2.1. El Camino de Santiago y la catedral de Compostela

Importante

El camino de Santiago permitió la entrada del románico en España. Además favoreció el desarrollo económico de la zona.

Descubrimiento del sepulcro de Santiago e inicio de las peregrinaciones

Parece ser que sobre el año 813 un ermitaño llamado Pelayo empezó a observar resplandores misteriosos en el bosque de Libredón, cerca del cabo de Finisterre. Informó inmediatamente al obispo de Iria Flavia (cerca de Padrón) que se desplazó al lugar descubriendo un sepulcro con los cuerpos de Santiago el Mayor (evangelizador de Hispania) y sus dos discípulos Teodoro y Anastasio. El entonces rey de Asturias, Alfonso el Casto, organizó un viaje al lugar convirtiéndose así en el primer peregrino y mandó edificar una pequeña iglesia. El enorme prestigio que proporcionaba la presencia de estas reliquias, fue aprovechado por los monarcas asturianos y leoneses para consolidar su posición frente a Al-Andalus y darse a conocer al resto de la cristiandad.

Pronto, la orden de Cluny se hizo eco del hallazgo y promovió las peregrinaciones mientras los reyes incentivaron la construcción de una red de monasterios cluniacenses en torno al Camino. A partir del siglo X se intensificó la afluencia de peregrinos que llegaban desde toda Europa. El espaldarazo definitivo de esta peregrinación llegó cuando se concedió en el siglo XII la posibilidad de que los peregrinos obtuviesen la indulgencia plenaria en los Años Santos Compostelanos, aquellos en los que el 25 de Julio, festividad de Santiago, coinciden en domingo.

Camino francés
Camino francés
Imagen en Wikipedia de jynus bajo CC

El camino de Santiago fue y es hoy día una de las rutas de peregrinación más importantes del mundo. En la Edad Media significó la apertura de España a Europa ya que a través de la ruta jacobea llegaron aportaciones culturales, artísticas, intelectuales del continente además de favorecer el desarrollo económico en la zona. 

El camino se convirtió en aglutinador de inversiones: iglesias, hospitales para el refugio de peregrinos, puentes para que ellos cruzaran, mercados… y, cómo no, la Catedral de Santiago.
Todas estas construcciones requerían artesanos, canteros, escultores… que provenían de diversos lugares, normalmente de Francia, y que traían un espíritu y una concepción estética parecida. Así fue como un estilo surgido en Francia se establece por toda Europa Occidental. Así es como, 600 años después de la caída del Imperio Romano, Europa vuelve a tener un lenguaje artístico similar, aunque con variedades locales, lo cual le confiere aún  más riqueza.
Por lo tanto el Camino permite ese trasiego de artistas, de canteros, pero también de dinero y, más importante aún, ese trasiego de ideas que permiten recuperar cierta uniformidad artística cientos de años después.

A lo largo del camino que conducía a la catedral de Santiago de Compostela, se edificaron las construcciones más grandiosas de las llamadas iglesias de peregrinación, un modelo de iglesia que tuvo su origen en el románico. 

Estas construcciones responden en su planta, alzado... a las necesidades y exigencias rituales para la adoración de las reliquias y la afluencia de gran cantidad de peregrinos.

Es muy característica la girola o deambulatorio con capillas radiales en torno al altar mayor, lo cual facilita el tránsito de peregrinos y deja libre el frente del altar mayor. Otra solución que permitió el flujo continuo de visitantes fueron las portadas en los extremos de la nave del transepto.

Sin duda el mejor ejemplo de iglesia de peregrinación es la propia Catedral de Santiago de Compostela, pero merece la pena fijarnos en algunos ejemplos sobresalientes que encontramos en el Camino.

 

Importante

Las Iglesias de peregrinación surgidas a lo largo del camino de Santiago responden a las nuevas necesidades de culto. Por ello surgen recursos como la girola o deambulatorio que permitían el trasiego de peregrinos por la iglesia sin molestar el culto que pudiera celebrarse en la nave central.
Interior de Santa Magdalena de Vézelay
Interior de Santa Maghdalena de Vezelay
Imagen en Flickr de mll bajo CC

Vézelay

En realidad, el origen del románico deberíamos buscarlo en la famosa abadía de Cluny. Sin embargo, ésta no sobrevivió a las ansias anticlericales de la revolución francesa y de ella solo quedan restos. Así que tendremos que ir a Vézelay. Aquí se inicia uno de los cuatro caminos de Santiago “oficiales” con el punto de salida en una maravillosa iglesia, conocida como Sta. María Magdalena.

Arquitectónicamente hablando, Vézelay presenta algunas novedades: una planta de cruz latina con una larguísima nave central de más de 60 metros, un crucero que apenas sobresale de la anchura de la planta y un amplio nártex que sirve de introducción a la belleza interior.

Las bóvedas son de arista, de modo que su peso descarga mejor sobre los arcos fajones y formeros, pudiendo así, abrir vanos más grandes, mejorando ostensiblemente la iluminación del interior.

Quizás lo que resulta más llamativo de su interior es el uso de bicromía en los arcos fajones: es el mismo esquema que se utiliza en la Mezquita de Córdoba, que a su vez es el mismo que los romanos utilizaron en el acueducto de los Milagros, en Mérida.

Toulouse

La Iglesia dedicada a San Sernín, construida en torno al siglo XII, repite claramente el esquema básico de una iglesia de peregrinación: planta de cruz latina con 5 naves, la central cubierta con bóveda de cañón y las laterales con bóveda de arista. Esquema que se repite en el crucero. El ábside semicircular aparece organizado en torno a una girola o deambulatorio y acompañado por 9 absidiolos (4 de ellos en los brazos del crucero), lo que permitía multiplicar las capillas en las que orar.

Lo más característico de esta iglesia (además de respetar fielmente los preceptos de las iglesias de peregrinación) es la enorme altura que llega a tener la nave central, algo que se obtiene gracias al triforio, el cual permite una mayor iluminación interior.

Planta de San Sernín  Interior de Saint-Sernin
Planta de San Sernín
Imagen en Wikipedia de JMaxR bajo CC
Interior de Saint Sernin
Imagen en Wikipedia de Pom2 bajo CC

Jaca

Taqueado jaqués y Canecillos
Taqueado jaqués y canecillos
Imagen en Wikipedia de Ecelan bajo CC

Aquí comienza el camino francés en su territorio peninsular. Ya hemos pasado el duro trago de cruzar los Pirineos y ya miramos hacia el oeste, en busca de la tumba del santo apóstol. A pie, nos queda aproximadamente un mes de camino, aunque igual tardamos algo más porque en algunos sitios deberemos pararnos para disfrutar y aprender de algunas obras románicas realmente maravillosas.

La primera de estas maravillas es la Catedral de Jaca, uno de los ejemplos más antiguos del románico español ya que su construcción data de finales del siglo XI.
Su exterior es fráncamente interesante, con multitud de elementos decorativos, como columnas adosadas, canecillos… Aunque lo más llamativo y que más influencia tendrá en las iglesias del Camino de Santiago será un motivo decorativo consistente en una decoración geométrica ajedrezada que se conoce como “taqueado jaqués”.

 

San Juan de la Peña

No lejos de la ciudad de Jaca tenemos uno de los monumentos que seguro más te va a sorprender de este viaje: El monasterio de San Juan de la Peña. Este edificio es también de finales del siglo XI y en origen fue una pequeña ermita que poco a poco fue creciendo. La iglesia del monasterio es interesante, pero lo que queremos que veas es el claustro. Éste presenta las características básicas de los claustros: espacio cuadrangular en cuyo perímetro se disponen columnas con capiteles rícamente decorados.
¿Qué tiene de original, por lo tanto, esta obra? Pues su cubierta. Antes te habíamos dicho que este monasterio parte de una antigua ermita, sí, pero no te habíamos comentado que esta ermita se hizo excavando la roca. De este modo, gran parte del claustro solo está cubierto por las paredes de la gran roca que cobija parte del monasterio.

San Juan de la Peña
Claustro de San Juan de la Peña
San Juan de la Peña
Imagen enWikipedia de Elemaki bajo CC
Claustro de San Juan de la Peña
Imagen en Wikipedia de Sergio bajo CC

Iglesia de San Martín de Frómista

Esta iglesia fue elevada en el siglo XI. El exterior es, sin duda, lo más llamativo, gracias a las dos torres circulares que flanquean la fachada de la iglesia y al potente cimborrio octogonal que remata el crucero. Todo esto, unido al uso de unos sillares perfectamente cortados y dispuestos y a la aparición de estrechos vanos, confiere a la iglesia un aspecto potente y severo, algo que se ve matizado gracias al abocinamiento de los arcos que enmarcan los vanos y las portadas y al uso del taqueado jaqués que, como decíamos antes, va a ser constante a lo largo de las iglesias del Camino de Santiago.

San Martín de Frómista
Planta de San Martín de Frómista
San Martín de Frómista
Imagen en Flickr de R. Jiménez bajo CC
Planta de San Martín de Frómista
Imagen en Wikipedia de J.M Benito bajo CC

León

La basílica de San Isidoro de León es una iglesia construida en el siglo XII que se mantiene fiel a las características del románico: uso de sillares, muros anchos y potentes, pilares cruciformes, planta de cruz latina con tres naves, la central con bóveda de cañón y más alta que las laterales, que se cubren con bóveda de arista… Pero falta una de las características del arte medieval (y de todos los estilos artísticos en realidad), la influencia de los elementos locales, la cultura andalusí. No podía ser de otro modo, mucha cercanía, muchos artesanos que trabajan indistintamente en una u otra zona. Los arcos que se sitúan en el crucero sosteniendo el crucero son arcos polilobulados, algo que solo aparece en España (y circunstancialmente en el sur de Italia, también cerca de zonas musulmanas) y que es una clara adaptación del lenguaje estético andalusí.

 San Isidoro de León
San Isidoro de León
Imagen enWikipedia de Archivaldo bajo CC

Caso de estudio

Indica cuál es cada uno de estos edificios. No dejes de consultar el apartado Para saber más para poder identificarlos.

 

Catedral de Santiago de Compostela

La Catedral de Santiago de Compostela es, sin duda, el mejor ejemplo de la arquitectura románica, más incluso que las obras francesas ya comentadas. No en vano, era el punto culminante de la peregrinación más importante de la Edad Media.

La construcción de la catedral empezó en 1075 bajo el impulso del obispo Diego Peláez y la última piedra fue colocada en el año 1122. Finalmente se consagró en abril de 1211.

Según el Códice Calixtino, los arquitectos fueron Bernardo el Viejo y su ayudante Galperinus Robertus. Las obras quedaron paralizadas un tiempo por la destitución de Diego Peláez y no volvieron a ponerse en marcha hasta cinco años después. El primer arzobispo de santiago Diego Gelmírez es considerado la figura más importante durante la construcción. En 1168, el maestro Mateo se hizo cargo de la dirección de las obras e inició el pórtico de la Gloria.

La iglesia tiene 100 metros de longitud y una altura de más de 20 metros, algo insólito para un edificio que está a caballo entre los siglos XI y XII. Esta altura se consigue gracias al uso del triforio (que también servía para alojar peregrinos) y el uso de arcos peraltados que aumentan las dimensiones del arco y la bóveda. Todo esto permite una iluminación sorprendente si lo comparamos con otras catedrales del momento.

Planta de la catedral de Santiago
Planta de la catedral de Santiago
Imagen en Wikipedia de J.M. Benito bajo CC

La catedral utiliza la planta de cruz latina que se articula en tres naves: la central más alta y ancha que las laterales, está cubierta por una bóveda de cañón, mientras las naves laterales tienen bóvedas de arista. Sobre dichas naves laterales se alzan tribunas que asoman a la nave central. A los pies de la catedral se sitúa el nártex, en el que se alza el Pórtico de la Gloria.

Como elementos sustentantes se utilizan los pilares cruciformes con columnas adosadas, organizadas de forma tal que la columna que mira hacia la nave central se eleva a lo largo de toda la altura de la misma, hasta alcanzar el inicio del arco fajón correspondiente.

En los extremos de la nave del transepto se sitúan dos portadas al exterior que facilitan el tránsito de peregrinos por la catedral.

La cabecera de la catedral es de amplias dimensiones y dispone de cinco capillas radiales en su girola o deambulatorio, más otras dos capillas en cada brazo del crucero. Sobre el crucero (lugar donde se cruzan la nave principal y la del transepto) se alza un cimborrio.

Todo el espacio interior del templo está organizado de manera que los fieles (tras concluir aquí su peregrinación hasta la tumba del apóstol Santiago) pudiesen acceder a la catedral por la portada de los pies y recorrerla hasta llegar a la girola, en cuyo espacio central se encuentra el sepulcro del apóstol. Todo este camino interior del edificio permite que puedan desarrollarse sin interferencias las ceremonias religiosas.

En el exterior, la catedral cuenta con una plaza que la precede y una fuente que servía a los peregrinos para asearse.

De todas las fachadas de la actual catedral, la única que data del románico es la de Platerías, situada en el extremo sur de la nave del transepto.

Fachada de Platerías
Fachada de Platerías
Imagen en Wikipedia de Yearofthedragon bajo CC

El grupo escultórico de la puerta izquierda representa a Cristo tentado por un grupo de demonios. En las jambas se sitúan San Andrés y San Moisés, y en el contrafuerte izquierdo el rey David sentado en su trono, es una de las obras más importantes del conjunto. Estas figuras procedían en realidad de la fachada norte y fueron colocadas aquí en el siglo XVIII.

En la puerta derecha, su tímpano representa varias escenas de la pasión de Cristo.

La fachada alberga once columnas (tres de ellas de mármol y el resto de granito). En la central se presetentan a los profetas y en las laterales a los apóstoles.

En el centro del friso se sitúa a Cristo bendiciendo acompañado de Santiago. A su derecha está San Juan y una escena de la expulsión del paraíso. En un medallón aparece el Padre Eterno con las manos abiertas y rodeado de dos ángeles que tocan cuernos.

En origen había dos torres románicas a ambos lados de la fachada.

Cabe destacar también el pórtico de la Gloria, el conjunto escultórico más importante del románico y del que encontraréis más información en el apartado 2.3. Escultura y pintura románica.

Debemos mencionar que se observa la influencia de la arquitectura prerrománica en el uso de contrafuertes exteriores y de la musulmana en los arcos polilobulados existentes en la fachada de Platerías. De la zona leonesa toma el uso de las bóvedas de cañón y de arista.

Arcos polilobulados de la fachada de Platerías
Arcos polilobulados de la fachada de Platerías.
Imagen en Flickr de amaianos bajo CC

Caso de estudio

En los siguientes dos minutos te recomendamos que te centres en el vídeo que te proponemos. Una vez visto, responde a las siguientes cuestiones.

 

    1. ¿Quién fue el promotor de la Catedral y cuándo?

    1. ¿Cuáles son las características de la arquitectura de peregrinación que podemos ver en la Catedral de Santiago?

    1. ¿Cómo se cubren las naves de la Catedral?

  1. ¿De qué estilo es la portada actual de la Catedral?