2.1. Formas exokársticas
El agua de precipitación y de escorrentía, cuando circula sobre las rocas calizas, erosiona de una forma peculiar y de modo combinado junto a los procesos meteóricos de carbonatación y disolución. Así, es frecuente que por los regueros por los que circula el agua se labren surcos que cada vez se van profundizando más.
Por otra parte, aunque las calizas suelen ser rocas compactas e impermeables, presentan discontinuidades en los planos de estratificación y en los frecuentes sistemas de diaclasas, por los que el agua se infiltra con facilidad al subsuelo.
Finalmente, cuando el agua se abre paso por el interior de la roca formando cavidades, estas se pueden acabar desplomando y dejando depresiones en la región, que también engrosan el número de formas de relieve presentes en la superficie.

Importante
Las formas exokársticas las podemos clasificar en de disolución o erosivas y de precipitación o constructivas. Algunas formas pueden ser consideradas mixtas por intervenir en ellas procesos de los dos tipos. A su vez, podemos considerarlas como formas mayores o menores, según sus dimensiones.
Elaboración propia |

Actividad desplegable
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Imagen, modificada por Jerónimo Pulido, de Pavel Bokr en Wikimedia commons. Licencia cc |

Para saber más
El Torcal de Antequera, el primer Espacio Natural Protegido Andaluz de interés Nacional (1929) es un magnífico ejemplo de paisaje kárstico. Las impresionantes imágenes del torcal de este vídeo te ayudarán a repasar las formas estudiadas.
Video alojado por Torcal de Antequera en YouTube |