2. El sistema respiratorio: fisiología

La función principal del sistema respiratorio es la de aportar al organismo el suficiente oxígeno necesario para el metabolismo celular, así como eliminar el dióxido de carbono producido como consecuencia de ese mismo metabolismo.

La fisiología del sistema respiratorio comprende la ventilación pulmonar, el intercambio gaseoso en los pulmones y tejidos, el transporte de gases por la sangre y la regulación de la respiración.

Ventilación pulmonar

Para que el aire se renueve en los pulmones se recurre a la ampliación o reducción de la caja torácica a la que están adheridos los pulmones.

Los movimientos de la caja torácica son debidos a un músculo situado bajo ella, el diafragma y a los movimientos de las costillas por los músculos intercostales.

diafragma

Imagen de T.Knott en Wikimedia Commons. Licencia CC

El diafragma se sitúa bajo los pulmones separado de ellos por la pleura. Tiene, en reposo, forma acampanada.

Los músculos intercostales, se sitúan entre las costillas y al contraerse hace que estas asciendan.

respiracion
  • Si la caja torácica aumenta de volumen se produce una presión negativa que hace que el aire penetre: inspiración

Se contrae el diafragma y la cavidad torácica se expande. Los pulmones se dilatan al entrar aire oxigenado. Tras la inspiración, el oxígeno llega a los alvéolos

y pasa a los capilares arteriales.

  • Si la caja torácica disminuye en volumen se crea una presión que hace salir el aire: espiración

En la espiración el diafragma y las costillas vuelven a su posición normal. La caja torácica disminuye de volumen.

Imagen de J.Pierce en Wikimedia Commons . Dominio Público

La inspiración es un proceso activo, ya que necesita del trabajo muscular. Antes de cada inspiración, la presión intrapulmonar es casi igual a la existente en la atmósfera. La espiración es un fenómeno pasivo, que solo depende de la elasticidad de los pulmones. Antes de cada espiración, la presión intrapulmonar es mayor a la atmosférica.

Importante

La inspiración es un proceso activo, ya que necesita del trabajo muscular. Antes de cada inspiración, la presión intrapulmonar es casi igual a la existente en la atmósfera. La espiración es un fenómeno pasivo, que solo depende de la elasticidad de los pulmones. Antes de cada espiración, la presión intrapulmonar es mayor a la atmosférica.

Intercambio y transporte de gases

La hematosis, es el proceso por el cual el oxígeno del aire inspirado pasa a la sangre y se intercambia con el dióxido de carbono (CO2) que es impulsado de la sangre a los alvéolos para ser eliminado con la espiración al exterior. La hematosis en realidad consiste en una difusión de gases que se produce desde un lugar de mayor a otro de menor concentración de los mismos.
La hematosis se produce a nivel de los alvéolos (respiración externa) y de las células de todos los tejidos (respiración interna o celular).

hematosis
Imagen de domdomegg en Wikimedia Commons. Licencia CC

intercambio gases

El aire inspirado, con alta carga de oxígeno, atraviesa por difusión simple la membrana alveolocapilar y llega a la sangre, que tiene menos concentración.

El paso de oxígeno desde los alvéolos a los capilares arteriales es favorecido por la presencia de una proteína, la hemoglobina (Hb), presente en los glóbulos rojos. Cuando la sangre abandona los pulmones transporta el 97% de oxígeno en forma de oxihemoglobina, quedando un 3% disuelto en el plasma.


El CO2 formado por el metabolismo celular es volcado a la sangre venosa y captado por los glóbulos rojos. Una parte se transforma en ácido carbónico, que rápidamente se ioniza formando bicarbonato y protones.

El resto de la sangre es llevada hacia los pulmones y, al tener más concentración de dióxido de carbono que el aire inspirado, pasa a los alvéolos y es eliminado del organismo con la espiración.

Imagen  en P. Biosfera. Autorizado su uso bajo derecho de cita según aparece en su web

Importante

La hematosis es el intercambio de oxígeno y de dióxido de carbono que tiene lugar entre los alvéolos y los capilares del pulmón a través de la membrana alveolocapilar, que es semipermeable.

Regulación de la respiración

El sistema nervioso ajusta el ritmo de ventilación alveolar casi exactamente a las necesidades del cuerpo, de manera que la presión sanguínea de oxígeno  y la de dióxido de carbono  difícilmente se modifica durante un ejercicio intenso o en situaciones de alarma respiratoria.  Estos mecanismos de regulación son el nervioso (centro respiratorio) y  el químico.

El centro respiratorio se sitúa en el bulbo raquídeo y está compuesto por varios grupos muy dispersos de neuronas que reciben la información localizada por receptores que

se hallan en los pulmones y en la pleura. El centro respiratorio envía órdenes a los músculos para que se produzcan las inspiraciones y espiraciones.

El ritmo de éstas depende de, entre otras cosas, del aumento en sangre de CO2 o de la disminución de oxígeno.

bilbo raquideo

Posición del bulbo raquídeo
Imagen de LSDB en Wikimedia Commons . Licencia CC

La regulación química tiene como objetivo final conservar las concentraciones adecuadas de oxígeno, dióxido de carbono e hidrógeno en los líquidos del organismo.

Comprueba lo aprendido

Pregunta 1

En la espiración el diafragma se contrae.

Pregunta 2

La espiración es un fenómeno activo porque necesita el trabajo muscular del diafragma.

Pregunta 3

En la hematosis los gases pasan de un lugar de menor concentración a otro de mayor concentración.

Pregunta 4

El paso de oxígeno de los alvéolos a los capilares arteriales es favorecido por una proteína, la hemoglobina.

Pregunta 5

El centro respiratorio es un mecanismo químico de regulación de la respiración.