1. Oración y proposición

Oración y proposición
 Imagen derivada de un original en Flickr de Evelyn Saenz bajo CC
Sabemos que una oración es una secuencia de palabras, situada entre dos pausas y con entonación propia, que posee un verbo en forma personal. Entre sus características, además, destaca que posee sentido completo e independencia sintáctica, es decir, que es posible entender su significado sin que este dependa de otra unidad superior.
No obstante, un enunciado oracional puede tener uno o más núcleos del predicado, lo que nos permite distinguir entre dos tipos distintos de oraciones:
  • Oración simple: aquella que contiene un único verbo en forma personal (por ejemplo: "Tengo mucha hambre hoy").

  • Oración compuesta: la que posee más de una forma verbal (es el caso del siguiente ejemplo: "Tus amigos son muy aburridos pero iré con ellos al cine"). 

En una oración compuesta, cada uno de los verbos que la componen admite sujeto y complementos; esto es, cada una de las formas verbales funciona como núcleo de un conjunto de palabras que presenta la estructura sintáctica de las oraciones. Veamos el ejemplo anterior: en este caso ("Tus amigos son muy aburridos pero iré con ellos al cine") encontramos dos verbos distintos ("son", "iré") que funcionan como núcleos de sus respectivos predicados. En efecto, ambas formas verbales tienen sus propios complementos ("muy aburridos", "con ellos al cine") y poseen un sujeto ("tus amigos", "yo") al que referirse.

Cada una de estas secuencias de palabras de una oración compuesta que posee estructura oracional se llama proposición. Por lo tanto, siguiendo el ejemplo que hemos visto previamente:

 

 Proposiciones

 

La principal diferencia entre la oración y la proposición es que esta última, por sí sola, no posee sentido completo, sino que depende semánticamente de una unidad superior, que es precisamente la oración. Así, para significar plenamente, la proposición "Tus amigos son muy aburridos" necesita relacionarse con el otro enunciado que completa la frase "pero iré con ellos al cine".

Veamos un nuevo ejemplo para comprender mejor el concepto de proposición: "Si yo suspendo matemáticas, mis padres se enfadarán mucho". Esta secuencia de palabras conforma una oración compuesta que posee dos núcleos "suspendo" y "se enfadarán". Cada uno de esos verbos constituye un predicado que, a su vez, supone la existencia de dos proposiciones "Si yo suspendo matemáticas", "mis padres se enfadarán mucho". Estas proposiciones, que juntas forman una unidad mayor, la oración, carecen de independencia semántica de forma aislada: para que "mis padres se enfaden mucho" tiene que darse la condición de que "yo suspenda matemáticas". 

 

Proposición 2

Importante

Todas las oraciones compuestas están constituidas por proposiciones. Una proposición:
  • No es independiente, puesto que está integrada en una estructura mayor: la oración (compuesta).

  • No posee sentido completo.

  • Incluye un verbo en forma personal o en forma no personal (infinitivo, gerundio o participio), que forma su propia estructura "Sujeto-Predicado", es decir, este verbo tendrá su propio sujeto y podrá tener sus complementos.

Hemos señalado anteriormente que las proposiciones, contrariamente a la oración simple, pueden tener como núcleo del predicado formas no personales del verbo (el infinitivo, el gerundio o el participio). Este es el caso de los ejemplos que siguen:

  • "El médico me ha recomendado caminar todos los días". El infinitivo "caminar" es el núcleo del predicado de la proposición subrayada.

  • "Asustado por el ruido, el perro huyó de la casa". El participio "asustado" es el verbo de la primera proposición.

  • "Aun leyendo el texto varias veces, no logro entenderlo". En este ejemplo, es un gerundio ("leyendo") el que actúa como núcleo de la proposición destacada.

A este respecto, es importante no confundir los núcleos de estas proposiciones con lo que conocemos como perífrasis verbales. Para diferenciarlos, tenemos que tener en cuenta que las perífrasis verbales son una combinación de dos formas verbales (una forma verbal conjugada más un verbo en forma no personal) que actúan como un único núcleo del predicado, contrariamente a lo que ocurre en las oraciones compuestas, en las que encontramos dos o más predicados distintos. Veamos los dos siguientes ejemplos:

Tengo que comprar un coche. Quiero comprar un coche.

En el primer caso, el verbo "tener" pierde su significado original ("poseer") para expresar una obligación, formando un único núcleo del predicado junto con el verbo no personal "comprar"; se trata, por lo tanto, de una perífrasis verbal. En el segundo caso, el verbo "querer" mantiene intacto su valor semántico ("desear"); en esta segunda oración, así pues, encontramos dos proposiciones distintas: "Quiero" y "comprar un coche". 

Pregunta de Selección Múltiple

Pregunta

Revisa las siguentes oraciones e indica cuáles de ellas son simples.

 

Respuestas

1. ¡Y todavía no ha llegado!

2. Subió al tren antes de que le llamaran la atención.

3. ¿Puedes dejarme tu jersey esta noche?

4. Se dice que regaló mucho oro a su exótica princesa.

5. He decidido luchar por lo que pienso.

6. Voy a verte muy pronto.

7. Me gusta mucho la ópera italiana.

8. Los delincuentes han sido descubiertos por la policía científica.

Retroalimentación

Caso de estudio

Lee atentamente este curioso texto de Julio Cortázar y distingue las oraciones y las proposiciones que aparecen en él.

 


Tortuga

Imagen derivada de un original
en Flickr de Michael Bentley bajo CC

 

Tortugas y cronopios

 

Las tortugas son grandes admiradoras de la velocidad y es natural. Las esperanzas lo saben y no se preocupan. Los famas lo saben y se burlan. Los cronopios sacan la caja de tizas de colores y sobre la redonda pizarra de la tortuga dibujan una golondrina.

 

Julio Cortázar

Actividad de rellenar huecos

Indica el número de proposiciones que contienen las siguientes oraciones. Escribe la respuesta correcta correspondiente (un número entre el 1 y el 5, ambos inclusive) en cada una de las celdas de la columna de la izquierda del cuadro.

 

Número
 Frase de ejemplo
   Lo bueno si es breve, es dos veces bueno.
   Aunque me gusta que me digas que soy guapo, no me convencerás si solo me halagas.
   El año pasado hicimos muchas cosas: jugamos al fútbol, viajamos, aprendimos.
 
 Con pan y vino se anda el camino.
 
 No te compraré el coche de juguete aunque llores y patalees.

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