1.1. Técnicas de dirección, organización y dinamización de actividades
1.1.1. La dirección
Se puede entender la dirección de diferentes formas. Según la personalidad y el estilo de cada entrenador se puede hablar de guiar, aconsejar, orientar, gobernar, regir, etc. (Real Academia Española, 1992). Sea cual sea el matiz escogido, en todos el entrenador deberá asumir el papel de director, es decir, su función consistirá fundamentalmente en establecer las condiciones en que se van a desarrollar las actividades. Para ello debe tener en cuenta:
- La adecuación de la tarea a realizar a las características de los deportistas o el equipo.
- El diseño de las progresiones en las tareas, tanto en su dificultad como en su organización, creando contextos de trabajo variables.
- Proporcionar a los deportistas información de referencia y conocimiento de los resultados.
- Establecer las normas o reglas que van a regir al equipo.
- En su caso, acotar las responsabilidades de cada miembro de la comisión técnica o grupo técnico de trabajo.
- Observar las conductas de los alumnos, tanto motoras como de convivencia.
1.1.2. La organización
En primer lugar deberemos diseñar el entrenamiento en casa. Para ello tendremos en cuenta algunos factores:
- Esquema de la sesión: esquema concebido de antemano. Los objetivos, contenidos y actividades deben seguir una línea común y estar relacionados.
- Tiempo del entrenamiento o sesión: el tiempo de duración del entrenamiento se distribuye en tres partes, inicial, principal y final de forma compensada. La suma del tiempo de duración de la parte inicial y final nunca puede superar el tiempo de la parte principal. Igualmente, cada tarea a trabajar deberá tener previsto un tiempo de ejecución.
- Distribución racional de los contenidos: los objetivos se alcanzan gracias al aprendizaje de los contenidos, por lo que estos deben estar distribuidos racionalmente en función de su dificultad en las distintas actividades, siendo el diseño de estas muy importante.
- Participación activa: la organización del entrenamiento debe garantizar la máxima posibilidad de participación al jugador/equipo.
1.1.3. La dinamización
Dinamizar supone activar, estimular, buscando la máxima eficiencia en la actividad. Algunos requisitos técnicos de la organización de los entrenamientos son:
- Máximo aprovechamiento del tiempo de práctica. Utilizar el máximo tiempo del que disponemos para practicar.
- Eficiencia en la utilización y distribución de los recursos materiales necesarios y disponibles. Sin olvidar máximas condiciones de seguridad. Crear contextos de aprendizaje-entrenamiento.
- Máximo aprovechamiento del espacio. La intención es utilizar al máximo el espacio del que disponemos y facilitar el desarrollo de las actividades, la comunicación entre todos los participantes y las evoluciones por el espacio del entrenador y de los deportistas. Su organización dependerá de la instalación, de los recursos materiales, del número de deportistas, de las características de las tareas, etc.
- Máxima participación de las personas. Buscar que los deportistas participen activamente el máximo tiempo posible durante la sesión de entrenamiento.
- Control de posibles contingencias. Tener previstas, es decir controladas, nuestras respuestas o modos de actuar ante situaciones que puede que ocurran o no a lo largo de un entrenamiento. Por ejemplo: una lesión, un golpe, una discusión entre deportistas, etc.
- Desarrollar un buen clima afectivo y dinámica general de la clase o sesión. Para que el entrenamiento se desarrolle de un modo agradable para entrenadores y deportistas es importante implicar a los participantes en las tareas de organización, cuidado del material, responsabilidad, colaboración, ayuda mutua, etc.
- Otros aspectos a tener en cuenta en la organización didáctica de la sesión de entrenamiento son: (los citamos y posteriormente los desarrollaremos)
- Estructuración del grupo.
- Situación y desplazamiento del grupo.
- Situación y desplazamiento del profesor.
- Control y estructura de la actividad/pausa.
- Nivel de decisión del profesor y participación del deportista.
Aumento ordenado en la dificultad de una acción.
Logro que un deportista debe alcanzar después de un proceso de enseñanza-aprendizaje-entrenamiento.
Objeto a aprender-entrenar. Pueden ser conceptuales, procedimentales o actitudinales. Saber, saber hacer y saber estar.
Acciones que realiza el deportista para aprender-entrenar un contenido y alcanzar un objetivo. Ejemplos: ejercicios, juegos, formas jugadas.
Conseguir un objetivo utilizando el mínimo de recursos posibles.
Entorno físico o de situación en el que se desarrolla una actividad.
Posibilidad de que una cosa suceda o no suceda.