


LOCALIDADES
Localidades que la integran: Sevilla - Alcalá de Guadaira - Carmona - Écija - Marchena - Osuna - Estepa - La Roda de Andalucía - Fuente de Piedra - Humilladero - Mollina - Antequera - Archidona - Loja - Alhama de Granada - Huétor Tájar - Moraleda de Zafayona - Montefrío - Íllora - Chauchina - Fuente Vaqueros - Santa Fe - Granada.
Esta ruta recorre los pasos que en 1829 siguió el escritor romántico y diplomático norteamericano Washington Irving, fascinado por la riqueza y el exotismo de la civilización hispano-musulmana. Una arteria de comunicaciones establecida muchos siglos antes y que en la baja Edad Media sirvió de vía comercial entre el sur peninsular cristiano y el reino nazarí de Granada. Ruta que como otras, tuvo un marcado carácter fronterizo. De tregua en tregua, salían para Granada desde las campiñas sevillanas productos agrícolas y ganado, que se trocaban por especias, colorantes, paños y sedas.
PAISAJE HISTÓRICO
Los viajes de Washington Irving lo condujeron a España, un país que con el correr del tiempo se convirtió en uno de sus preferidos.
Al recorrer el paisaje que configura esta ruta, describe la campiña sevillana, la comarca de Antequera, la Vega y los Montes Occidentales. El paisaje se caracteriza por los espacios llanos cultivados y algunas elevaciones importantes en el sur de Antequera, donde se encuentra el Torcal y la Sierra de Abdalajís, en los Montes Occidentales con la Sierra de Parapanda y sus pinares y es muy similar al que observó y describe en el capítulo introductorio de sus Cuentos de la Alhambra.
Esta ruta podría llamarse "ruta de la saca", pues la vía comercial se estableció por primera vez entre los reinos de Granada y Castilla, después del tratado de 1244 para que los nazaríes, en tiempos de paz, pudiesen avituallarse en tierras cristianas de algunos productos de subsistencia. Muchas de estas localidades fronterizas eran puertos comerciales. Hacia Granada iban productos alimenticios y ganado y desde ésta llegaban a tierras sevillanas especias, colorantes, productos medicinales, telas, paños y sobre todo seda.
Hay que señalar igualmente la riqueza monumental de la zona, ya que en casi todos los hitos se conservan fortalezas o murallas musulmanas: Carmona, Marchena, Mollina, Antequera, Archidona, Loja, Montefrío, Illora, o bien otras construcciones musulmanas tales como los puentes de Riofrío y Pinos Puente. De edificios religiosos sólo se conserva el alminar árabe incluido en la ermita de la Virgen de Gracia de Archidona y la mezquita de Cuatrohabitán en Alcalá de Guadaira. A ello debe sumarse el inconmensurable patrimonio artístico musulmán de las ciudades de Sevilla y Granada. Por lo demás, es conocida la riqueza monumental de los pueblos sevillanos, especialmente Osuna, aparte de los dólmenes neolíticos que se pueden encontrar en Montefrío o Antequera.
UN POCO DE HISTORIA
El extenso territorio surcado por la ruta de Washington Irving constituye una de las zonas de más antiguo y denso poblamiento de la Península Ibérica. Desde el inicio el viaje abundan vestigios de las culturas del Neolítico y los metales, del mítico reino de Tartesos, de los pueblos ibéricos y de la notable presencia de Roma. La llegada de los musulmanes en el 711 inauguró un nuevo ciclo que conllevó la inserción de nuevos pobladores y la expansión de la cultura urbana de al-Andalus. Hasta el siglo X, cuando el protagonismo político y cultural de al-Andalus gravitaba en torno a Córdoba, Sevilla, Écija o Elvira, aparecen activos focos más o menos sometidos, según las circunstancias, a los emires omeyas. La fragmentación del Califato en una multitud de reinos de taifa en el siglo XI desplazó el centro de gravedad del poder en al-Andalus al eje de la ruta que nos ocupa. Sevilla, corte de los abbaditas, del rey al-Mutadid y su hijo el poeta al-Mutamid, y Granada, capital de los ziríes, se erigieron en los polos principales, incorporando a sus reinos otros estados menores como el de los birzalíes de Carmona. En los siglos siguientes, los imperios norteafricanos respaldaron el predominio de Sevilla y Granada. Los almorávides, impulsores de un amplio programa de fortificación de ciudades y castillos, tuvieron en Granada uno de sus puntos de apoyo fundamentales. Los almohades, a su vez, continuaron su obra, al tiempo que hacían de Sevilla la capital de su imperio en al-Andalus, engrandeciéndola hasta convertirla en una de las mayores ciudades de Occidente. En el siglo XIII, sin embargo, el eje Sevilla-Granada cambió de carácter. Después de la batalla de las Navas de Tolosa, el avance cristiano resultó imparable, y tras la caída de Córdoba y la campiña del Guadalquivir medio, le tocó el turno a Sevilla. En noviembre de 1248 Fernando III recibió las llaves de la ciudad de su último gobernante musulmán. La rendición arrastró una vasta zona de influencia, hasta Estepa y los límites del recién creado reino nazarí, con capital en Granada. En la nueva situación y hasta el ocaso del estado granadino en 1492, este camino histórico mantuvo su vitalidad, como “ruta de la saca”, línea comercial entre cristianos y nazaríes y como vía estratégica en época de conflicto. Los incontables hechos de armas que terminaron con la conquista de Granada, han sido una inagotable fuente de inspiración de romances y leyendas y, más tarde, de artistas y escritores románticos.
La artesanía constituye uno de los capítulos más consistentes de esta ruta. Famosa es la cerámica de los alfares del barrio sevillano de Triana, vidriada, pintada a mano, con una viva gama cromática. Tienen así mismo una nutrida representación en estos municipios la guarnicionería y otros oficios del cuero, forja, vidrio, la artesanía relacionada con la Semana Santa, la encuadernación y fabricación de instrumentos musicales, la ebanistería, la elaboración y restauración de muebles y coches de caballos, los bordados y trenzado con fibras vegetales, la talla en piedra y madera, trabajos de metal en hierro y latón, la albardonería, talabartería, la confección de objetos de esparto, la alfarería y cerámica de Fajalauza, las taraceas, la orfebrería y joyería.
FECHAS DE LA HISTORIA DE AL-ANDALUS
711 Llegada de los musulmanes a la Península.
756 El príncipe omeya Abd al-Rahman I proclama el emirato independiente de al-Andalus.
822 Prosperidad de al-Andalus bajo Abd al-Rahman II.
879 Alzamiento del muladí Umar Ibn Hafsun, que ocupa el sur de Córdoba y Jaén.
929 Abd al-Rahman III pacifica al-Andalus y se proclama primer califa, príncipe de los creyentes, de Córdoba.
1031 Caída del califato cordobés; surgen los reinos independientes de Taifas.
1085 Alfonso VI conquista Toledo.
1091 Los almorávides extienden su poder en al-Andalus y ponen fin a los reinos de Taifas.
1146 Al-Andalus se incorpora al imperio almorávide.
1198 Se termina la Giralda.
1212 Derrota musulmana en la batalla de las Navas de Tolosa.
1231 Al-Ahmar Ibn Nasr funda la dinastía nazarí.
1236 Fernando III de Castilla conquista Córdoba.
1238 Se inicia la construcción de la Alhambra.
1240 Fernando III domina el valle central del Guadalquivir.
1246 Jaén se entrega a los cristianos.
1248 Conquista de Sevilla por Fernando III.
1314 Comienzan las obras del Generalife.
1341 Alfonso XI conquista Alcalá la Real.
1410 El infante D. Fernando rinde la ciudad de Antequera
1462 Conquista de Archidona
1482 Se inicia la guerra final de Granada. Boabdil arrebata el trono a su padre.
1483 Boabdil es apresado en la batalla de Lucena.
1486 Los Reyes Católicos se apoderan de Loja, Montefrío, Íllora y otras plazas en los alrededores de la Vega.
1487 Toma de Málaga.
1489 Rendición de Almería.
1491 El último Rey de Granada firma las capitulaciones de Santa Fe, que suponen la rendición del reino nazarí.
1492 El 2 de enero Isabel y Fernando entran en Granada.