Tasa de mortalidad infantil, que mide los niños que mueren antes de cumplir un año de edad, o la esperanza de vida, que indica el número de años que se espera pueda vivir una persona.

Los movimientos migratorios sirven para conocer cómo evoluciona realmente una población, con ellos y el crecimiento natural, podemos saber cuál es el crecimiento absoluto o real de la población.

Existen dos tipos de movimientos migratorios, la inmigración o entrada de personas en un lugar, en este caso España, y la emigración, o salida de personas de nuestro país, o del territorio que corresponda. Este apartado será objeto de nuestro estudio en el tema 12, pero su influencia sobre el crecimiento real es tal, que debemos señalarlo desde este mismo momento.

Como podrás comprobar en este tema, nuestro país ha tenido por regla general un crecimiento natural o vegetativo favorable. Los nacimientos han superado casi siempre a las defunciones, aunque hace poco más de una década, la reducción de la natalidad hizo que la demografía española se acercara al crecimiento cero o equilibrio demográfico. Es decir, que prácticamente nacían el mismo número de niños que el de personas que fallecían.

España lleva perdiendo población dos años, hecho insólito.

La población española se ha vuelto a reducir por quinto año consecutivo, esta vez en 17.982 personas, con lo que, a 1 de enero de 2017, el número total de habitantes es de 46,5 millones. Publicado por Agencia Efe en Youtube