1. Segunda industrialización: Sólo Cataluña y el País Vasco se libran del fracaso

AV - Reflexión

Para empezar este tema hemos pensado que lo mejor es que veas el vídeo que te presentamos a continuación. Como introducción de lo que vamos a estudiar creemos que no está mal ya que casi se puede decir que lo resume. Pero para que le saques más partido hemos puesto un par de cuestiones que te van a servir para comprender mejor lo que vamos a estudiar. ¡Que disfrutes del vídeo!
 
 

1. ¿Cuáles fueron los motores de la economía española durante la segunda mitad del siglo XIX? ¿Qué zonas se vieron más favorecidas?

2. ¿Cuál fue el centro de maoyr expansión industrial de todo el país en el último tercio del siglo XIX? ¿Gracias a qué?

Ya viste en la unidad anterior como el proceso de industrialización en España fue lento y, en general, tuvo un éxito limitado y éste se centró en la zona norte de nuestro país, especialmente a Cataluña y el País Vasco. Con respecto a la primera mitad del siglo XIX la gran diferencia radica en la desaparición, casi por completo, de la escena industrial española de Andalucía. Prácticamente todo el crecimiento industrial se va a centrar en dos zonas: Cataluña y el País Vasco.

 

Tejedora a vapor en el museu D'Historia de Catalunya

La industrialización del vapor.

Imagen tomada del Museu d'Història de Catalunya

 

La habitación del servicio. Casa Milà
La habitación del servicio Fotografía de Stoned59 en Flickr.   Licencia CC

CATALUÑA

Cataluña fue el territorio que antes se incorporó al proceso industrial en España gracias a una burguesía catalana que rápidamente vio la necesidad de la inversión en desarrollo industrial. De hecho, fueron los primeros en utilizar los nuevos inventos procedentes de Inglaterra para mejorar y aumentar su producción. Cataluña entra en la Restauración con una dinámica positiva de crecimiento industrial importante, lo que le permite seguir liderando (junto al País Vasco) la industrialización española. El sector textil continuaba siendo el eje sobre el que giraba el resto de la industria catalana y el motor que hacía mover su economía. A pesar de la seguridad que el textil ofrecía, los industriales burgueses decidieron, con buen criterio, diversificar la economía buscando el desarrollo de nuevas industrias, especialmente la metalúrgica o la de bienes de equipo. Entre esta diversificación y el control del comercio interior en lo referente a la industria textil, Cataluña continúa siendo una de las regiones de mayor peso en la economía española.

 

PAÍS VASCO

Acción de Altos Hornos de Vizcaya

Acción de Altos Hornos de Vizcaya

  Archivo de Wikimedia Commons.   Licencia CC

A partir de los años 70 será el País Vasco el motor industrial, y por lo tanto económico, español. La clave para este desarrollo será el hierro. Las minas existentes en dicho territorio eran lo suficientemente importantes como para permitir el crecimiento del sector industrial, concretamente de altos hornos. Sin embargo, España no tenía ni la capacidad técnica, ni económica, ni siquiera natural (el carbón que procedía de Asturias no tenía la calidad suficiente como para sacarle todo el partido al hierro) como para que el resultado fuera importante. La única salida era, de nuevo, el capital extranjero, en este caso galés, que ofrecía capital y técnica, además de un carbón de coque de mayor calidad que el asturiano. A cambio, el hierro vasco era exportado a tierras galesas.

Este intercambio tan natural permitió al País Vasco concentrar gran parte del desarrollo industrial español durante el siglo XIX, algo que se extendió en el tiempo hasta bien entrado el siglo XX.

El crecimiento de la industria siderúrgica llevó directamente al desarrollo indirecto de otros sectores, especialmente la metalurgia y la industria naval.

 

 

Tranvía pasando por un túnel en San Sebastián Puente colgante de Guetxo

Tranvía por el túnel de Herrera

Archivo de Wikimedia Commons.   Licencia CC

Puente colgate en Guetxo

Fotografía de Misco13 en Flickr.  Licencia CC

Pre-conocimiento

Bilbao fue, quizá, la ciudad que más creció durante los últimos años del siglo XIX gracias al proceso de industrialización que ya has visto. Este proceso se puede localizar simbólicamente en la Ría de Bilbao, en la que se centralizaron muchas de las funciones industriales de la ciudad. En torno a 1872 se inicia el ensanche y acondicionamiento de la ría a las necesidades industriales de la ciudad. En apenas 20 años la ría cambió completamente su estructura y con ello la de la ciudad que la albergaba.

100 años después la Ría se había convertido en una zona deprimida, contaminada y abandonada. Curiosamente ese fue el sitio escogido para revitalizar la ciudad a partir de 1990. La reurbanización y saneamiento de la zona ha tenido tal éxito que hoy es  eje fundamental del desarrollo urbanístico, y sobre todo turístico, del a ciudad con edificios tan emblemáticos como el que Frank O. Gehry levantó: El Museo Guggenheim de Bilbao.

 

Museo Guggeheim de Bilbao

Museo Guggeheim de Bilbao

Archivo de Wikimedia Commons.   Licencia CC

OTRAS ZONAS

Aunque parezca extraño casi todo el desarrollo industrial de la segunda mitad del siglo XIX y parte del siglo XX se limitó exclusivamente a estas dos regiones antes citadas. Sólo Asturias y, especialmente, Cantabria conocieron un crecimiento importante al albur de la siderurgia vasca.

Ya vimos en la unidad anterior como los primeros intentos de desarrollo industrial que surgen en Andalucía acaban por fracasar. Al menos Andalucía lo intentó. El resto de regiones, salvo casos aislados y ya entrado el siglo XX (como Valencia) permanecerán en el más triste de las atonías. La única región que crece de una manera importante será Madrid gracias a que las empresas comienzan a entender las posibilidades que les podía ofrecer la capital de España.

A pesar de un evidente crecimiento durante el siglo XIX la realidad sigue siendo que, en lo económico, España continúa estando bajo explotación extranjera. El desarrollo catalán y, especialmente, el vasco no ha conseguido vertebrar un tejido industrial lo suficientemente potente como para industrializar nuestro país.

Altos Hornos en Pontevedra

Altos hornos de las minas de Vilaoudriz. Pontevedra

Archivo de Wikimedia Commons.  Licencia CC

Actividad

  • El proceso de industrialización español fue lento y con un éxito limitado a dos zonas: País Vasco y Cataluña.
  • En Cataluña el éxito continuaba con la línea anterior: desarrollo de la industria textil que ahora se expande aun más gracias al deasrrollo del ferrocarril y de las medidas proteccionistas que toma el estado.
  • El País Vasco vive un desarrollo enorme gracias a las minas de Hierro y al capital británico, con los que se instalan siderúrgicas de gran nivel.
  • El resto de España, salvo el norte (Asturias y Cantabria ) y Madrid, como capital del estado, no vivió ningún avance en la industria.

AV - Pregunta Verdadero-Falso

Lee las sigueintes afirmaciones y contesta si son verdaderas o falsas.

Pregunta 1

Durante la segunda mitad del siglo XIX Andalucía seguirá liderando el desarrollo industrial español

Sugerencia

Pregunta 2

Cataluña continuó creciendo industrialmente hablando gracias, entre otras cosas, al control del mercado nacional.

Sugerencia

Pregunta 3

Las mayores inversiones que se dan en el País Vasco en la extracción de hierro proceden de capital galés.

Sugerencia

Pregunta 4

Las empresas comienzan a instalarse en Madrid al entender la importancia de situarse cerca del centro administrativo del estado.

Sugerencia