La lírica: La lírica coral

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2.º de Bachillerato

Griego II

Contenidos

La lírica:

la lírica coral

detalle del cuadro en el que se observa a las tres Gracias

Sandro Botticelli: Primavera (detalle)
Imagen en WikimediaDominio publico

... y con la añoranza que desata los miembros
y mira más suave que el sueño y que la muerte,
no en vano es ella deseable;
pero Astimeloisa nada me responde,
sino que, llevando la guirnalda,
cual estrella fugaz que atraviesa el esplendente cielo...

Alcmán: Partenio de Astimeloisa

Si en el canto monódico o individual el poeta cantaba sobre sí mismo y sus sentimientos, en el canto coral se hacía intérprete de un grupo y asumía cometidos que rebasaban lo estrictamente personal. Como al canto coral lo acompañaba la danza, su carácter quedó profundamente influido por ella. Estas danzas eran de un carácter regular, formalístico, repitiéndose los mismos movimientos en los mismos tonos; por ello la letra debía tener un formalismo similar. Está compuesta en estrofas idénticas en su métrica. A pesar de esto, ninguno de los ejemplos conservados del canto coral está compuesto con arreglo al mismo plan que otro. De Alcmán en el siglo VII a Píndaro en el siglo V salta a  la vista el desarrollo de la variedad y complejidad de esquemas métricos, aunque perdura el formalismo indispensable en un arte que combina el texto, la música y la danza. Este formalismo no da rigidez ni lentitud. Al contrario, los versos griegos se mueven con viveza inusitada. Tampoco la complejidad de los metros obstaculiza la disposición de las palabras en un orden coherente e inteligible. El canto griego no siempre es fácil de entender, pero sus dificultades no proceden de forzar a las palabras a un orden desacostumbrado.

La brevedad no era precisamente obligatoria en los cantos corales, que con frecuencia eran extensos. Ya en el siglo VII Alcmán compuso cantos que sobrepasaban el centenar de versos. En el mismo siglo, Estesícoro aumentó considerablemente sus proporciones. Y el canto coral más largo que se conoce es la cuarta Pítica de Píndaro, de cuatrocientos versos. El componer en tales dimensiones es también herencia de la épica.

Determinaron en gran parte el carácter de los cantos corales las ocasiones en que se entonaban. El poeta no componía porque le asaltase el deseo de hacerlo; esperaba a que se le pidiera celebrar algún acontecimiento especial y debía conformar su estilo a la necesidad del momento. Los cantos corales comenzaron probablemente por ser himnos a los dioses y muchos de ellos continuaron siéndolo.  Pero los himnos a los dioses pueden también implicar a los hombres, y los destinos, las necesidades y los hechos de los hombres aparecen inevitablemente en ellos. Los griegos jamás se olvidaban de sus dioses y gustaban de situar los logros y ambiciones humanas en perspectiva frente a los poderes divinos que vigilaban y los hacían posibles. 

Principales autores:

Figura que representa a una joven danzarina

 

 Alcmán  
Esparta 
   Estesícoro   
Hímera
  Píndaro  
Beocia
   Simónides  
Ceos 
   Baquílides   
Ceos
   c. 650 a.n.e    
   c. 630 a.n.e  
556 a.n.e. 518 a.n.e. c. 504 a.n.e.
Danzarina. Figurilla de terracota, siglo II a.n.e.
Imagen en Wikimedia. Dominio público

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