5. Llegan los malos tiempos. La crisis del siglo III y su repercusión en Hispania.


Hasta ahora hemos visto la situación teórica de Hispania desde su conquista hasta el momento de máximo esplendor del Imperio romano, que podríamos situar en el siglo II d.c. Sin embargo el esplendor de Roma comenzó a declinar a partir del siglo III, notándose el inicio de una importante crisis desde este momento.
¿Qué fue lo que le pasó a Roma y cómo afectó a Hispania? Interpretaciones sobre la crisis y caída del Imperio romano ha habido muchas desde hace siglos, y seguro que el tema seguirá siendo motivo de estudio. Pero resumiendo mucho, vamos a señalar los aspectos que parecen más importantes:
  • Roma había basado su riqueza económica en un sistema de conquistas militares y explotación sistemática de los territorios ocupados. Su potente maquinaria militar, que era muy costosa, era rentable siempre y cuando hubiera nuevas conquistas, nuevos botines y multitud de esclavos capturados que servirían de mano de obra barata para el desarrollo de la economía. A partir del siglo III el imperio había alcanzado unos límites difícilmente ampliables. Sin nuevas conquistas la maquinaria militar de Roma, su ejército, se convertía en un costoso aparato que consumía mucho más de lo que podía aportar, pero que seguía siendo necesario para proteger unas fronteras tan amplias.

Reconstrucción de un fortín defensivo en la frontera de Germania,
18. Fotografía de SBT en Wikimedia Commons, licencia Creative Commons
  • Un ejército a la defensiva y aburrido en los confines del imperio se convirtió en el peor enemigo de Roma. En el siglo III se inició una espiral de golpes de estado provocados por generales que, desde las provincias y al mando de sus legiones, a falta de otra posibilidad de gloria se dedicaron a intentar acceder al trono imperial por la fuerza de las armas. (235-268).

  • Otro aspecto importante de la crisis de Roma fue el propio cambio en la composición de sus ejércitos, lo que explica bastante su comportamiento. Cada vez se fue haciendo más necesario recurrir a mercenarios extranjeros para proteger las fronteras.

Representación de un enfrentamiento entre tropas romanas y tribus germánicas en un sarcófago de mediados del siglo III
19. Fotografía de Jastrow en Wikimedia Commons, dominio público
  • Ante la debilidad de Roma y el abandono de las fronteras por parte de legiones que se enfrentaban entre ellas por llevar al poder a sus generales, muchas tribus fronterizas vieron la ocasión de invadir territorios romanos y someterlos a la devastación y el pillaje.

  • En el caso de Hispania el siglo III fue testigo, por ejemplo, del desembarco de tribus norteafricanas, que después de asolar el territorio romano de la otra orilla consiguieron pasar a la Bética y someterla a pillaje. Estos pueblos norteafricanos eran conocidos por los romanos como mauros, de donde deriva la palabra castellana moros.

 

 

  • En este contexto de caos la economía de todo el imperio sufrió una crisis enorme de la que ya no levantaría cabeza hasta su hundimiento. El comercio se resintió por la falta de seguridad en los caminos y mares, la producción artesanal no encontraba salida y la economía de muchas ciudades se hundió.

  • Al mismo tiempo en el mundo agrario se estaban produciendo cambios. Los esclavos eran cada vez más caros y mantenerlos bajo control se hacía más complicado. Los grandes propietarios tuvieron que cambiar el sistema esclavista por otro más rentable ante la nueva situación, que se conoce como colonato. Se trataba de usar a campesinos libres como mano de obra, o de liberar a los propios esclavos y darles algunas parcelas para su subsistencia a cambio de seguir contando con su trabajo y servicios. Para algunas personas convertirse en colono suponía dejar la esclavitud, por lo que mejoraban su condición. Pero también se hicieron colonos pequeños propietarios libres que cedieron su propiedad y su trabajo a grandes señores que podían ofrecerles protección ante la inoperancia del Estado para garantizar el orden público. En definitiva, los campesinos siervos que consideramos típicos de la Edad Media empezaron a aparecer en el período final del Imperio romano.

Objetivos

El agrónomo hispano Columela habla sobre los colonos. 

El propietario de un terreno debe preocuparse atentamente de todas las cosas relacionadas con la propiedad, y en particular de las personas que se encuentran en ellas. Estas últimas se dividen en dos categorías: colonos y esclavos. Con los colonos debe ser condescendiente, debe tratar de afrontar sus necesidades. El amo no debe insistir demasiado en sus derechos y las obligaciones que de ello derivan para el colono, como por ejemplo el cumplimiento exacto de los plazos de pago, la provisión de leña y otras cosas de menor importancia...

Lucio Volusio, hombre extraordinariamente rico, afirmaba que  la propiedad que en mejores condiciones se encontraba era aquella que tuviera colonos establecidos en el lugar desde hacía mucho tiempo y que hubieran pasado al propietario por herencia... 

Columela, Sobre la agricultura, Libro I.

Reflexión
Trata de reflexionar sobre las siguientes cuestiones.

 

1. Columela habla de plazos de pago al propietario por parte de los colonos. ¿A cambio de qué crees que tenían que pagar?

2. A parte del pago de cantidades al propietario, los colonos tenían otras obligaciones. ¿Puedes deducir alguna además de la que se menciona en el documento?

3. Trata de pensar como un terrateniente hispano del siglo III. ¿Qué ventajas tenían los colonos sobre los esclavos?


El emperador Constantino

20. Fotografía de Jastrow

en Wikimedia Commons,

dominio público

El emperador Teodosio.

21. Fotografía de Altermandarin en

Wikimedia Commons,

licencia Creative Commons

  • Un último aspecto que refleja la crisis del imperio romano a partir del siglo III es la expansión del cristianismo. De ser considerado una secta de judíos, prohibida y perseguida por su negación a aceptar el culto al emperador, el cristianismo pasó a ser una religión universal que ganaba adeptos por todas las provincias del imperio y que ofrecía, en unos tiempos de crisis y desesperación, consuelo y solidaridad a sus adeptos.

El cristianismo ganó tanto terreno y seguidores que a comienzos del siglo IV, en el 313, el emperador Constantino lo legalizó y pasó a ser una más de las religiones aceptadas por el poder.

En el año 380 un emperador hispano, Teodosio proclamó el cristianismo como única religión del imperio.

 



Toda esta situación general repercutió en Hispania como en cualquier otra parte del imperio a partir del siglo III.  Cuando el cristianismo se convirtió en religión oficial, la Iglesia hispana se organizó imitando la estructura administrativa romana en la península. Cada provincia tenía un jefe religioso a su cabeza (arzobispo) y cada conventus un responsable que residía en la ciudad principal del distrito (obispo).
 
 
Ante la crisis de la autoridad imperial y el vacío de poder que iba creciendo, a comienzos del siglo V, a punto de producirse las invasiones definitivas que acabaron con el Imperio romano, podríamos decir que la Iglesia se había convertido en la única institución bien organizada y que los obispos empezaban a ser la máxima autoridad en sus respectivas ciudades.

No será de extrañar, por tanto, que cuando lleguen los nuevos invasores sea la Iglesia la que negocie con ellos, la que trate de defender a la población hispana y la que, a falta de un poder político, organice la sociedad y el gobierno según sus criterios. Cuando consiga además convertir al cristianismo de Roma a los nuevos señores del territorio, su poder estará asegurado por siglos.

Objetivos

La Hispania romana entra en crisis (resumen en vídeo)

 

En el siguiente enlace encontraremos un breve resumen en 3 minutos de algunos aspectos de la crisis del período final del Imperio en Hispania.


Reflexión

Si has atendido al vídeo y a los contenidos te será fácil saber la respuesta a las siguientes preguntas.

1. ¿Qué quiere decir que a partir del siglo III el Imperio romano se ruralizó?

2. ¿Quiénes se convirtieron en la principal autoridad de sus ciudades ante la crisis de las instituciones políticas?

3. ¿En qué cambió la orientación de las villas rurales romanas a partir del siglo III?