1.1. La música, elemento patrimonial

La música y la danza son una parte fundamental de nuestras fiestas.
Imagen de José García Ramos. Dominio público.

El patrimonio musical, tanto de España como de Andalucía, tiene una enorme riqueza. Los bienes que lo constituyen son muy abundantes y variados. Sin embargo, como ya hemos dicho, el musical es un campo por el que tradicionalmente los encargados de de velar por nuestro patrimonio no se han preocupado mucho. De este modo, ni siquiera existe una definición oficial de lo que es el patrimonio musical, ni está regulado qué tipo de bienes lo conformarían. Una muestra de esto es que el concepto no aparezca en el famoso diccionario de Música Española de Emilio Casares. Evidentemente, tampoco está en el Diccionario de la Lengua Española de la RAE.

Esta indefinición contrasta con el cada vez mayor uso que se viene haciendo del término últimamente. Nosotros, por intentar avanzar algo en este sentido tomaremos la afirmación que indica que el patrimonio musical es el compuesto por los bienes y composiciones musicales, tanto materiales como inmateriales, que han sido producido por una sociedad a lo largo de la historia y que contribuyen  a identificar su cultura.

Hablaríamos por tanto de dos tipos de bienes:

  • Bienes materiales. Serían los instrumentos musicales, las partituras, los libros sobre música, las grabaciones musicales (discos de pizarra, rollos de pianola, vinilos, cassettes, cds, vhs, dvd´s...), los distintos tipos de reproductores de audio, los carteles, los programas de conciertos y, en general, todos los documentos que tengan que ver con la música. También podríamos incluir los recintos en los que la música es interpretada o enseñada, tales como academias, conservatorios, teatros o salas de conciertos.
  • Bienes inmateriales. Son los que formarían parte del Patrimonio Cultural Inmaterial. La música es fundamentalmente   inmaterial porque tiene una esencia intangible, es percibida por el oído, y aunque se puede transcribir, la música es lo que suena y se oye, lo que se percibe. De esta manera, en las últimas décadas la mayoría de referencias al patrimonio musical se incluyen dentro del patrimonio intangible.

La propia UNESCO al definir el Patrimonio Cultural Inmaterial, considera que está formado por «los usos, representaciones, expresiones, conocimientos y técnicas −junto con los instrumentos, objetos, artefactos y espacios culturales que les son inherentes− que las comunidades, los grupos y en algunos casos los individuos reconozcan como parte integrante de su patrimonio cultural». Dentro de este complejo concepto, el organismo habla de una serie de campos, de los que los tres primeros están relacionados con la actividad musical:  

  1. tradiciones y expresiones orales, incluido el idioma como vehículo del patrimonio Cultural inmaterial. Aquí cabría la música como forma de transmitir mensajes, emociones, intenciones y valores.
  2. artes del espectáculo. Aquí se incluiría la música tradicional, óperas, bailes, danzas, rituales, ceremonias, etc.
  3. usos sociales, rituales y actos festivos. Es evidente que la música juega un papel primordial en el desarrollo de estas expresiones.
  4. conocimientos y usos relacionados con la naturaleza y el universo.
  5. técnicas artesanales tradicionales.
Músico nigeriano tocando el arco musical.
Imagen de Libertad y saber en Wikimedia Commons. Dominio público.
Música tradicional japonesa.
Imagen en Wikimedia Commons.  Dominio público.

Es curioso, y a la vez significativo, que de todos los bienes registrados por la UNESCO en sus diferentes listas de PCI, casi la mitad estén relacionados de algún modo con la música. Es más, dentro de las 10 representaciones españolas en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, cinco poseen contenido musical. Estas serían:

  • El misterio de Elche. Es un drama sacro-lírico religioso dividido en dos actos que se representa en el interior de la Basílica de Santa María de Elche. El texto del Misteri, a excepción de algunos versos en latín, se encuentra íntegramente escrito en valenciano antiguo y va acompañado de una música que incluye fragmentos del Medievo, del Barroco y del Renacimiento. 
  • La Patum de Berga. Se trata de una celebración tradicional propia del Corpus Christi que se desarrolla en la localidad barcelonesa de Berga. La celebración consiste en diversas representaciones de figuras místicas y simbólicas, que bailan al ritmo de la música y los tambores. Los bailes se caracterizan por su solemnidad, así como por la utilización de fuego y artefactos pirotécnicos. 
  • El Silbo gomero.  Lenguaje silbado propio de la isla canaria de La Gomera.
  • El canto de la Sibila.  Acto litúrgico de melodía gregoriana que se interpreta en lengua catalana durante la Misa de Gallo en las iglesias de Mallorca. 
  • El flamenco. Asociado indisolublemente a Andalucía, nos encargaremos de su estudio en el próximo tema.

La Patum de Berga
Vídeo de UNESCO en español alojado en Youtube

Si abandonamos lo que dice la UNESCO y avanzamos a lo que dice la legislación de nuestro país, según el Plan Nacional de Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial, están incluidas dentro de las manifestaciones de PCI en España "aquellas Manifestaciones musicales y sonoras Composiciones musicales y ejecución instrumental. Cante individual, a dúo o en agrupaciones musicales tradicionales. Orfeones y coros. Así como otros sonidos arraigados en la colectividad (percusión, sonidos asociados a las actividades laborales, mascletás, tamborradas, mapas de sonidos, etc. Como vemos, casi cualquier elemento que tenga que ver con la música es susceptible de ser considerado patrimonio.

Visto ya los tipos de bienes de los que constaría el patrimonio musical, podemos hablar ahora del valor patrimonial que pueden tener estos bienes. ¿Qué es lo que tiene que tener una canción, un disco o un instrumento para que lo consideremos como parte de nuestro patrimonio? Pues básicamente dos cosas:

  • Valor artístico. Las artes son un fenómeno social; la necesidad del ser humano de expresarse y comunicarse mediante actos creativos en determinadas disciplinas. Los griegos antiguos consideraban artes superiores aquellas que permitían gozar las obras por medio de los sentidos superiores (vista y oído), por tanto, la música estaba entre ellas. Posteriormente se estableció la existencia de seis bellas artes: arquitectura, escultura, pintura, música, literatura y danza. Determinar la calidad artística de una obra musical no es fácil. Lo que a ti puede parecerte magnífico a otro puede no gustarle, por no hablar de la diferencia de gustos y sensibilidades que existe entre las diferentes culturas. De todas formas, sí existen en cada sociedad una serie de conocimientos, códigos o criterios estilísticos que ayudan a los que los conocen a identificar el nivel de las creaciones.
  • Valor etnográfico. Como ya vimos hace meses, el patrimonio etnológico lo integra los espacios, las construcciones e instalaciones, los objetos y documentos, actividades y manifestaciones inmateriales que albergan o constituyen formas relevantes de expresión de la cultura y modos de vida de un pueblo, o de alguno de los colectivos que lo forman. Se incluyen dentro del patrimonio etnológico los bienes inmuebles, los bienes muebles y las actividades de interés etnológico. Conciertos, fiestas, danzas, oficios, instrumentos, publicaciones, teatros..., todo lo que tenga que ver con la música tradicional puede poseer valor etnográfico, ya que allí están presentes las formas de expresión y de modos de vida de toda una comunidad.
El jaleo, obra del pintor John Singer Sargent.
Imagen en Wikipedia. Dominio público.

Para saber más

LA ETNOMUSICOLOGÍA. 
Antropóloga grabando a jefe indio.
Imagen de Harris & Ewing en Wikipedia. Dominio público.

La etnomusicología es una disciplina académica que se interesa por el estudio de las culturas musicales de todo mundo, partiendo de la idea de que la música constituye un recurso cultural y humano fundamental en el desarrollo de individuos, pueblos y culturas.  Entiende la música como un hecho cultural y la relaciona con sus contextos sociales, por lo que su principal preocupación será el valor etnográfico de la música. Dentro de su campo de estudio están todas todas las músicas del mundo, incluidas las denominadas músicas populares, folclóricas y tradicionales, por lo que es evidente que su principal preocupación es el valor etnográfico de la música. 

Es una disciplina, por tanto, que está relacionada muy directamente con la antropología cultural, pero también tiene fuertes lazos con la musicología, la psicología, la sociología o la historia. Mientras que el tema tradicional de la musicología siempre ha sido la historia y la literatura del arte musical occidental, la etnomusicología ha optado por la música del mundo como un fenómeno humano social y cultural. Al ser entendidas hoy día las músicas tradicionales como parte del patrimonio cultural, es evidente que la etnomusicología debe cobrar importancia en el estudio del patrimonio musical de una sociedad, ya que nos ofrece la posibilidad de adentrarnos en una cultura a través de la comprensión de sus fenómenos musicales.

El ámbito de investigación de un etnomusicólogo puede ser cualquier tipo de música de cualquier sociedad, sin limitarse a ninguna zona en concreto y estando siempre abierto a todos los aspectos que pueden ser estudiados a través de la música. Sin embargo, en un primer momento, la música de occidente quedó momentáneamente excluida de la etnomusicología, por lo que son pocos los trabajos de este campo en España, si bien es cierto que cada vez hay más interés, ya que una investigación antropológica de nuestra música puede hacernos descubrir características culturales y sociales de nuestra civilización que aún no conozcamos.

Comprueba lo aprendido

Indica si las siguientes afirmaciones son correctas.

Pregunta 1

El concepto de patrimonio musical no ha sido aún suficientemente bien definido y delimitado por las instituciones.

Pregunta 2

Un disco de vinilo puede perfectamente ser considerado como un bien material que forma parte patrimonio musical de una comunidad.

Pregunta 3

Casi ninguno de los bienes registrados por la UNESCO en sus diferentes listas de PCI están relacionados con la música.

Pregunta 4

El canto de Sibila se trata de una celebración tradicional mallorquina propia del Corpus Christi.

Pregunta 5

La música no está tradicionalmete considerada entre las bellas artes.

Importante

Entendemos patrimonio musical como el compuesto por los bienes y composiciones musicales, tanto materiales como inmateriales, que han sido producido por una sociedad a lo largo de la historia y que contribuyen  a identificar su cultura.  Tanto el de España como el de Andalucía, son de una enorme riqueza. Nos encontramos con dos tipos de bienes:

  1. Bienes materiales. Serían los instrumentos musicales, las partituras, los libros sobre música, las grabaciones musicales, reproductores de audio, los carteles, los programas de conciertos y, en general, todos los documentos que tengan que ver con la música. También podríamos incluir los recintos en los que la música es interpretada o enseñada.
  2. Bienes inmateriales.  La música es fundamentalmente   inmaterial porque tiene una esencia intangible, es percibida por el oído, y aunque se puede transcribir, la música es lo que suena y se oye, lo que se percibe.

Dentro de las 10 representaciones españolas presentes en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, cinco poseen contenido musical: El misterio de Elche, la Patum de Berga, el Silbo gomero, el canto de la Sibila y el flamenco.

Básicamente, creemos que hay dos cosas que deben tener un bien musical para ser considerado patrimonio:

  • Valor artístico.
  • Valor etnográfico.