1.2 Edad media

Los efectos de los imanes no se observan de forma habitual debido a la baja intensidad de la interacción. Por este motivo, el estudio de los imanes y la propiedad vinculada a ellos no resultaba fácil.

Por tal motivo, no es hasta mediados del siglo XIII, cuando Pierre de Maricourt, o si lo prefieres Petrus Peregrinus de Maricourt, se percató que si se rodea un imán esférico de agujas de hierro, éstas se orientan de un modo aleatorio, por no decir caprichoso, sobre la esfera del imán, de tal manera que prolongando las líneas formadas por las agujas, éstas parecen converger en dos puntos de la esfera diametralmente separados, donde además, la acumulación de agujas era mayor.

También, debido a su curiosidad, supongo, analizó lo que sucedía al dejar un imán esférico en libertad de movimiento, éste se orientaba como una brújula, de tal modo que los puntos anteriores quedaban apuntando a la dirección norte-sur. Él fue con estas observaciones el que introduce las nociones de polo norte y polo sur para referirse a esos puntos del imán donde se pone de manifiesto con más intensidad el fenómeno magnético.

Igualmente, se atribuye a Maricourt el comportamiento, tras diversos experimentos, de dos imanes al ser aproximados. Cuando el acercamientose hacía por sus polos norte o por sus polos sur, entre ellos se aprecia una interacción repulsiva; por el contrario, si se acercan el polo norte de un imán al polo sur de otro imán, la interacción que se aprecia es atractiva.

Interacción entre imanes

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