1. Factores de los que depende el aprendizaje

El aprendizaje motor es un área que, junto con el desarrollo motor y el control motor, definen lo que sería el comportamiento motor.

A través del comportamiento motor se pretende comprender las variables que determinan la eficacia del aprendizaje y la ejecución de una tarea motriz.

Importante

Como ya se vio en el tema anterior, se entiende por aprendizaje motor la modificación de conductas motrices (es decir, las que ya realizamos o hemos realizado y están almacenadas en nuestra memoria) por otras nuevas, con carácter más o menos permanente y de una mayor complejidad y eficacia, lo que conlleva que un sujeto sea competente motrizmente hablando.

Decimos que los sujetos son competentes motrizmente cuando “manifiestan que saben lo que tienen que hacer y, además, lo realizan”.

En el campo de la actividad física y el deporte este aprendizaje se realiza mediante la práctica o realización de actividades o tareas motrices, que serán diseñadas para conseguir el máximo rendimiento, es decir, máxima competencia en el menor tiempo posible.

Cuando “manifiestan que saben lo que tienen que hacer y, además, lo realizan” (Ruiz, 1994b).

Importante

Famose (1992) define la tarea motriz como “una actividad autosugerida o sugerida por otra persona que implica practicar una o varias habilidades y destrezas motrices siguiendo pautas adecuadas para realizarlas con eficacia”.

El proceso de aprendizaje no es lineal. Los alumnos-deportistas no aprenden de la misma manera y en el mismo tiempo. Esta característica es debida a numerosos factores, que pueden alterar los resultados.

Estos factores van a estar relacionados, por un lado, con el sujeto que practica, por otro con el contexto en el que se desarrolla la práctica, es decir, factores relacionales, sociales, ambientales, culturales, etc., (Álvarez, 2007) y por último, con las características del proceso de enseñanza-aprendizaje, refiriéndonos a la selección de las tareas, su transmisión a los deportistas y la corrección de errores.

Todos estos factores harán que se produzca el aprendizaje de una actividad físico-deportiva y, según el carácter de este aprendizaje, se consiga el mantenimiento del alumno-deportista en la actividad o bien se produzca el abandono de la misma (Lozano, García-Cueto y Gallo, 2000; Dosil, 2004).