8. Los sesgos cognitivos

Importante
El sesgo cognitivo es un efecto psicológico común consistente en una alteración de la información y su consiguiente juicio distorsionado. Las circunstancias exige al ser humano una constante toma de decisiones, muchas veces de forma inmediata, que implica un filtrado de la información (atajo heurístico) que, en ocasiones, conduce a análisis parciales o equivocados de las situaciones reales que se plantean. La psicología cognitiva se hace cargo del estudio de los modos en los que el cerebro procesa la información y los efectos distorsionantes que en ocasiones estos producen.
A continuación revisaremos algunos de los sesgos más comunes:
- Efecto anclaje.
Consiste en tomar como referencia la primera información que se recibe cuando se trata de tomar una decisión sobre algo.
- Efecto Efecto Dunning-Kruger.
La escasez de conocimientos o habilidades conlleva en ocasiones una visión simplista de las dificultades que el dominio de un determinado ámbito conlleva, es por eso que genera un sentimiento ilusorio de superioridad que contrasta con la cautela y la humildad mostrada generalmente por los más preparados.
- Confirmación.
Consiste en favorecer a aquello que encaja con nuestras propias creencias o que confirma aquello que creemos saber. Así, por ejemplo, al llevar a cabo una investigación, priorizar aquellas fuentes que justifican lo que se piensa sobre el tema.
- Autoservicio.
Es considerar las situaciones de éxito como el resultado del mérito propio y las de fracaso como el resultado de circunstancias desfavorables o la acción de otros.
- Optimismo / pesimismo.
Ocurre al sobreestimar la posibilidad de situaciones positivas o negativas según nuestro buen o mal humor.
- Efecto Backfire (tiro por la culata).
Ocurre cuando se presentan argumentos o evidencias en contra de creencias firmemente arraigadas. Se consideran como un ataque a uno mismo y el resultado es una reacción negativa.
- Correspondencia o sobre atribución.
Es la tendencia a sobredimensionar la importancia de factores personales internos a la hora de explicar un comportamiento de una tercera persona, restando importancia a los condicionamientos externos.
- Sesgo en el grupo.
Es la tendencia a considerar favorablemente a personas que pertenecen al mismo grupo.
- Sesgo de grupo.
Consiste a percibir menos riesgo y, por lo tanto, optar por posiciones más atrevidas dentro del grupo.
- Efecto Barnum o Falacia de validación personal.
Tendencia a considerar acertadas descripciones de uno mismo basadas en vaguedades aplicables a una amplia gama de personas.
- Falso consenso.
Ocurre al suponer que las concepciones propias son generalmente compartidas y se encuentran más extendidas entre los demás de lo que realmente lo están.
- Retrospectivo.
Es la tendencia a interpretar los eventos pasados como predecibles.
- Memoria.
Puede favorecer o perjudicar la posibilidad de que un evento pasado sea rememorado o, en su caso, distorsionarlo de un modo positivo o negativo.
- Arrastre.
Es la tendencia a interpretar que lo más popular es objetivamente lo más deseable.

Para saber más
A la hora de tomar decisiones nuestra mente toma atajos heurísticos que no ayudan a avitar la fatiga que supone llevar a cabo numerosos análisi racionales. Son los llamados atajos heurísticos. Aunque son de utilidad, en ocasiones conllevan distorsiones, como las que se abordan en este podcast de Euge Oller.
Vídeo de Euge Oller tu mente en Youtube