2.2. El patrimonio arquitectónico del siglo XX
Ya hemos dicho repetidas veces que el patrimonio, sea el que sea, articula nuestra historia y nuestro presente. Le da sentido a nuestras formas de vida porque las describen, las recuerdan y, en cierto modo, las defienden. Pues bien, lo que vamos a ver a lo largo de este apartado, el Patrimonio Arquitectónico del siglo XX andaluz no va a ser una excepción. Es más, si hay algo que determine o articule la forma en la que nos relacionamos con nuestro espacio, esto es en general, la arquitectura contemporánea.
Cuando hablamos de contemporánea, nos referimos al siglo XX, en el caso de este apartado, a partir de los años 20 del pasado. Es decir, son esas construcciones que forman parte de nuestro día a día. Porque, obviamente, la mayoría de los edificios en los que vivimos o que forman parte de nuestro entorno (a no ser que vivas en una ciudad - medieval, y de esas no hay demasiadas en Andalucía), son de hace menos de 100 años
A lo largo de este apartado haremos un recorrido por estas edificaciones, por estas construcciones, la mayoría habitables y muchas habitadas o en uso aún hoy, del siglo XX. Seguro que te sorprende algún que otro ejemplo.
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| Conjunto de viviendas, los 10 mandamientos. Sevilla. 1959 - 1964. Imagen en la Web del IAPH |
Casa Fuentes Guerra. Córdoba. 1939. Imagen de F. Daroca en la Web del IAPH |
Al contrario de lo que hemos hecho en los apartados anteriores, que hemos hecho una valoración más global y general del patrimonio estudiado, en este caso, en el arquitectónico del siglo XX, sí vamos a llevar a cabo un análisis cronológico. Lo dividiremos en tres fases:
- La arquitectura hasta los años 30: incluiremos el regionalismo y el historicismo
- La arquitectura entre los años 30 y mediados de los 60, es la época del movimiento moderno.
- La arquitectura desde los años 70 hasta finales del siglo XX.
Empezamos.
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| Rectorado de la Universidad de Córdoba. Proyecto de 1914. Imagen de P. Berjillos en la Web del IAPH |
Edificio de Correos y Telegráfos. Jaén. 1964. Imagen de la Web del IAPH |
Torre de comuniaciones de Cádiz. 1993. Imagen de la Web del IAPH |
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| Gallo Azul. Jerez de la Frontera. 1927. Imagen de Uew Aranas en Wikipedia. Lic. CC |
EL PATRIMONIO ARQUITECTÓNICO ANDALUZ ENTRE 1900 Y 1930
Si algo caracteriza a la arquitectura de los primeros años del siglo pasado en Andalucía desde luego no es su modernidad. No discutimos su valor estético y su respeto por las tradiciones y por el lenguaje clásico de nuestro pasado; pero sí es cierto que, mientras en Europa y EE. UU. la arquitectura avanzaba a pasos agigantados, en Andalucía, salvo algunas excepciones, los modos constructivos y estéticos siguen alojados en el pasado y en la tradición. En el mejor de los casos, lo que se lleva a cabo es una fusión del lenguaje tradicional con sistemas constructivos más contemporáneos, pero tampoco es esto norma común.
Sea como sea, y como decíamos antes, esto no es óbice para indicar que estamos ante una arquitectura de gran valor estético basada sobre todo en dos estilos: el regionalismo y el historicismo. Curiosamente, existe cierta diferenciación geográfica entre el uso de estos estilos, ya que mientras que el regionalismo es más propio de la zona occidental, el historicismo se da de forma más habitual en la Andalucía oriental.
El regionalismo andaluz, como comprenderás, estaba basado en el lenguaje estético del pasado andaluz. Ahí es donde triunfan las construcciones de marcado sabor neomudéjar, aunque también neorrenacentistas o incluso neobarrocos. Se trataba, no solo de repetir modelos constructivos, sino de recuperar para la actualidad algunas formas, sobre todo decorativas, que parecía que se abandonaban. Yeserías, lienzos de azulejos vidriados, recuperación de la cerámica, uso del ladrillo...
Figuras como Aníbal González, Juan Talavera o Joaquín Rucoba son quizá los arquitectos más reconocidos.
En la Andalucía oriental, como decíamos, se desarrolla un estilo arquitectónico de carácter historicista, en la que es habitual que se mezclen elementos de tradición barroca con algunos más contemporáneos, como el modernismo. Esto lo podemos percibir aún hoy en el Palacio Consistorial de Málaga, obra de los arquitectos Manuel Rivera Vera y Fernando Guerrero- Strachan o en el Museo de Jaén, obra de Antonio Flórez Urdapilleta.
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Pabellón Mudéjar. Aníbal González. Sevilla. 1929. |
Casa Consistorial de Málaga. M. Rivera y F. Guerrero. |
Museo provincial de Jaén. Antonio Flóprez Urdapilleta. |
Curiosidad
Las Exposiciones Universales han supuesto siempre un momento importante, un punto de inflexión para las ciudades que las acogían. Esto no es un fenómeno exclusivo andaluz o español; lo mismo ocurrió en las ciudades europeas que tuvieron la suerte de disfrutar este tipo de exposiciones que eran, en general, un canto a la modernidad y una mirada al futuro.
Quizá seas demasiado joven para recordar lo que ocurrió en Sevilla con la Expo'92 o en Barcelona con los Juegos Olímpicos, pero si no lo eres o si alguien de tu entorno lo vivió y te lo cuenta, apostamos a que sabrás cómo cambió la ciudad (las ciudades, porque a Barcelona le ocurrió lo mismo) urbanísticamente y en cuanto a organización y vida en apenas unos años.
Pues bien, en 1929 Sevilla acogió la Exposición Iberoamericana, una exposición de carácter internacional que revitalizó el urbanismo y la arquitectura de una ciudad que estaba paralizada. Es cierto que no llegó a suponer el avance, el salto definitivo que todos esperaban, pero tampoco las circunstancias políticas y económicas del país ayudaron.
Si quieres saber algo más sobre la Exposición del 29 y cómo afectó a la ciudad de Sevilla, aquí tienes tres vídeos sacados del programa Los Reporteros, de Canal Sur Televisión.
Merece la pena que le dediques un rato, vas a comprender y a aprender mucho más de lo que piensas.
| La Exposición Iberoamericana de 1929. Programa Los Reporteros. Vídeo de MemorAnda alojado en Youtube |
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| La Exposición Iberoamericana de 1929. Programa Los Reporteros. Vídeo de MemorAnda alojado en Youtube |
LA ARQUITECTURA ENTRE LOS AÑOS 1930 Y 1965. EL MOVIMIENTO MODERNO.
A partir de los años 30, la arquitectura andaluza, al igual que la del resto del país, sufre una pequeña revolución. No es que se abandone por completo esos estilos tradicionales, pero sí es verdad que empiezan a imponerse técnicas y estéticas de lenguaje plenamente contemporáneo. Entramos en el estilo Moderno (ojo, no confundir con Modernismo, que es previo y que en Andalucía dejó pocas huellas), un estilo que recoge las novedades y los avances que el racionalismo, sobre todo, llevan años implantando en los principales países europeos.
Antes de seguir hablando de la implantación del movimiento moderno en Andalucía tenemos que hacerte constar una cuestión importante. El IAPH ha desarrollado un registro de patrimonio arquitectónico del siglo XX en asociación con la fundación DO.CO.MO.MO ibérica, con la idea de tutelar la protección del Patrimonio Arquitectónico andaluz relacionado con este movimiento moderno. Con este paréntesis queremos que tengas claro que el patrimonio más reciente también es seguido, tutelado, protegido y promovido por las instituciones dedicadas a ello, en nuestro caso, el IAPH.
Volviendo al movimiento moderno en Andalucía, es importante que sepas que en cada una de nuestras provincias tenemos ejemplos de este estilo. Es cierto que cada territorio hace una adaptación local, pero en general, el movimiento moderno lo que busca es primar la funcionalidad por encima de la estética. El uso de nuevos materiales, de nuevas técnicas y de nuevas formas es importante; pero, como decíamos, la clave está en la búsqueda de esa funcionalidad de la que hace gala el racionalismo iniciado por Le Corbusier.
Ocurre una cosa, y es que, frente a ese racionalismo casi impersonal, el movimiento moderno andaluz sí busca un respeto o un acercamiento al lenguaje local y a su entorno. Es, digamos, un racionalismo algo más humano. Eso sí, la funcionalidad es determinante y es el horizonte claro que los arquitectos del momento van a tener presente. Estaciones de autobuses o de trenes, bodegas, mercados, plazas de abasto, centros educativos, teatros, viviendas... Todo se hace con un lenguaje nuevo y poniendo por delante el carácter funcional.
Haremos un breve recorrido por esta arquitectura en la siguiente presentación.
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Pabellón de la Navegación. Sevilla. 1992 Guillermo Vázquez Consuegra. |
LA ARQUITECTURA ANDALUZA DESDE 1970 HASTA EL AÑO 2000
Como has podido ver, desde los años 30, Andalucía se incorpora, quizá despacio por los problemas políticos y económicos, a los modelos estéticos, orgánicos y funcionales de la arquitectura contemporánea. El movimiento moderno entra casi de lleno en nuestras ciudades, de modo que cuando los arquitectos consideran superado este movimento, la entrada del siguiente se hace de forma muy natural y sin estricencias.
A partir de los años 70, el posmoderno, que niega "la dictadura de lo funcional" y al racionalismo, reclama una vuelta a lo estético y, con ello, a lenguajes que mezclan una radical contemporaneidad con rasgos del pasado.
A partir de los años 90, superado este movimiento, aparece el tardomoderno, estilo en el que es difícil agrupar estilísticamente a sus obras, pero que sí tienen algunos rasgos similares, como el amor por los nuevos materiales y tecnologías, o el abandono de las tradicionales formas horizontales y verticales, que son sustituidos por formas de composición compleja y ondulante.
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Escuela de artes y oficios de Algeciras. 1971. F. Garrido Rodríguez. |
Biblioteca Pública de Granada. 1985. Carmen Mostaza Martínez. |
Intervención en las ruinas de la Iglesia de San Francisco. Baeza, Jaén. Sebastián Araujo Imagen de S. Quesada en la Web del IAPH |
Importante
El Patrimonio arquitectónico del siglo XX articula y determina nuestra forma de relacionarnos con el espacio en el que vivimos.
Entre principios del siglo XX y los años 30, Andalucía se va a mover entre el historicismo y el regionalismo, estilos de gran valor estético pero de poca trascendencia innovadora o de cambio. Aníbal González es quizá el más famoso de los arquitectos del momento.
A partir de los años 30, Andalucía revitaliza su visión arquitectónica y da entrada a los esquemas racionalistas aunque conservando una impronta local. José Luis Sert, el arquitecto catalán deja en Andalucía algún ejemplo destacado.
El movimiento moderno, en el que primaba la funcionalidad, se abadona poco a poco a partir de los años 70, cuando primero el posmoderno y más tarde el tardomoderno tratan de recuperar el valor de lo estético frente a la dictadura de lo funcional.
Pregunta Verdadero-Falso
Lee las siguientes afirmaciones e indica sin son ciertas o erróneas:
Retroalimentación
Falso
Evidentemente es falso. Cualquier patrimonio deja una huella y marca unos modos de vida. En el más actual, esto se hace más evidente, claro.
Retroalimentación
Verdadero
Así es. Sin negar el valor estético y de soporte de la tradición, lo cierto es que sí mantiene un lenguaje algo, digamos atrasado con respecto a lo que pasa en otras zonas europeas.
Retroalimentación
Falso
Podía ser si viviéramos en Francia, pero no. En realidad, como decíamos antes, hasta los años 30, Andalucía, en general, se mueve entre el historicismo y el regionalismo.
Retroalimentación
Falso
No, no es cierto. En realidad, desde los años 30, las ideas racionalistas comienzan a entrar en nuestro país y en nuestra región. No en vano, algunas de las mejores obras nacionales están en aquí.
Retroalimentación
Verdadero
Así es. Son muchas las obras del arquitecto sevillano que así lo demuestran. Además del citado Pabellón de la Navegación, recibieron merecida fama las viviendas de la Avenida Ramón y Cajal, también en Sevilla.