5.2. El funcionamiento de la Unión Europea

Bandera de la Unión Europea. Imagen de UE en europa.eu. Permiso de reproducción en los términos establecidos por la UE.

La Unión Europea no llega a ser una federación como Estados Unidos, ya que está formada por estados que siguen siendo soberanos e independientes. Pero es más que una simple cooperación entre estados, como la ONU, ya que cada todos los estados miembros ponen en común una parte de su soberanía. Eso significa que los países miembros ceden a las instituciones europeas parte de su poder de decidir en algunas materias que afectan al interés común. Eso no significa que tú y yo, como ciudadanos, perdamos poder de decisión, ya que la Unión Europea es un sistema democrático y representativo, en el que los ciudadanos elegimos a nuestros representantes directamente, o bien a través de nuestros gobiernos nacionales, a los que hemos elegidos democráticamente.

Para saber cómo funciona es necesario conocer sus principales instituciones. Vamos a verlas.

a) Principales instituciones de la Unión Europea

1. El Parlamento Europeo

Parlamento Europeo en Estrasburgo. Imagen de David Iliff en Wikimedia Commons. Licencia CC.

Representa a los ciudadanos europeos, que eligen democráticamente a los 751 eurodiputados que componen el Parlamento. Cada país elige a más o menos eurodiputados en proporción a su población. Por ejemplo, en las Elecciones Europeas de 2014 los ciudadanos españoles eligieron 54 eurodiputados. Los eurodiputados son elegidos por un período de 5 años. En su trabajo en el Parlamento estos eurodiputados no se agrupan por países, sino por tendencias políticas, formando grupos parlamentarios similares a los de cualquier parlamento nacional.

Entre sus funciones principales están las siguientes:

• Comparte con el Consejo de la Unión Europea el poder legislativo y la aprobación de los presupuestos.
• Supervisa y controla la actividad de otras instituciones de la Unión Europea.
• Su apoyo es necesario para nombrar al Presidente de la Comisión Europea y al resto de la Comisión, a la que puede forzar a dimitir.

2. El Consejo Europeo y el Consejo de la Unión Europea

Frente al Parlamento Europeo, que representa directamente a los ciudadanos europeos, estos dos consejos representan a los gobiernos de los países miembros. Pero es importante que no los confundas, porque tienen funciones muy diferentes.

2.1. El Consejo Europeo

El Edificio Europa, en Bruselas (Bélgica) es la sede del Consejo Europeo y el Consejo de la Unión Europea. Imagen de Samyandpartners en Wikimedia Commons. Licencia CC.

Está formado por los Jefes de Estado (por ejemplo nuestro rey) o de Gobierno (por ejemplo nuestro presidente) de los países miembros. También asisten el Presidente de la Comisión Europea y el Alto Representante para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad. Sus funciones principales son las siguientes:

• Fija las grandes prioridades políticas de la Unión Europea, que luego deberán desarrollar y concretar las otras instituciones europeas.
• Establece la política exterior y de seguridad común.
• Nombra algunos cargos importantes en la UE, por ejemplo dentro de la Comisión o del Banco Central Europeo.
• El Presidente del Consejo Europeo representa a la Unión Europea ante el resto del mundo.

2.2. El Consejo de la Unión Europea

Está formado por los ministros de los países miembros, que se reúnen según el tema del que se trata (por ejemplo, si se trata de un tema educativo, van los ministros de Educación, y si se trata de agricultura, pues van los ministros de Agricultura). Cada país ejerce la presidencia por turno (aunque el Alto Representante para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad preside las reuniones cuando se trata de política exterior). Sus principales funciones son las siguientes:

• Comparte con el Parlamento Europeo el poder legislativo y la aprobación de los presupuestos.
• Coordina las políticas de los países miembros.
• Desarrolla la política exterior y de seguridad común siguiendo las indicaciones establecidas por el Consejo Europeo.

3. La Comisión Europea

Edificio Berlaymont (Bruselas), sede de la Comisión Europea. Imagen de Andersen Pecorone en Flickr. Licencia CC.

Es lo que podríamos llamar el gobierno de la Unión Europea, es decir, su órgano ejecutivo. La forma un equipo o colegio de 28 comisarios, uno de cada país miembro. Entre ellos se encuentra el Alto Representante para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, que viene a ser el ministro de Asuntos Exteriores de la Unión Europea. El mandato de la Comisión dura 5 años, igual que el Parlamento.  El Presidente de la Comisión es propuesto por el Consejo Europeo al Parlamento, teniendo en cuenta los resultados de las Elecciones Europeas. El Parlamento debe aprobarlo por mayoría. Las principales funciones de la Comisión son las siguientes:

• Proponer leyes al Parlamento y al Consejo de la Unión Europea.
• Elaborar los presupuestos para que los aprueben el Parlamento y al Consejo de la Unión Europea.
• Aplicar las leyes europeas y asegurarse de que se cumplen.
• Gestionar el día a día de la UE.

Estas son las principales instituciones que abarcan al conjunto de la Unión Europea. Existen otras muchas. Entre ellas podemos destacar los dos tribunales europeos:

• El Tribunal de Justicia es el tribunal de última instancia en asuntos legislados por la Unión Europea (o sea, el tribunal más alto al que puedes apelar si entiendes que se ha hecho contra ti algo no permitido por la legislación europea y los tribunales españoles no te dan la razón).
• El Tribunal de Cuentas controla las finanzas de la Unión Europea.

Pero también existen instituciones que solo afectan a una parte de la Unión Europea. Nos referimos a aquellos países que han elegido una vía más rápida de integración económica: la Unión Económica y Monetaria, popularmente conocida como Zona Euro. Vamos a detenernos en ella.

Imagen de elaboración propia a partir de mapa en Wikimedia Commons (dominio público). Pulsa en la imagen para ampliarla.

b) El euro

19 de los 28 países miembros de la Unión Europea han avanzado más que los demás en su integración económica europea. Son los miembros de lo que se conoce como zona euro o eurozona. Estos países:

• coordinan sus políticas económicas y fiscales;
• comparten una política monetaria común;
• comparten una moneda común, el euro.

En principio, todos los restantes países de la UE tendrían que integrarse en el futuro en la zona euro, salvo Dinamarca (y lógicamente Reino Unido, que abandona la UE), pero antes tendrán que cumplir una serie de requisitos que aún no han cumplido.

El Banco Central Europeo dirige la política monetaria de los países de la zona del euro. Su función principal es mantener la estabilidad de los precios para garantizar el poder adquisitivo del euro. Además supervisa a los bancos de la Eurozona. En el tema que hemos dedicado al dinero ya hemos visto algunos de los procedimientos que emplea para ello: decide cuántos euros deben circular, influye en los tipos de interés, establece las reservas mínimas legales que tienen que tener los bancos, en momentos de dificultad compra deuda pública...

c) La actividad de la Unión Europea

La Unión Europea busca conseguir una serie de objetivos que han acordado los países miembros. Entre ellos podemos destacar los siguientes:

• un mercado común en el que circulen libremente las mercancías, los servicios, los capitales y las personas;
• el desarrollo económico, científico y técnico;
• la reducción de las desigualdades entre las regiones de Europa y el refuerzo de la cohesión entre ellas;
• la protección del medio ambiente;
• la creación de una sociedad más justa, la protección de los derechos de los ciudadanos y el refuerzo de la democracia;
• la protección de la salud de los ciudadanos y los derechos de los consumidores;
• la seguridad interior;
• la defensa de los intereses de Europa en el exterior;
• la cooperación para ayudar al desarrollo de otras regiones del mundo;
• la conservación del patrimonio cultural europeo.

Para cumplir esos y otros objetivos se necesitan al menos dos cosas: normas y recursos económicos.

En el marco de la Unión Europea la capacidad de hacer leyes se distribuye entre los estados miembros y la propia UE de la siguiente forma:

• La Unión Europea ha recibido de los estados miembros la competencia exclusiva para legislar en algunas materias.
• En muchos otros temas la Unión Europea tiene competencias compartidas con los estados.
• En otros ámbitos la Unión Europea tiene competencias de apoyo, lo que significa que puede hacer leyes para complementar la acción de los países miembros.
• Finalmente, la Unión Europea tiene competencia para tomar medidas que garanticen que los estados miembros coordinan sus políticas económicas, sociales y de empleo, así como para desarrollar la política exterior y de seguridad común.

En cuanto a los recursos económicos, la Unión Europea funciona con un presupuesto, de forma parecida a como lo hace España o Andalucía. Las principales fuentes de ingresos de la UE son las siguientes:

• los derechos de importación sobre los productos que vienen de fuera de la UE.
• las aportaciones de los países miembros, que son un porcentaje del IVA que recauda cada país y una contribución proporcional al tamaño de la economía de cada país.

Los ingresos recaudados por la Unión Europea permiten, de entrada, pagar su funcionamiento (instituciones, empleados...). Pero sobre todo permite financiar numerosas inversiones destinadas a promover el desarrollo europeo y a reducir las diferencias económicas entre las regiones. La política agraria común (PAC) y las políticas de desarrollo de las regiones más pobres son los principales destinos de estas inversiones. A través de esas políticas se consigue una redistribución de las rentas de las regiones más desarrolladas hacia las regiones menos desarrolladas. O sea, que de esa forma la UE realiza una política redistributiva similar a la que vimos que se realiza en el marco del presupuesto nacional o autonómico.

Viñedo en Montilla (Córdoba). La Política Agraria Común (PAC) es uno de los principales apartados de gasto de la Unión Europea. Sus objetivos actuales son garantizar la suficiente producción de alimentos en Europa, la seguridad alimentaria de los europeos y el desarrollo sostenible de las comunidades rurales. De hecho, eso significa que la UE mantiene en el sector agrario una política proteccionista con respecto a otros países. Imagen de Víctor Fernández Salinas en Flickr. Licencia CC.

Son numerosas las ventajas de pertenecer a la Unión Europea. Vamos a mencionar algunas de las principales:

• Ha enriquecido la oferta disponible para los consumidores europeos y ha aumentado su protección.
• Ha proporcionado un amplio mercado a las empresas europeas y ha abaratado su funcionamiento.
• Ha favorecido la especialización y ha aumentado la competitividad de las economías europeas.
• Los ciudadanos europeos han aumentado sus posibilidades de formación, de promoción profesional y de enriquecimiento cultural.
• Los países del euro tienen una moneda fuerte y estable.
• Los países europeos pueden defender mejor sus intereses en el contexto internacional al actuar unidos.

Muchísimas infraestructuras en España no habrían podido construirse sin la ayuda de los fondos europeos. Un ejemplo de ello es el AVE. Imagen de dewet en Flickr. Licencia CC.

Por supuesto, todo lo que tiene ventajas también tiene sus inconvenientes. Por ejemplo, los estados han cedido parte de su soberanía en favor de una institución que a muchos europeos les resulta lejana y difícil de entender. Además, la unión entre países con distinto nivel de riqueza y distintas estructuras sociales hace que las políticas europeas a menudo no beneficien a todos por igual. Y la mayor estabilidad que da la Unión Europea tiene como precio necesario una menor flexibilidad para adaptarse a los cambios.

En resumen, puede que la Unión Europea pueda parecer una maquinaria complicada y algo abstracta, pero su influencia sobre tu vida personal es muy grande. Piensa, por ejemplo, que tu empresa, tu explotación agraria, la atención sanitaria que recibes, la carretera por la que circulas o el salario del profesor que está escribiendo este curso pueden estar siendo financiados por fondos de la Unión Europea. Piensa en lo que te costaría llenar el depósito del coche si en vez del euro tuviéramos que importar el petróleo con una moneda más débil. Piensa en la cantidad de jóvenes que están completando su formación en otros países de la Unión Europea o en la cantidad de trabajadores españoles que han encontrado su oportunidad en ellos. Y la lista podría seguir.

Los beneficios de la UE se pueden apreciar con especial claridad en regiones como la nuestra. Andalucía es considerada dentro de la Unión Europea una región en transición, o sea, una región a mitad de camino entre las regiones más desarrolladas y las menos desarrolladas. Es así porque nuestra renta por habitante está entre el 75 y el 90 % de la media europea. Eso significa que Andalucía recibe como región más fondos de Europa que lo que aporta.