1.1. A ciertas edades los huesos...

En los ancianos, la tasa de deterioro del hueso con la edad es mayor que la tasa de nueva formación, lo que origina el trastorno conocido como osteoporosis. Los huesos afectados son los más porosos y se fracturan con más facilidad que el hueso normal. Este trastorno tiene también como consecuencia una disminución de la estatura del anciano.

Observa la diferencia entre un hueso normal (arriba) y uno con osteoporosis (abajo):

Imagen en  Wikimedia commons  de  BruceBlaus . Licencia cc

Otra afección muy frecuente asociada a la edad es la artrosis. La artrosis es una enfermedad de las articulaciones de carácter degenerativo, que consiste en el desgaste de una articulación que más tarde produce fenómenos inflamatorios leves. La lesión inicial ocurre en el cartílago y posteriormente se afectan las estructuras óseas vecinas produciendo una reacción inflamatoria más intensa. La enfermedad se controla mediante fármacos antiinflamatorios.

Un problema que no hay que confundir con la artrosis, aunque tengan nombres parecidos, es la artritis, una inflamación de las articulaciones, al igual que la artrosis, pero con la diferencia de que su origen no está en la degeneración por causa de la edad. No se conocen las causas de esta enfermedad, aunque se sospecha que existe una predisposición hereditaria. La artritis reumatoide puede conducir a una deformidad grave de las manos, como vemos en la imagen, las muñecas, los pies, los tobillos, las caderas y los hombros.

Fotografía en  wikimedia commons  de Prashanthns .  Licencia GNU free

En las figuras siguientes puedes apreciar las diferencias entre una articulación sana y otras afectadas por los problemas que hemos visto.

Imagen  en Wikimedia commons. Dominio público	Imagen  en Wikimedia commons.  Dominio público	Imagen  en Wikimedia commons de BruceBlaus US federal government. Dominio público