4. El cambio: materia y forma, potencia y acto

Fotografía en Flickr de Negu. Bajo licencia Creative Commons.

Imagínate un paseo por el campo en primavera: flores, animales... Y piensa en ese mismo campo en otoño. ¿Ha cambiado, verdad? En su estudio de la naturaleza, es decir, en la Física, el tema del cambio es fundamental para Aristóteles. ¿Por qué cambia la naturaleza, cómo lo hace? Con otro ejemplo lo vamos a ver claro. Si pensamos en cuando éramos un bebé y nos vemos ahora, veremos con claridad que hemos cambiado, y también que seguimos siendo los mismos. ¿Qué podemos decir de esos cambios? ¿Cómo cambia la naturaleza? ¿Cómo pasa una semilla a convertirse en una planta?

Aristóteles distingue estos tipos de cambio:

• Sustancial: que puede ser de generación o corrupción. Por ejemplo, una planta puede nacer y puede morirse.

• Accidental: puede ser cuantitativo, cualitativo y locativo.

Con estos tipos de cambio, Aristóteles recurre a su conocida teoría de la materia y la forma para explicar el fenómeno de cómo cambian la naturaleza. Es conocida como su teoría hilemórfica. Resumidamente, defiende que la naturaleza se compone de materia y forma. La primera es el objeto de cambio, la segunda es la que hace que todo sea lo que es. Por ejemplo, la materia madera puede tener la forma árbol y la forma mueble sin dejar de ser madera, pero o es un árbol o es un mueble.

La segunda teoría que utiliza Aristóteles para explicar el cambio es la de la potencia y el acto. El acto es lo que una cosa es (por ejemplo una semilla de un naranjo) y la potencia lo que una cosa puede llegar a ser (esa semilla puede llegar a ser un naranjo, aunque aún no lo sea).

¿Habías oído antes la palabra "metafísica" o expresiones como "no te pongas metafísico? ¿Qué quiere decir? Vamos a ver que tiene mucha relación con la obra de Aristóteles? La expresión "Metafísica" proviene de una ordenación de la obra de Aristóteles que se llevó a cabo en

Para nuestro autor, la metafísica es el estudio del ser en general, La forma  principal  de ser es ser como sustancia, como sujeto, aunque también cabe ser como accidente, como propiedades que tienen su existencia en otra cosa. Dicho de otra manera: "Luis", "mar" o "lápiz" son sustancias. Y "guapo", "frío" o "rojo" son accidentes.

 

Aristóteles desarrolló su teoría de las cuatro causas para dar cuenta de los cuatro principios que, según él, se encuentran implicados en cualquier acontecimiento.  El conocimiento de la razón de la existencia de un ser cualquiera nos conduce a la pregunta por sus causas, por  los principios que lo explican.

Imagínate que nos encontramos con una estatua de bronce que representa al dios Zeus.  El conocimiento de las razones que justifican su existencia nos llevaría a pensar en estos cuatro  principios o causas:

Causa material,  aquello de lo que está hecho: el bronce.
Causa formal,  la disposición de la materia, lo que algo es:  la figura de Zeus.
Causa eficiente, el agente que lo que lo ha producido: el escultor.
Causa final,  su propósito: embellecer un templo.

Imagen en Wikipedia con licencia C.C.