2.1. El Imperio Habsburgo

Tras la muerte en 1504 de Isabel la Católica, la unión dinástica entre Castilla y Aragón estuvo a punto de romperse. En principio, el derecho al trono castellano correspondía a la hija mayor de Isabel y Fernando de Aragón, Juana de Castilla, que ha pasado a la historia como Juana la loca. Como habrás comprobado, el hecho de ser mujer no hubiera impedido que Juana ejerciera en Castilla, como su madre, la autoridad monárquica. Fue el achaque de su enfermedad mental el que la apartó de los asuntos de gobierno, y aunque mantuvo hasta su muerte en 1555 el título de reina de Castilla, el poder efectivo quedó en diversos momentos en manos de su padre Fernando, de su marido Felipe de Habsburgo (Felipe el Hermoso), del Cardenal Cisneros, como regente, y, finalmente, de su hijo Carlos de Habsburgo, que reinó con el nombre de Carlos I.
Hasta su muerte en 1516, Fernando el Católico gobernó personalmente la Corona de Aragón. A su muerte fue su nieto, Carlos de Habsburgo, quien heredó de manera conjunta ambas coronas.

Juana la Loca Felipe el Hermoso
Juana la Loca
Imagen en Wikipedia. Licencia CC
Felipe el Hermoso
Imagen en Wikipedia. Licencia CC.

Este mapa conceptual te puede ayudar a situar mejor el origen de Carlos I.

Genealogía de Carlos I
Árbol genealógico de Carlos V
Mapa conceptual en el repositorio de agrega.juntadeandalucia
A la herencia de los Reyes Católicos Carlos de Habsburgo sumó la herencia de sus abuelos paternos. Escucha atentamente este vídeo en donde se explica la extensa herencia de Carlos I.
Europa en tiempos de Carlos V
Video de Artehistoria en Youtube

Para saber más

Mapa de los territorios europeos que  pasaron a estar gobernados por Carlos de Habsburgo por la herencia de sus abuelos

Imperio de Carlos V
Imperio de Carlos V
Imagen de Mikel González en Wikipedia. Licencia CC.

Teniendo en cuenta toda esta herencia puedes comprobar que Carlos de Habsburgo se convirtió en el soberano más poderoso de toda Europa, y esto le hizo asumir sobre sus espaldas el peso de defender a la Europa cristiana del intento de expansión del Imperio turco otomano. Más repercusión para la Historia de España tuvo, tal vez, que también quiso ejercer de defensor del catolicismo papal frente a la expansión de la religión protestante en Europa; una costosa política de enfrentamientos bélicos continuos que herederon y mantuvieron sus sucesores.

La familia completa

Los reyes de la Casa de Austria que gobernaron el Imperio hispánico no son muchos, y sus nombres fácilmente recordables. Puedes quedarte con la idea de que la dinastía se inicia y se acaba con un Carlos (Carlos I y Carlos II respectivamente), y que en medio reinaron tres Felipe bien ordenados (Felipe II, Felipe III y Felipe IV). Puedes ver su árbol genealógico simplificado en la imagen de la derecha. En la siguiente presentación encontrarás un resumen de los principales aspectos de cada reinado.

Genealogía de los Reyes de la Casa de Austria
Imagen de Nachoseli en Wikipedia. Licencia CC

Los Austrias mantuvieron los principios básicos de la organización política y del gobierno para sus territorios y antiguos reinos que conservaron sus leyes e instituciones propias. Felipe II estableció de forma permanente la capital en Madrid lo que aunque por un lado favoreció a la capital castellana por otra parte tuvo que acarrear con la mayor parte de los gastos del nuevo estado.  La administración de Consejos se mantuvo ampliándose en algunos como el Consejo de Indias y los territoriales de Castilla, Aragón, Italia, Portugal y Flandes. Desde Madrid los reyes controlaban la gestión de todo el imperio con el apoyo de los secretarios personales que le informaban de lo despachado en los Consejos. En los territorios estaban representados por los virreyes y gobernadores. A nivel municipal se mantuvo la figura del Corregidor y en el ámbito judicial en cada ciudad se establecieron las Audiencias.

El Escorial
El Escorial
Fotografía de Michael Kramer en Wikipedia. Licencia CC.

En el siglo XVII la posibilidad de acrecentar la fuerza de una monarquía debilitada por las cargas económicas se planteó la idea de unificar la legislación en todos los reinos peninsulares. Sin embargo el resultado fue el inicio de la independencia de Portugal y el intento separatista de Cataluña con el apoyo francés ambos en la cuarta década del siglo. Mientras Portugal se independizó en 1652 Cataluña pudo recuperarse aunque pasaron parte de sus territorios a Francia.

Importante

Los reyes de la casa de Austria mantuvieron los principios básicos heredados de los Reyes Católicos. Cada territorio conservó sus instituciones y sus propias leyes. A partir de Felipe II dispuso que Madrid fuese la capital permanente por lo que el centro del poder se situaba en Castilla. Aunque los principales cargos de la Corte fueron castellanos también los súbditos que tuvieron que cargar sobre sus espaldas (por vía de impuestos) el coste del mantenimiento del Estado.

En el siglo XVII las cosas se complicaron mucho para España, coincidiendo con un momento crítico de su economía. En 1618 se inició en los territorios europeos de los Habsburgo una guerra entre protestantes y católicos y el rey de España no dudó en intervenir a favor de estos últimos. Se iniciaba la famosa Guerra de los Treinta Años en la que unos años después estaban involucrados casi todos los países de Europa.
Durante esa guerra la monarquía hispana tuvo que mantener demasiados frentes abiertos a un tiempo.

  • Inglaterra hostigaba las colonias americanas y las costas españolas
  • los rebeldes holandeses extendían cada vez más el territorio que controlaban en los Países Bajos
  • Portugal se sublevaba y proclamaba su independencia
  • los protestantes alemanes recibían refuerzos de Suecia, Dinamarca y Noruega,
  • Francia aprovechaba la ocasión y atacaba por los Pirineos, Bélgica y Luxemburgo

Una guerra así sólo podía tener un final: la derrota y rendición de España, que tuvo que empezar a asumir que ya no era la superpotencia de Europa y que ahora le tocaba intentar defenderse del continuo acoso que iban a sufrir las posesiones que le quedaban.

La Paz de Westfalia (1648) puso fin a esta Guerra de los Treinta Años. Allí España tuvo que reconocer finalmente la independencia de Holanda, aunque mantuvo su dominio sobre Bélgica.

En el Tratado de los Pirineos (1659), que puso fin momentáneo a la guerra con Francia, España tuvo que cederle los condados catalanes de Rosellón y Cerdaña, así como el Artois y otros territorios de los Países Bajos españoles.

En 1668 se reconoció la independencia de Portugal (con su imperio marítimo).

En resumen, cuando en 1665 accedía al trono un nuevo rey con el nombre de Carlos II, en muchas cortes de Europa se empezaron a afilar cuchillos para iniciar el reparto de la tarta que suponía lo que quedaba del Imperio Hispano, que todavía era mucho: Bélgica, Francocondado, Milán, Nápoles, Sicilia, Aragón y Castilla con su imperio colonial.

Firma del Tratado de Münster dentro de los Tratados de Westfalia en 1848
Firma del Tratado de Münster por el que España reconocía la independencia de Holanda dentro de los Tratados de Westfalia en 1848
Imagen en Wikipedia. Licencia CC.

Importante

La defensa del catolicismo por parte de la monarquía española le llevó a involucrarse en la Guerra de los Treinta Años (1618-1648), una guerra europea que se inició en los territorios de los Habsburgo alemanes en la que se involucraron las principales potencias europeas. La derrota supuso la pérdida para España de gran parte de sus posesiones y el prestigio en el continente europeo.

Ejercicio resuelto

Observa con atención el siguiente video donde encontrarás la respuesta a las preguntas que figuran a continuación:


Europa en tiempos de Felipe V
Video de Artehistoria en youtube

1. En la Península distinguimos cuatro reinos ¿cuáles?
2. ¿En cuantas ramas se divide la casa de Austria?
3. ¿Quienes son los dos principales rivales de la Casa de Austria?  

Objetivos

Mapa de los territorios europeos que  pasaron a estar gobernados por Carlos de Habsburgo por la herencia de sus abuelos

Imperio de Carlos V
Imperio de Carlos V
Imagen de Mikel González en Wikipedia. Licencia CC.

Teniendo en cuenta toda esta herencia puedes comprobar que Carlos de Habsburgo se convirtió en el soberano más poderoso de toda Europa, y esto le hizo asumir sobre sus espaldas el peso de defender a la Europa cristiana del intento de expansión del Imperio turco otomano. Más repercusión para la Historia de España tuvo, tal vez, que también quiso ejercer de defensor del catolicismo papal frente a la expansión de la religión protestante en Europa; una costosa política de enfrentamientos bélicos continuos que herederon y mantuvieron sus sucesores.

Actividad

Los reyes de la casa de Austria mantuvieron los principios básicos heredados de los Reyes Católicos. Cada territorio conservó sus instituciones y sus propias leyes. A partir de Felipe II dispuso que Madrid fuese la capital permanente por lo que el centro del poder se situaba en Castilla. Aunque los principales cargos de la Corte fueron castellanos también los súbditos que tuvieron que cargar sobre sus espaldas (por vía de impuestos) el coste del mantenimiento del Estado.

Actividad

La defensa del catolicismo por parte de la monarquía española le llevó a involucrarse en la Guerra de los Treinta Años (1618-1648), una guerra europea que se inició en los territorios de los Habsburgo alemanes en la que se involucraron las principales potencias europeas. La derrota supuso la pérdida para España de gran parte de sus posesiones y el prestigio en el continente europeo.