1.1 La actividad económica

Los sectores de la actividad económica

• Primario: actividades que se realizan sobre los recursos naturales: agricultura, pesca, ganadería, silvicultura (explotación forestal y actividades en relación directa con la naturaleza de base) y en algunos casos también a la minería o actividades extractivas. Algunos autores incluyen esta en el sector secundario. La mayoría de la población española hasta los años cincuenta se dedicaba a esta actividad. Hoy el sector agrario es el de menor peso entre todos los sectores productivos. Esto se ha visto favorecido por el desarrollo económico, la mecanización de algunos procesos agrarios, el avance de técnicas que permiten unos mejores rendimientos, etc.
• Secundario: actividades dedicadas a transformar las materias primas o productos no elaborados en productos intermedios o de consumo, por tanto, ya elaborados mediante la industria, minería, el sector energético y la construcción. A principios de siglo muy pocos españoles se dedicaban a estas actividades que han ido creciendo en importancia hasta ocupar un tercio de la población activa a principios de los ochenta, para luego comenzar un descenso, especialmente en el sector industrial, que sin reducir su producción reduce la mano de obra gracias a la tecnología.
• Terciario: actividades encaminadas a satisfacer necesidades de servicios productivos que no se plasman en algo material, es decir, son intangibles: comercio, transportes, banca, publicidad, sanidad, educación, bomberos, policía, etc. Este sector de la actividad económica cada vez ha ido ocupando a más población; desde finales del siglo XX más de la mitad de la población española en edad de trabajar se dedica a estas actividades.

Algunos autores integran el sector terciario superior (servicios financieros, informáticos, de investigación, de telecomunicación, de gestión, dirección, profesiones liberales...) en un sector cuaternario de alta productividad.