3. Sismicidad, vulcanismo y tectónica de placas

Zonas de actividad volcánica
Los puntos de la superficie terrestre en los que se manifiesta la mayor liberación de energía térmica y mecánica (volcanes y terremotos) viene a coincidir con los límites de las Placas litosféricas.
Imagen de la NASA en Wikimedia commons. Dominio público

La Tierra libera parte de su energía interna a través de la litosfera, pero lo hace  precisamente en los límites entre las placas, en forma de energía mecánica o térmica.

El flujo térmico y la actividad magmática y volcánica

La actividad volcánica es una forma de liberar calor mediante la emisión de lavas y gases y  se produce principalmente en los límites de placas, especialmente en los divergentes (dorsales) y convergentes (subducción).

Las dorsales, con flujo térmico superior (de 2 a 50 veces) a la media de las llanuras abisales, constituyen límites entre placas donde los procesos magmáticos y volcánicos crean nueva litosfera. El calor emitido por la corteza oceánica en las fosas es sólo la cuarta parte del de las dorsales, ya que son zonas más antiguas y frías. Sin embargo, cuando se produce subducción, el flujo térmico vuelve a ser alto, ya que se genera calor en la fusión de las rocas subducidas (introducidas por debajo de otra placa).

Objetivos

Como veremos en un próximo tema, el vulcanismo producido en las dorsales y fondos oceánicos es de tipo máfico (basáltico) o de composición más parecida al manto, mientras que el producido en las zonas de subducción (arcos volcánicos insulares y continentales), es de tipo andesítico o intermedio, ya que los magmas están más diferenciados o contaminados con rocas de la corteza.

La distribución de las zonas de actividad sísmica

Profundidad de focos sísmicos

Localización de los hipocentros superficiales, intermedios  y profundos en una zona de subducción
Imagen modificada de USGS en Wikimedia commons. Dominio público

Aunque las fallas transformantes y las zonas de dorsales presentan cierta actividad sísmica, generalmente de modo puntual y de magnitud media o baja, no obstante las zonas del planeta que acumulan más del 90 % de la actividad sísmica, son los bordes convergentes.

Las ondas sísmicas, además de reflejar las propiedades de las rocas que atraviesan, delatan también cómo se movió la falla que las produjo.

Al proyectar en un plano vertical los focos de los sismos que se producen en las zonas de subducción, estos se sitúan a lo largo de planos inclinados en el sentido del avance de la placa que subduce. Dichos "planos de Wadati-Benioff”, llamados así en honor a sus descubridores, se han estudiado en casi todas las zonas de subducción del planeta: sus ángulos varían entre 30 y 60º y la disposición de los sismos refleja el movimiento y actividad de la placa subducente.

En este enlace puedes ver una aplicación del Instituto Smithsoniano, donde se van localizando en la superficie terrestre las erupciones volcánicas (triángulos rojos) y los terremotos (puntos celestes) ocurridos  desde 1960.

Actividad

Al proyectar en un mapa los puntos que registran  mayores erupciones volcánicas, que coinciden “groso modo” con las zonas de epicentros de los mayores terremotos detectados, observamos que coinciden con los límites de las grandes placas litosféricas.

Pregunta Verdadero-Falso

Indica si las siguientes afirmaciones son verdaderas o falsas

Pregunta 1

1. Los planos de Wadat-Benioff aparecen asociados a los límites de placas litosféricas.

Pregunta 2

2. Tanto en las zonas donde se crea litosfera oceánica como en las que se destruye, existe actividad volcánica.

Pregunta 3

3. Casi el 50 % de la actividad sísmica del planeta se sitúa en las zonas de subducción (planos de “Wadati-Beniof”) .