1. Nos vamos de zambomba
Es casi Navidad y decides asistir a algo que, no entiendes por qué, nunca has tenido la oportunidad de presenciar como músico: una zambomba flamenca en Jerez. Invitas también a un amigo extranjero a disfrutar de este bien de interés cultural de Andalucía. Aunque se muestra en diversos teatros de alrededores, pensáis que es mejor opción verla hoy en las calles: la hoguera en el patio, los vecinos en torno a una lumbre y villancicos por bulerías. Zambombas sonando con su sonido vibrante mientras que la gente, aparte de canciones, comparte bebidas y alimentos. También hay guitarras y algún cajón flamenco que le confiere ese sonido único. Incluso algunos vecinos y vecinas se animan a bailar. Reconoces varios villancicos tradicionales pero con sonoridad flamenca. En el minuto 28 de este interesantísimo documental puedes ver un ejemplo:
En un momento de disfrute tu amigo te pregunta: “Esto es flamenco, ¿verdad?”. “Sí”, le contestas con seguridad. “¿Por qué?”, vuelve a preguntar. Se hace el silencio. Sin lugar a dudas, eres capaz de reconocer cuándo un tema musical tiene esos toques que lo hacen perteneciente (o, al menos, lo acercan) al género por excelencia de nuestra Comunidad Autónoma. Sin embargo, y a pesar de que eres músico (o pretendes hacer carrera musical) desconoces cuáles son los ingredientes específicos de la música flamenca.
Recuerda que has aprendido el concepto de ritmo y compás, y compusiste tu propia base utilizando la célula rítmica del “Cumpleaños Feliz”. También has aprendido sobre melodía y armonía, dando tus primeros pasos como director artístico. Pero, ¿qué estructuras rítmicas suelen seguir las diferentes variedades del cante flamenco, también llamados “palos”? Conoces las tonalidades mayores y menores pero, ¿qué es la cadencia flamenca? En cuanto a la melodía, ¿qué dibujos melódicos son habituales? ¿Qué relación entre la letra y la música encontramos? Y, en este sentido, ¿qué son los melismas tan usados en el cante?
A lo largo de esta situación de aprendizaje, vas a conocer las particularidades del elemento rítmico en el Flamenco, conociendo la complejidad y variedad de los distintos ritmos flamencos. Además, también te introducirás en los fundamentos de la armonía y la melodía flamenca. Presta mucha atención a todo ello, ya que, para resolver el reto que se te planteará al final de la situación de aprendizaje, deberás aplicar los conocimientos que adquieras, ¡además de demostrar que tienes un poco de duende!