1. El período minoico

En el siguiente vídeo se relatan y describen gráficamente la vida en Creta y la civilización minoica. Visualízalo atentamente. Reproducimos el texto para que lo puedas seguir mejor:

La civilización minoica
Vídeo de Meli San Martín en Youtube

Creta es una isla extremadamente montañosa, con alturas cercanas a los 2.500 metros en el Monte Ida y en las Montañas Blancas y una altitud media de más de 200 metros en gran parte de la superficie de la isla. Estas montañas forman una larga cordillera que cruza la isla de oeste a este. Su relieve está configurado en gran medida por la actividad sísmica, responsable de sus 1.040 kilómetros de recortadas costas y de sus llanuras fragmentadas, pero también de suaves y deliciosos valles, cuevas y desfiladeros.

Creta albergó la primera civilización europea de la que conservamos escritura y que construyó palacios, la civilización minoica. Los palacios se ubicaban en las colinas de suave relieve, con vías de comunicación y controlando un amplio territorio. No estaban fortificados, y su complicada planta, muy extensa y llena de pasillos y habitáculos probablemente los hizo perdurar en la imaginación de los cretenses como laberintos. La misma palabra “laberinto” procede de la labrys, el hacha de doble filo, que presidía las construcciones como objeto simbólico y quizá mágico.

La ornamentación no es sobria en absoluto. El arte cretense es un arte colorista, alegre y dinámico. Un arte aristocrático y cortesano ligado a los palacios, concebido como decoración, rico en simbolismo. El color está presente en los mismos elementos arquitectónicos y en la policromada decoración pictórica mural.

Los seres humanos tienen cuerpos largos, con una cintura muy delgada que subraya su elegancia. Las mujeres llevan el busto descubierto y faldas de volantes que pueden haber sido el antecedente de nuestros trajes de flamenca, peinados complicados con muchos rizos, narices largas y delgadas.

La cara, amable y sonriente, se ve de perfil salvo el ojo, que se aprecia de frente. Los hombres son de color ocre y las mujeres, de color blanco. Los muertos son azules. Aunque estos perfiles recuerdan los egipcios, la pintura cretense no da en absoluto impresión de rigidez.

Los delfines nos hacen recordar que se trata de una cultura marina y mediterránea y, por supuesto, no falta el motivo de los juegos taurinos.

Los minoicos desarrollaron oficios artesanales con gran maestría. Conservamos pequeñas pero exquisitas esculturas. Sus orfebres trabajaron delicadas y preciosas joyas de oro: pendientes, sortijas y colgantes que realzarían la belleza de las elegantes damas cretenses.

La cerámica es igualmente llamativa. Utilizaban hornos de rotación lenta que permiten crear vasos de paredes finísimas ricamente policromados. Los productos son variados:

  • En la cerámica de estilo Camarés predomina el fondo negro recubierto con una rica decoración de temas geométricos o estilizados motivos vegetales con ondulaciones, espirales y giros en colores rojos y blancos.
  • El estilo naturalista puede ser floral (flores que nacen de la base del recipiente y brotan hasta lo alto mediante espirales y giros en vasijas de perfiles esbeltos y elevados, más simétricas y perfectas por el empleo del torno rápido) o marino (destaca el pulpo, representado fuera del eje del recipiente, con sus patas entrecruzándose en animado movimiento).

Las formas de las vasijas pueden ser también enormemente sofisticadas y originales.

Su fecunda imaginación creó también extraordinarias leyendas, como la de Minos y Pasífae, Teseo y el Minotauro, Dédalo e Ícaro, que los poetas se encargaron de trasmitir.

Pero la misma causa que dio su variado relieve a Creta, una erupción volcánica de gran magnitud en la vecina isla de Tera, acabó con esta brillante y rica civilización.

Importante

  • Los primeros ejemplos de escritura en Creta datan del 1900 a.n.e.
  • Los grandes palacios se construyeron entre los años 2000 y 1400 a.n.e. en Cnoso, Festo, Malia y Canea. Cnoso y Festo fueron destruidos alrededor del 1700. Se reconstruyeron, pero a mediados del siglo XVI a.n.e. la isla volcánica de Santorini (Tera) entró en erupción. La devastación llegó a Creta y supuso, directa o indirectamente, el fin de la civilización minoica.
  • La economía se basaba en la agricultura y la ganadería, según revela la lectura de las tablillas encontradas en los palacios. La artesanía era próspera, y existía ya una importante especialización en los oficios: pastores, cazadores, orfebres, leñadores, albañiles, carpinteros, alfareros...
  • El pan, el aceite y el vino, pilares tradicionales de la cultura mediterránea, lo eran también de la minoica. La pesca era también, a buen seguro, un recurso siempre disponible y apreciado para la dieta diaria.
  • Los palacios albergaban tanto a la realeza como a los nobles, artesanos y esclavos. No estaban fortificados, lo que hace pensar en una sociedad que se siente segura, floreciente y solidaria.
Mapa de la Creta Minoica Mapa de la Creta Minoica

Curiosidad

Los Juegos Olímpicos de Atenas, en 2004, se abrieron con una magnífica ceremonia en la que se recreaban los momentos más importantes de la cultura e historia de Grecia. Observa con atención los dos primeros minutos de este vídeo e identifica a los personajes que van apareciendo en él.

Ceremonia de inauguración de las Olimpiadas de Atenas
Ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de Atenas
Vídeo de Olympic Channel en Youtube

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