3.1. La escultura barroca

Hay dos grandes diferencias entre la escultura barroca española y la europea: la temática y el material. Frente a la aparición de temática mitológica y retratística en la escultura Europa, en España el único tema que se utiliza es el religioso, no en vano, el único cliente que poseen los artistas españoles es la propia Iglesia. Ya veremos, conforme nos acerquemos a los autores, como el tratamiento de esta temática también muestra diferencias, pero como idea general esto ha de quedar claro.

La otra gran diferencia es el material. Frente al uso casi único del mármol en Italia o Francia, en España se desarrolla, también casi de modo exclusivo, el tallado en madera. Frente a esas formas potentes, limpias y de claro recuerdo clásico de la obra italiana, en España se desarrolla la escultura en madera policromada, más heredera de los modelos medievales, aunque con un lenguaje muy diferente.

En cualquier caso tienes una suerte y es que la escultura barroca forma parte de nuestro ideario colectivo, ya que todas las piezas que procesionan en nuestras semanas santas mantienen exactamente la estética barroca, independientemente de las fechas en las que hayan sido talladas. De ahí que todo lo que veamos te resulte tremendamente cercano (y si vives en el centro de alguna ciudad andaluza, seguro que más cercano aún).

Actividad

A lo largo de las salas que vamos a visitar a continuación podremos conocer las obras más destacadas de cinco grandes artistas del momento. Cinco escultores, cada uno con sus características y con sus propios gustos y lenguajes estéticos, de modo que cuándo hayas terminado la visita, tendrás una visión global de lo que fue la escultura barroca en nuestro país

Gregorio Fernández

Retrato de Gregorio Fernández

Imagen en Wikimedia CommonsDominio público

El escultor gallego que desarrolla toda su obra en en Valladolid, coincidiendo con el traslado de la Corte a dicha ciudad, dónde lleva a cabo una escultura muy del gusto castellano: realista y crudo, sin concesiones a la galería. Su obra, religiosa cómo no, parte de ese gusto tan castellano por la realidad tal cual es, sin ambages, pero ojo, sin caer en la vulgaridad. Ya verás como esa característica se va a repetir en la estética castellana hasta entrado el siglo XX.

Gregorio Fernández acude, como temática casi constante, a la figura de Cristo entodos los momentos de su pasión y muerte: flagelación, “Ecce homo”, crucificados… y en todos muestra esa veracidad cruda, esos rostros dolientes o eso cadáveres sin idealización alguna. Esto tiene una carga simbólica importante, por cuanto Cristo, para los fieles castellanos, aparece convertido en hombre, en un ser humano que sufre en sus propias carnes el dolor y las heridas.

Nada hay en la obra del escultor gallego que recuerde a la grandiosidad de la obra de Bernini. Ni personajes musculosos y potentemente expresivos, ni belleza fina y sutil. Fernández es un escultor definido por la espiritualidad y también por el realismo, a veces patético, pero siempre honesto.

 

Cristo Yacente

 

Tipo: Escultura

Estilo: barroco

Localización: Iglesia de San Miguel. Valladolid

Autor: Gregorio Fernández

Fecha: 1634

Escultura en madera policromada en la que aparece Cristo yacente con todas las huellas del calvario.

El Cristo yacente es quizá el tema preferido del escultor gallego. En él puede desplegar todo ese patetismo y todo ese realismo que lleva dentro. La figura de Cristo aparece muerto y con todas las huellas del sufrimiento padecido durante la pasión. No hay concesiones, ni siquiera sensación del descanso “post mortem”, como podemos observar en ese rostro que ni siquiera tiene los ojos cerrados.

Ver esta obra en directo es realmente impresionante, en el sentido más estricto de la palabra impresionante. Si uno se imagina una procesión de este cristo por las calles de Valladolid durante el siglo XVII, cuesta no sentir un escalofrío.

Cristo Yacente de Gregorio Fernández

Imagen en Wikimedia Commons. Dominio público

Inmaculada Concepción

 

Tipo: Escultura

Estilo: barroco

Localización: La Redonda, Logroño

Autor: Gregorio Fernández

Fecha: Primera mitad siglo XVII

Frente a ese realismo tan duro pero tan honesto, Gregorio Fernández, propone una temática más sutil y amable: la Inmaculada Concepción, sin duda el tema preferido por los artistas y los fieles españoles del siglo XVII.

Fernández diseña una Inmaculada joven y devota, con una expresión dulce a la vez que intensa. Se trata, como ves, de una escultura que está a años luz de ese realismo tan duro del Cristo Yacente y más cerca de los esquemas andaluces, algo lógico teniendo en cuenta la temática elegida.

Inmaculada Concepción de Gregorio Fernández

Imagen en Wikimedia Commons. Dominio público

 

Martínez Montañés

Retrato de Martínez Montañés

de Velázquez

Imagen en Wikimedia Commons.

 Dominio público

Este artista nacido en Alcalá la Real desarrolló casi toda su obra en Sevilla, dónde se convirtió en el escultor más valorado del momento.

Su obra utiliza el mismo material que Gregorio Fernández (la madera policromada) y utiliza la misma temática religiosa (básicamente obras relacionadas con la pasión de Cristo). Sin embargo, su propuesta es completamente diferente. Al realismo sin excusas del escultor gallego, Martínez Montañés opone un tratamiento más sutil, menos cruel y más amable. Sigue sobre la base de un fuerte realismo, pero lo aleja de ese sentido de dolor casi desgarrador de Gregorio Fernández, para darle un sentido más clásico sin el dramatismo castellano.

Además, destacó su labor como retablista en el monasterio de San Isidoro del campo y como creador de un modelo inconográfico del niño Jesús y de la Inmaculada.

 

Cristo de la Clemencia

 

Tipo: Escultura

Estilo: barroco

Localización: Catedral de Sevilla

Autor: Martínez Montañés

Fecha: 1603

Cristo crucificado que mira hacia abajo justo hacia donde se situaría alguien para rezar, cansado y dolorido justo antes de la lanzada.

La primera diferencia frente al dramatismo castellano aparece con la primera visual: Cristo no está muerto, lo cual permite un rostro y una expresión física de menos intensidad. En seguida, uno percibe la otra gran diferencia y es que el crucificado apenas está manchado de sangre, apenas unos hilos le recorren los brazos y los pies debido a los clavos. A esto hay que sumarle un tratamiento de la policromía y un estudio anatómica de una calidad extraordinaria, lo que termina por generar una pieza sublime, íntima y cercana.

Este modelo de crucificado se va a convertir en un modelo que será repetido hasta la extenuación por los escultores religiosos andaluces. No sólo sus discípulos siguieron este modelo estético, sino que 400 años después, la base sobre la que se diseñan crucificados es la misma.

Cristo de la Clemencia. Martínez Montañés

Imagen en Wikimedia Commons. Dominio público

Cristo de Pasión

 

Tipo: Escultura

Estilo: barroco

Localización: Parroquia de El Salvador, Sevilla

Autor: Martínez Montañés

Fecha: 1619

Cristo nazareno, con la cruz al hombro que avanza cansado y apesadumbrado hacia su propia crucifixión.

Si el Cristo de la Clemencia se convierte en el modelo a seguir para los crucificados posteriores, los nazarenos beberán de la concepción que Montañés plantea en su Cristo de Pasión.

Este cristo con la cruz al hombro avanza despacio y esforzado camino de su crucifixión, pero no hay sentimiento de dramatismo en su rostro ni en su cuerpo a pesar de la pesada cruz que lleva a cuestas.

De nuevo vemos esa mesura realista que muestra más un dolor sentimental que físico.

Cristo de Pasión

Imagen en Wikimedia Commons. Dominio público

Estatua ecuestre de Felipe IV

 

 

Tipo: Escultura

Estilo: barroco

Localización: Plaza de Oriente, Madrid

Autor: Martínez Montañés (diseñó el busto del rey)

Fecha: 1640

Escultura homenaje al rey Felipe IV que es representado a caballo.

En esta escultura participaron quizá los mejores artistas y científicos del momento: Pietro Tacca la funde, Velázquez la diseña, Galileo hace los cálculos para que una escultura de este porte se mantenga en pie y, finalmente, Martínez Montañés esculpe el busto, resultando una de las mejores estatuas ecuestres del mundo.

Montañés se sale, como no podía ser menos, de los modelos que llevaba a cabo en madera, proponiendo un rostro serio que expresa a la perfección ese espíritu altivo y de mirada profunda propias de los reyes.

Estatua ecuestre de Felipe IV

Imagen en Wikimedia Commons. Dominio público

 

Juan de Mesa

Monumento a Juan de Mesa

Imagen en Wikimedia Commons.

 Dominio público

Juan de Mesa es el autor por excelencia de la Semana Santa sevillana. No sólo esculpe varias de las piezas que aún hoy procesionan, como los Cristos del Buen Amor o de la Buena Muerte, sino que además es autor de una de las piezas más conocidas de toda la escultura barroca: El Gran Poder.

El autor cordobés es discípulo de Martínez Montañés, algo que se puede confirmar con una sencilla mirada a sus obras.

Mantiene ese espíritu realista pero clásico, lejos de los presupuestos dramáticos de la escultura castellana, que ya había mostrado su maestro.

 

 

Jesús del Gran Poder

 

Tipo: Escultura

Estilo: barroco

Localización: Basílica del Gran Poder. Sevilla

Autor: Juan de Mesa

Fecha: 1620

Cristo nazareno que camina con la cruz al hombro hacia su crucifixión 

Estamos ante una de las figuras más emblemáticas de toda la semana santa sevillana y casi de España.

La figura de Jesús del Gran Poder fue esculpida por Juan de Mesa en 1620 siguiendo las pautas marcadas por su maestro Martínez Montañés. De nuevo un cristo que camina hacia su propia muerte, hacia su crucifixión con la cruz al hombro. Avanza triste, pero con su destino asumido, algo que Juan de Mesa traduce en un dolor calmado y sin estridencias.

Por su calidad, su capacidad expresiva y por su tradición, el Gran Poder se ha convertido en una de las piezas que más devoción recibe de toda la imaginería sevillana.

En el museo podrás disfrutar de esta obra, pero si tienes opción no dejes de verla mientras avanza por las calles de Sevilla el jueves santo de madrugada.

Jesús del Gran Poder

Imagen en Wikimedia Comoms. Dominio público

Alonso Cano

Grabado con el retrato de

Alonso Cano

Imagen en Wikimedia Commos

Dominio público

El artista granadino intenta alejarse de la estética “impuesta” por Martínez Montañés. Cano, arquitecto, pintor y ahora escultor, muestra un enorme interés por formas quizá menos reales pero algo más expresivas.

 

Inmaculada del Facistol

 

Tipo: Escultura

Estilo: barroco

Localización: Catedral de Granada

Autor: Alonso Cano

Fecha: 1656

Una pequeña inmaculada diseñada para situarse encima de un facistol, con un colorido fascinante y de belleza sutil.

Esta pequeña obra muestra ese interés de Alonso Cano por alejarse del clasicismo de Martínez Montañés. Es cierto que la pieza no es tan realista como los esquemas de Montañés, pero también lo es que plantea una imagen cándida y amable, de mirada perdida, pensativa y de recogimiento. Lo más llamativo es el colorido que utiliza, combinando el azul de la capa con el verde de la túnica. Alonso Cano no utiliza, como sí lo hace Montañés, el dorado para su policromía, lo que le confiere un color más vivo aunque, quizá, menos elegante.

Inmaculada Facistol de Granada

Imagen en Wikimedia Commons. Dominio público

Francisco Salzillo

Retrato de Francisco Salzillo

Imagen en Wikimedia Commons

Dominio público

Este escultor murciano, hijo de un escultor napolitano, vive y trabaja durante el siglo XVIII en Murcia, dónde desarrolla una intensa labor como escultor de obras que procesionan y de belenes, un gusto heredado de su padre.

Salzillo muestra una enorme capacidad para mezclar el gusto rococó tan propio del momento, con la espiritualidad propia de la escultura española.

 

Oración en el huerto

 

Tipo: Escultura

Estilo: barroco

Localización: Museo Salzillo. Murcia

Autor: Francisco Salzillo

Fecha: 1754

Grupo escultórico en madera policromada que detalla el momento en el que Jesús reza en el huerto con sus discípulos.

La escena narra el momento en el que un ángel señala un punto en el cielo mientras Jesús lo mira casi apesadumbrado. El conjunto se completa con algunos apóstoles que descansan, lo cual genera un potente contraste entre esos apóstoles dormidos cómodamente y la composición piramidal que e forma entre ese ángel que se señala el horizonte y Jesús arrodillado que sigue con su mirada lo que apunta el ángel.

La oración en el Huerto. Francisco Salzillo

Imagen en Wikimedia Commons. Dominio público



Pregunta Verdadero-Falso

Contesta si las siguientes afirmaciones son verdaderas o falsas:

Pregunta 1

  • El material más utilizado por los escultores españoles es el mármol 

Pregunta 2

  • La temática básica de la escultura española es la religiosa 

Pregunta 3

  • Martínez Montañés destacó, sobre todo, por su escultura retratística 

Pregunta 4

  • La escultura castellana tiene un estilo más austero y realista que la andaluza 

Conocimiento previo

Efectivamente, la capacidad de Gregorio Fernández para acercarse a la realidad más cruda, tal cual y sin matices es evidente en detalles como el que ves en este detalle de la mano del yacente.

Francamente impresionante.

Detalle del Cristo Yacente

Imagen en Wikimedia Commons. Dominio público

Objetivos

Martínez Montañés

Martínez Montañés es quizá el mejor de los escultores andaluces del momento. Si quieres saber algo más de su vida y de su obra, no dudes en dedicarle unos minutos al siguiente vídeo.


Martínez Montañéz

Vídeo de Miguel Ángel Vilas alojado en YouTube

Salzillo

Salzillo será el gran escultor de toda la zona levantina durante el barroco. Su formación italiana (no en vano su padre era napolitana) se percibe a la perfección en su obra. Si quieres saber algo más sobre su obra, aquí tienes un vídeo que te puede interesar:


El genio de Salzillo

Vídeo de ARTEHISTORIA alojado en YouTube

Caso práctico