2.2. Un territorio donde llueve de forma abundante y casi continua.

Otra de las características más significativas del dominio climático Oceánico es que las precipitaciones son abundantes y relativamente constantes a lo largo del año. Aunque las cantidades son muy variables, la España húmeda bajo el dominio del clima Atlántico u Oceánico suele tener unas precipitaciones totales anuales en torno a los 1.000 mm. Pero este valor fluctúa mucho según las zonas, ya que mientras en las zonas costeras las lluvias rondan los 800 mm. o incluso algo menos, como sucede en La Coruña, en determinadas zonas del interior de la montaña Cantábrica o del Macizo Galaico, las precipitaciones pueden superar los 2.000 e incluso los 3.000 milímetros.

Así en Arkintza, en el valle del Baztan, la precipitación alcanza los 2.661 mm., mientras que en Arruazu (Navarra) llega a los 2.882. Pero el lugar de España en el que más llueve es en el embalse de Eume en Galicia. Allí se calcula que las precipitaciones anuales superan los 3.000 litros por metro cuadrado.

La lluvia en la España Atlántica es además muy regular, ya que está prácticamente lloviendo todo el año. Solo en la estación veraniega las lluvias disminuyen ligeramente a consecuencia de la influencia de los anticiclones procedentes del sur, pero aún así, siguen siendo zonas muy lluviosas durante todo este período, sobre todo si las comparamos con la de la España Mediterránea, donde la sequía estival, como más adelante veremos, es prácticamente absoluta.

Esto provoca también que la nubosidad sea muy abundante y que la insolación sea por tanto menor. De esta manera, una ciudad como San Sebastián tiene recogidas el menor número de horas de Sol al año. En el año 1983, el Sol solo apareció 53 días y brilló solamente durante 1.277 horas, siendo por conseguiente el lugar de España donde menos gozan del astro rey.

San Sebastián es la ciudad de España que menos horas de Sol tiene al año.

San Sebastián es la ciudad de España que menos horas de Sol tiene al año.
Publicado por Iokin en Flickr con licencia CC.

Actividad

Como vemos, se trata de un ejemplo muy claro de clima oceánico, donde se puede observar la suavidad de sus temperatura (media anual de 14,5º) y una reducida amplitud térmica debido a la situación costera con fuerte influencia marítima. La elevada pluviosidad se debe a su posición noroccidental lejos del Anticiclón de las Azores y próxima a las advecciones derivadas del Frente Polar. 

Objetivos

Las lluvias orográficas o de relieve

La intensidad de las lluvias en la cornisa Cantábrica y en Galicia no solo se debe a la habitual humedad propia del clima Oceánico. Hay otro factor muy importante que entra también en juego. Se trata de las denominadas lluvias orográficas o de relieve. Estas tienen lugar cuando los vientos procedentes de los océanos, empujan a las masas nubosas que se forman en los mismos y provocan la llegada de estas nubes cargadas de humedad hacia zonas de los continentes.

Cuando estas nubes penetran en el interior y encuentran un obstáculo montañoso, se elevan para sobrepasarlo, pero en ese movimiento ascendente experimentan una condensación en la humedad que llevan. Las gotas de agua precipitan entonces sobre la vertiente montañosa que tienen que superar, denominada vertiente de barlovento. Esto es lo que sucede en la vertiente norte de la cornisa Cantábrica y en la parte más occidental de Galicia, de ahí que sean territorios con una abundante precipitación.

Cuando las nubes consiguen, por fin, superar el obstáculo montañoso y pasan a la vertiente opuesta o de sotavento, han perdido la humedad que anteriormente poseían, de ahí que esa vertiente sea mucho más árida que la opuesta. Esto es lo que sucede, por ejemplo, en la región de Castilla - León, y por extensión, en la mayor parte de la Península.

En las zonas del litoral Cantábrico y en la vertiente septentrional de dicha cordillera tienen lugar las denominadas lluvias orográficas o de relieve.
En las zonas del litoral Cantábrico y en la vertiente septentrional de dicha cordillera tienen lugar las denominadas lluvias orográficas o de relieve.
Publicado por Lucili en Flickr con licencia CC.

Pre-conocimiento

Un verano no tan húmedo conlleva una serie de consecuencias: los incendios en Galicia.

La Comunidad gallega es una de las más húmedas de España en datos absolutos, sin embargo, de forma un tanto contradictoria, es también una de las que más sufren una de las peores plagas que azotan a nuestro país: los incendios forestales.

Aparentemente, el hecho de que en Galicia llueva abundantemente y con frecuencia, debería ser un motivo para que en ese lugar no tuvieran lugar los frecuentes incendios que castigan al bosque español. Sin embargo, raro es el verano en el que los noticiarios e informativos no hacen referencia a algún tipo de violento incendio que ha tenido lugar en aquella Comunidad.

¿Cuáles son las causas de este hecho aparentemente anómalo? En primer lugar cabe destacar, sin duda, un componente humano o económico. En ocasiones, los incendios son provocados por intereses de carácter económico, o incluso por motivos personales como venganzas, etc.

No se puede descartar de ningún modo esta intencionalidad, pero también es cierto que los miles de hectáreas que se calcinan anualmente no desaparecerían si no fuera porque la naturaleza también pone su parte favoreciendo indirectamente a que el bosque sea propenso a arder.

Como dijimos anteriormente, el verano en el dominio Oceánico es ligeramente húmedo. Pero en la península Ibérica, y a consecuencia de la influencia del anticiclón que se ubica sobre ella, hay ocasiones en las que las lluvias son muy escasas y eso favorece el que el bosque se reseque y, consecuentemente, sea proclive a que en él se declaren incendios que arrasan grandes extensiones de terreno.

Las llamas devoran todos los veranos una gran cantidad de terreno de los bosqus en Galicia.
Las llamas devoran todos los veranos una gran cantidad de terreno de los bosqus en Galicia.
Publicado por Wicho en Flickr con licencia CC.

Actividad

El clima Atlántico u Oceánico se caracteriza por poseer unas temperaturas muy suaves y una escasa oscilación térmica. Las lluvias suelen ser abundantes y constantes, siendo la estación seca poco frecuente salvo en zonas situadas más al interior. Las lluvias se deben en buena medida al obstáculo que representa el Macizo Galaico y la Cordillera Cantábrica para las masas nubosas que penetran desde el mar en la Península cargadas de humedad, por lo que la vertiente septentrional de esos territorios suele poseer una precipitación muy abundante. Por el contrario, la vertiente de sotavento suele ser mucho más árida que la situada a barlovento.

Pregunta de Elección Múltiple

Pregunta

¿Cuál de estas características es propia del clima Atlántico u Oceánico?

Sugerencia

Recuerda que el invierno suele ser suave, y el verano no es muy caluroso.

Respuestas

La sequía estival

Las temperaturas extremas

La irregularidad de las precipitaciones.

Una amplitud térmica bastante reducida

La continentalidad

Retroalimentación

Pregunta de Elección Múltiple

Pregunta

¿Cuál de estas características es propia del clima atlántico u oceánico?

Sugerencia

Recuerda que el invierno suele ser suave, y el verano no es muy caluroso.

Respuestas

La sequía estival.

Las temperaturas extremas.

La irregularidad de las precipitaciones.

Una amplitud térmica bastante reducida.

La continentalidad.

Retroalimentación

Pregunta Verdadero-Falso

Di cuál de las siguientes afirmaciones son verdaderas.

Pregunta 1

La suavidad de las temperaturas es una de las características más significativas del clima atlántico u oceánico.

Sugerencia

La oscilación o amplitud térmica es bastante menor que la del clima mediterráneo.

Pregunta 2

La costa atlántica del suroeste de la península tiene un clima oceánico.

Sugerencia

Aunque parezca contradictorio, costa atlántica y clima atlántico no tienen por qué ser sinónimos.

Pregunta 3

Las zonas del interior de Galicia suelen tener un verano muy suave.

Sugerencia

Recuerda que la continentalidad del territorio hace que las temperaturas se vuelvan más extremas.