Ejercicios resueltos
¿Cómo es posible que la inmensa mayoría de las chicas con delgadez severa estén satisfechas con su imagen? Este revelador
dato, incluido en el estudio hecho por el Ministerio de Sanidad en
busca de la unificación de las tallas de ropa de las mujeres, da una
clara imagen de la influencia que la estética de las modelos y de la
publicidad tiene en la población femenina, especialmente en el sector
más vulnerable: el de las más jóvenes. Porque la delgadez,
severa o moderada, está concentrada, según el mismo estudio, en las
chicas de menos de 19 años, otro dato preocupante. Muchas
mujeres que siguen el dictado de la moda, aunque no sea al pie de la
letra, no pueden evitar ver ahora algo gruesa, por ejemplo, a la modelo
Cindy Crawford en sus famosos vídeos de gimnasia de hace 20 años,
aunque entonces la vieran estupenda. El dictado de la moda cambia
nuestros gustos estéticos, los de las mujeres y los de los hombres, de
manera casi imperceptible pero real. La sociedad se ha acostumbrado a
una estética femenina que ya no sólo es sacrificada para las mujeres y
ensalza de forma desproporcionada los valores esteticos frente a otros,
sino que es también insalubre.
Tras la necesaria iniciativa emprendida por
la Sanidad, hace falta abordar otras. La primera, la revisión de la
publicidad. No se trata de promover
medidas en exceso reglamentaristas, pero de una vez se ha comprobado
que el dictado de la moda provoca situaciones que ponen en riesgo
sanitario a muchas mujeres, sí se trata de poner freno a la dictadura sin control de los cánones dominantes.
En las tiendas de muchos grandes modistos,
los dependientes hacen gala a menudo de no tener ni siquiera tallas
normales (una 42, por ejemplo) y es frecuente que en la 40 no quepa una
mujer que use esta talla normalmente. Pretenden seguramente que
sólo luzcan su ropa las elegidas, por la talla. Una vez que estas se
unifiquen se podrá señalar con el dedo a quienes sólo busquen vestir a
las delgadas, a los que hagan caso omiso de los costes que tiene esta
estética para la sociedad, pero también a los que ajusten las tallas a
las mujeres y a los hombres con hábitos saludables.
El País, 10 de febrero de 2008
Lee con
atención este texto, porque a continuación te haremos una serie de
preguntas sobre él. Fíjate especialmente en las palabras subrayadas.
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Pregunta Verdadero-Falso
1.- Fijándote en el texto anterior, contesta si son verdaderas o falsas las siguientes afirmaciones.
Retroalimentación
Verdadero
La palabra chica es simple, su raíz es chic- y los demás son morfemas de género y número.Retroalimentación
Falso
Todas son simples salvo modistas, que está formada por moda+ista.Retroalimentación
Falso
Pro- no es un sufijo sino un prefijo; se coloca delante del lexema, y no detrás, como los sufijos.Retroalimentación
Falso
Todas las palabras subrayadas son simples o derivadas, pero no hay ninguna compuesta.Retroalimentación
Falso
Las palabras derivadas marcan género y número como las simples.
Pregunta de Selección Múltiple
Solución
Solución
Solución
Solución

Actividad de Espacios en Blanco
3.- Completa los espacios en blanco indicando si cada una de las siguientes palabras son simples, derivadas o compuestas.

Pregunta Verdadero-Falso
4.- Indica si son verdaderas o falsas las siguientes afirmaciones.
Retroalimentación
Verdadero
De la unión de dos o más palabras simples unidas aparecen palabras compuestas, por ejemplo de lavar y vajilla aparece nuestro actual lavavajillas.
Retroalimentación
Falso
Las dos primeras son compuestas pero recoger es una palabra derivada formada del prefijo re- + el verbo coger.Retroalimentación
Falso
Son tres ejemplos de compuestos imperfectos.Retroalimentación
Verdadero
Todos son ejemplos de prefijos que, colocados delante del lexema, forman palabras derivadas. Por ejemplo: revivir, prefijar, supermercado o hipermercado.Retroalimentación
Verdadero
Son de la misma familia léxica porque están formadas por el mismo lexema más algún sufijo.
Actividad de Espacios en Blanco
5.- Completa los espacios en blanco con las palabras homófonas correspondientes.