5. La existencia humana

Aristóteles

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La pregunta por la naturaleza humana se encuentra estrechamente vinculada a la del sentido de la existencia y la los principios que han de orientar la misma. Una de las posiciones más influyentes en relación con ello fue la posición de Aristóteles. De acuerdo con su visión teleológica de la naturaleza, interpreta que la finalidad de todo ente consiste en la realización de aquello para lo que está destinado. En el caso humano, su realización consistirá en el pleno desarrollo de todas sus potencias, apuntando con ello a el ejercicio de una vida virtuosa en el plano ético e intelectual. La ética y la política serían para él reflexiones vinculadas a una naturaleza que constituye una explicación y una guía para la praxis humana.

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No obstante, la suposición de una naturaleza humana única e invariable ha sido causa de un permanente debate filosófico que aún continúa en nuestros días. Aceptada por el pensamiento cristiano medieval, que percibe en la misma un designio divino, las interpretaciones al respecto fueron variadas en el periodo ilustrado y razón de crítica a partir del siglo XIX por planteamientos como los de Marx, Nietzsche, el existencialismo o el posmodernismo.

La filosofía existencialista dedica especial atención a este aspecto; esta parte, en general, de la idea de que no existe una naturaleza humana propiamente dicha. En el ser humano la existencia precedería a la existencia; un sujeto no sería otra cosa que lo que él mismo se hace. La no existencia de una naturaleza previa supondría, de acuerdo con este planteamiento, la negación de una finalidad previa o un sentido a priori de la existencia. Siendo en esencia libres e indeterminados, correspondería al propio ser humano la misión de dotar de sentido a su existencia.

Importante

Autores como Aristóteles fundamentan en la naturaleza humana el sentido de su existencia. La realización humana consistirá en el pleno desarrollo de la naturaleza humana, apuntando con ello a el ejercicio de una vida virtuosa en el plano ético e intelectual. Otros planteamientos, como los de los existencialistas, ponen en tela de juicio el supuesto de una naturaleza humana fija e invariable, negando una finalidad previa o un sentido a priori de la existencia.

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Pregunta

Todos los seres humanos compartimos una naturaleza común. en ella encontramos las reglas que deben regir nuestra vida moral y política.

Respuestas

Aristóteles

Existencialistas

Retroalimentación

Pregunta

No hay una naturaleza o esencia humana predefinida, es el propio hombre quien debe construirla.

Respuestas

Aristóteles

Existencialistas

Retroalimentación

Actividad de lectura

Así contesta el filósofo Julian Baggini a la pregunta que le hace el médico pakistaní Shamsheer Bakaf en el diario británico The Guardian

¿Qué libros pueden decirme, desde un punto de vista filosófico, qué hace que la vida merezca la pena o que valga la pena vivirla? (Shamsheer Bakaf, 27 años, doctor y científico de salud global, Pakistán)

El filósofo y autor Julian Baggini contesta:

Sorprendentemente, pocos de los grandes filósofos del mundo han abordado directamente esta cuestión. En cambio, se han centrado en una pregunta sutilmente diferente: ¿qué significa vivir bien? En su Ética a Nicómaco, Aristóteles enfatizó la necesidad de cultivar el buen carácter, encontrando el punto ideal entre los extremos dañinos. Por ejemplo, la generosidad se encuentra entre los extremos de la mezquindad y el despilfarro, el coraje entre la cobardía y la temeridad. Una visión notablemente similar se presenta en los clásicos chinos Analectas, de Confucio y en Mencio.

Sin embargo, en Occidente, milenios de dominio cristiano crearon la suposición de que la vida necesitaba alguna justificación fuera de sí misma. A medida que la creencia religiosa disminuyó, la cuestión de si la vida vale la pena vivir surgió como una preocupación central para los existencialistas franceses del siglo XX. La esencia de su respuesta no fue muy inspiradora: la vida es absurda, así que tienes que seguir adelante y crear tu propio significado. Si estás listo para el desafío, puedes ampliar tu información leyendo "El existencialismo es un humanismo" de Jean-Paul Sartre y "El mito de Sísifo" de Albert Camus.

Más recientemente, los filósofos anglófonos han ofrecido respuestas más positivas al juntar hilos en su tradición que previamente han estado separados. Dos buenos ejemplos de esto son "La vida a examen", de Robert Nozick, y "10 buenas preguntas sobre la vida y la muerte", de Christopher Belshaw.

Si eso no fuera suficiente, está mi "¿De qué va todo esto?", cuyo objetivo es mostrar cómo la filosofía no responde tanto a las grandes preguntas, sino que nos proporciona recursos para responderlas por nuestra cuenta.

Enlace al artículo (24/06/2018)

Imagen de The Guardian. Captura de pantalla. 

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