La aplicación de los primeros auxilios lleva consigo una serie de técnicas que se seleccionan y utilizan en función del tipo de accidente. Por ejemplo, cuando se produce una obstrucción de las vías aéreas podemos utilizar la maniobra de Heimlich, o cuando el accidentado se encuentra sin pulso podemos poner en marcha las técnicas de reanimación cardiopulmonar.

La obstrucción respiratoria (Fernández, A., Porcel A.M., 2011) es la ocupación de la boca, nariz, faringe o laringe por objetos que dificultan o impiden totalmente la ventilación. La obstrucción de la vía aérea por un cuerpo extraño como causa de muerte accidental es poco común. No obstante, es necesario saber cómo intervenir. Para ello es necesario que diferenciemos entre obstrucciones leves o incompletas y graves o completas.

A. Secuencia ante atragantamiento en adultos

1. Si la persona muestra signos de obstrucción leve animar a continuar tosiendo y no hacer nada más.
2. Si la victima muestra signos de obstrucción grave y está consciente:
   • Aplicar cinco palmadas en la espalda, colocándose al lado y ligeramente detrás de la víctima, sujetándole el pecho con una mano y reclinando a la víctima hacia delante, de modo que cuando el cuerpo extraño se mueva salga de la boca en lugar de bajar aún más por la vía aérea.

• • Si las cinco palmadas en la espalda no consiguen aliviar la obstrucción de la vía, aplique hasta cinco compresiones abdominales (maniobra de Heimlich) como sigue: sitúese de pie detrás de la víctima y ponga ambos brazos alrededor de la parte superior del abdomen, incline hacia delante a la persona, cierre el puño y colóquelo entre el ombligo y la punta del esternón del paciente, coja la mano cerrada con la otra y empuje enérgicamente hacia adentro y arriba. Repita hasta cinco veces.

3. Si en cualquier momento la persona queda inconsciente, habrá que colocarla con cuidado en el suelo, activar inmediatamente la cadena de socorro (proteger, alertar y socorrer) e iniciar la reanimación cardiopulmonar. 

   B. Obstrucción de la vía aérea en niños y lactantes

   La diferencia más significativa respecto a la actuación en el adulto es que las compresiones abdominales no se utilizan para el tratamiento del atragantamiento en niños, aunque las compresiones abdominales pueden producir daños en todos los grupos de edad, el riesgo en lactantes y niños es particularmente elevado.

   La secuencia de actuación es siempre y en primer lugar activar la cadena de socorro. A continuación:
   
   

   1. 1. Si el niño o la niña está tosiendo de forma efectiva no es necesaria maniobra externa, solamente debemos animarle a que siga tosiendo y evaluar continuamente.
      2. Si la tos no es efectiva, determinar el nivel de consciencia del niño o la niña:
         
         
         • Si está consciente y la tos no es efectiva, dar golpes en la espalda de la siguiente forma: colocar al lactante boca a bajo, apoyado sobre nuestro antebrazo sujetándole firmemente por la mandíbula con el dedo pulgar e índice, manteniendo la cabeza ligeramente extendida procurando que esté en posición más baja que el tronco y realizar hasta cinco golpes con el talón de una mano entre ambos omoplatos.

           Si con los golpes en la espalda no se resuelve la obstrucción de la vía aérea y el niño o la niña continúa consciente, utilizar compresiones torácicas en lactantes o abdominales en niños.

           • Compresiones torácicas en lactantes: colocar al niño boca arriba sobre un brazo y sujetando la nuca con la mano y realizar cinco compresiones torácicas en la parte exterior del esternón, un dedo por encima del final del mismo.
           • Compresiones abdominales en niños: situarse detrás del niño, cerrar un puño y ponerlo contra la mitad inferior del esternón, agarrarse el puño y presionar hacia dentro y arriba hasta 5 veces, a un ritmo de una compresión cada tres segundos. Por último, comprobar la boca del niño.

Obstrucción de la vía aérea en niños y lactantes.
 Imagen alojada en Imagez. Licencia (Dominio público)

• Si el niño con obstrucción de la vía aérea está inconsciente. En primer lugar, colocar al niño sobre una superficie dura y lisa. A continuación, abrir la boca y mirar si se ve el cuerpo extraño, abrir la vía aérea utilizando la maniobra frente mentón y realizar maniobra RCP. 

Heimlich, una maniobra que salva vidas.
Video publicado por Telemadrid en Youtube

Asimismo, uno de los aspectos que también debemos tener en cuenta es el traslado de las personas accidentadas. Existen diferentes técnicas para el traslado en función de la afección y del material del que dispongamos. Aspectos que debemos tener en consideración: solo lo movilizaremos si están inmovilizadas las posibles fracturas y están controladas las hemorragias.

Las pautas para la movilización deben ser estas: 

• Brazos pegados al cuerpo y flexionados.
• Carga cerca del cuerpo.
• Usar grupos musculares fuertes.
• Flexionar rodillas y caderas (no doblar la cintura para levantar la carga).
• Evitar giros o cambios de dirección con carga. Caminar coordinado.
• Debemos asegurar la estabilidad de la cabeza y la nuca.

Pautas para la movilización

Imagen de elaboración propia