3.2. La ordenación del territorio en España.
¿Para qué es necesario ordenar el territorio?
Las grandes diferencias regionales en el interior del territorio español, o de cualquier otra parte del mundo, no solo se deben a la existencia de una serie de contrastes físicos y económicos, sino también al hecho de que el crecimiento de España y de los países, se ha llevado a cabo sin una planificación que cohesione su desarrollo y evite esas diferencias tan acusadas en su interior.
De ahí que desde hace ya casi un siglo, los países más avanzados del mundo hayan tomado conciencia de la necesidad de planificar y ordenar el territorio para evitar grandes disparidades internas.
En España, estas políticas no empezaron a ser tenidas en cuenta hasta la segunda mitad del siglo XX, pero por aquel entonces, las diferencias entre las regiones ya eran demasiado acusadas para darle una pronta solución.
En las últimas décadas, los gobiernos se han esforzado en llevar a cabo esta planificación que evite las grandes disparidades entre las comunidades y equilibren el desarrollo entre las diferentes partes del Estado español.
Los geógrafos disponen en la actualidad de una excelente herramienta para llevar a cabo estos estudios. Se trata de los Sistemas de Información Geográfica, abreviadamente conocidos por las siglas SIG´s. La gran facilidad que permite esta herramienta informática para el análisis espacial, está colaborando de forma importante en que esa ordenación del territorio se haga cada vez de forma más eficaz.
En este vídeo puedes conocer cómo funciona un sistema de información geográfica. Aunque está en inglés, se encuentra subtitulado en castellano.
Publicado por GeoEspacialPeru en You Tube.
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Objetivos
La evolución de la ordenación del territorio en España.
Puede parecer que la ordenación del territorio es en realidad algo muy reciente, pero no es así en absoluto. Claro está que todo depende de qué entendamos por ordenación del territorio.
De hecho cabe calificar así a la primera división del mismo que ya a principios del siglo II antes de Cristo llevaron a cabo los romanos con el objetivo de controlarlo mejor. Durante la Edad Media se procedió a sucesivas divisiones que en el fondo tenían el mismo objeto que el que siglos antes habían puesto en práctica los romanos. La creación de coras por los musulmanes, o de alfoz por los castellanos, son dos buenos ejemplos de este hecho.
La ordenación del territorio en un primer momento ha de ser entendida como las políticas que se iniciaron ya en el siglo XVIII con el reformismo borbónico. Pero aquellas políticas eran muy específicas, y no iban tanto a evitar los desequilibrios entre las regiones, como a controlar mejor las mismas, siguiendo un objetivo muy parecido al de los romanos dos milenios antes.
La creación de las 49 (después 50) provincias por Javier de Burgos en 1833 fue otro impulso a ese deseo de controlar el territorio español por parte del Estado liberal decimonónico. Esa misma división, continúa siendo la que hoy día seguimos manteniendo casi dos siglos después.
El Franquismo ya inició durante la década de los años cincuenta un primer intento de planificar y ordenar el territorio español. Pero su intento se quedó simplemente en eso, en una propuesta que nunca llegó a ponerse en práctica de forma eficaz.
Es a partir de la promulgación de la Constitución de 1978 cuando se procede a una verdadera planificación y ordenación del territorio. Aunque todavía y casi treinta y cinco años después, quedan muchos problemas que resolver y mucho territorio por ordenar y planificar.
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Ya durante el franquismo se intentaron llevar a cabo los primeros planes para ordenar y planificar el territorio, pero nunca se llegaron a implementar de manera eficaz. Publicado por el Ministerio de la Vivienda en Wikipedia bajo licencia CC |

Pre-conocimiento
De las regiones franquistas, a las comunidades democráticas. Un cambio que no solo afecta a su denominación.
La división actual del territorio español tiene su origen en la Constitución de 1978. En ella se estableció la división en Comunidades Autónomas. Pero anteriormente existían otras divisiones que tenían más de un siglo y medio de antigüedad.
Durante el régimen de Franco se mantuvo la división tradicional de las regiones históricas. Pero esas regiones no comportaban de ninguna manera el sentido descentralizado que tienen hoy día las comunidades. Más bien eran todo lo contrario.
Se trataba de territorios que tenían unas raíces históricas que en muchos casos se remontaban hasta la Edad Media. No existía en ellos ningún tipo de organismo o administración que se encargara de la gestión de los mismos, sino que de la administración central del Estado con sede en la capital del mismo, Madrid, se pasaba directamente al control del gobernador civil de la provincia y a las diputaciones provinciales.
Hasta que se aprobó la Constitución vigente en la actualidad, no se reformó la administración pública encargada de la gestión del territorio a nivel regional o autonómico, como hoy día la denominamos.
La división tradicional de las regiones franquistas de carácter histórico tiene su origen en la división provincial que se llevó a cabo en 1833. Publicado en Wikipedia por Miguillen, bajo licencia CC |

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