1. La descripción.
Describir es explicar con palabras cómo es un una persona, un lugar o una cosa.
Sin embargo, una misma cosa puede tener diferentes puntos de vista según la persona que la vea. Por esto decimos que existen dos tipos de descripciones:
- Descripción objetiva: cuando expresamos de forma real las características de aquello que queremos describir. Este tipo de descripción se usa para transmitir contenidos, ideas o conocimientos , es decir, cuando queremos dejar claro aquello que explicamos. Por esto se uso un lenguaje riguroso a la vez que un estilo sencillo. Este tipo de descripciones se encuentran principalmente en los libros de texto, diccionarios, textos científicos o de divulgación, etc.
- Descripción subjetiva: es la usamos para expresar nuestros sentimientos, opiniones o sensaciones a partir de un lugar, objeto o persona. Es la que usa sobre todo en literatura, por lo que puede aparecer un léxico especialmente embellecido.
Imagen de Nguyen bajo licencia CC
El orden que se debe seguir al hacer una descripción difiere si se trata de descripción de personas o de lugares u objetos.
En la descripción de personas se pueden detallar los rasgos físicos, el carácter o las dos. Si se describe lo físico se suele partir del aspecto general para luego ir señalando otros elementos menores como los ojos, la boca o el cabello.
Al describir un lugar o un paisaje sigue los pasos siguientes:
a) Se suele presentar primero una visión general.
b) Luego se van situando en ese lugar los distintos elementos (sustantivos) con palabras que indican situaciones en el espacio (preposiciones, adverbios, locuciones..., por ejemplo: al fondo, arriba, en el centro...).
c) Los objetos, a su vez, pueden estar matizados con palabras que indiquen sus cualidades (adjetivos), o que transmitan las impresiones que el lugar causa en nosotros: misterio, alegría...
Observa, por ejemplo, la descripción de una plaza que realiza Miguel Delibes:
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Imagen de Juan Pablo Orradre bajo licencia CC
Cuando tengas que realizar una descripción ten en cuenta los consejos siguientes:
- Sigue un orden. Empieza por ejemplo dando una visión general y luego ve entrando en detalles.
- Para seguir el orden es importante tomar un punto de referencia. Puede ser a partir de nuestro punto de vista o de algún otro punto significativo.
- Evita las adjetivaciones vagas e imprecisas.
- No seas pobre adjetivando, tampoco excesivo. Procura buscar adjetivos precisos y certeros.
- La escasez de adjetivos da un ritmo ligero al texto.
- La abundancia de adjetivos le confiere un ritmo lento.
- Sé variado en el vocabulario. Por ejemplo, no uses siempre los mismos verbos para indicar posición. Recurre a sinónimos o verbos que indiquen una idea semejante: "está, se encuentra, se sitúa, se ubica, se alza, aparece, se distingue..."
- Lee muchos y buenos textos: la lectura de los grandes maestros te ayudará a desarrollar tus habilidades descriptivas.
- Revisa varias veces lo que hayas escrito y corrige todo lo que no te suene bien.
- Haz siempre uso de un buen diccionario (o recurre a los existentes en la red).

Objetivos
a) Entra en este enlace y sigue los pasos que te indicamos:
b) Entra también en este recurso. Realiza las actividades que encuentres aquí; aunque sobre la descripción, los ejercicios específicos se hallan a partir de la Actividad 6.